Capitulo 30

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James no había podido mantener la cuenta de cuanto tiempo llevaba ahí pese a que lo intentó. Se dedicó a observar lo mejor que pudo el lugar dónde lo habían dejado, que era bastante parecido a las áreas comunes dónde podía compartir con los otros niños cuando era más pequeño.

El techo era alto, liso y de color gris, al igual que las paredes y además de la puerta no había nada más que brindara una salida. No se explicaba como el lugar se mantenía en una buena temperatura siendo que él no veía de dónde podrían estar regulando eso.

El ruido de la puerta interrumpió su exploración y aunque tragó saliva con nerviosismo no se movió de dónde estaba, para no demostrar ninguna pizca de temor. Él era el hijo del capitán américa, además, Nat siempre le dijo que nunca debía demostrar al enemigo que estabas asustado.

-Entonces si es cierto.- La voz gruesa y rasposa de un hombre llegó a sus oídos pero la luz del pasillo que contrastaba con lo lúgubre de la habitación hacía sombra ante su cuerpo lo que no permitía verle el rostro. Aún así, por la voz no pudo reconocer de quién se trataba por lo que supo que no lo conocía.- Lo encontraste.

-Si señor, cómo se lo prometí.- Esa voz si la conocía. El hombre que lo separo de su padre.- Ya llevamos tres.

-¿De cuantos?.

-Poco más de veinte.

-¿Sólo tres de poco más de veinte?.

-Bueno señor, lo que pasa es que creemos que a los otros los tiene...bueno, usted sabe quién.

-Claro, ese maldito no perdería oportunidad.- El hombre dio algunos pasos hasta por fin quedar en una buena posición para que James le viera la cara. Definitivamente nunca lo había visto pero espantaba.

-De todos modos seguiremos intentando.

-Está bien, conseguiste al que me importaba.- Sonrió con malicia y con una de sus manos tomó el rostro de James presionando sus mejillas.-¿Que es más importante? ¿Tener habilidades físicas o ser un inspirador de naciones?.

-No lo sé señor.

-No te preguntaba a ti.- Dijo mientras soltaba a James, quién ahora lo miraba con furia.

-Oh claro, A-04 responde.

Guardó silencio mientras seguía mirando al hombre de manera desafiante. No pensaba soltar ninguna palabra.

-¡Que respondas!.

-Creo que no está con ganas de hablar, no importa. ¿Sabes lo que creo yo? Creo que no deberíamos negarnos la una ni la otra. Tener habilidades físicas con la capacidad de inspirar naciones es a dónde todos debemos apuntar y yo lo aprendí.

-¿Y eso a mi qué?.

-Que tú lo tienes, eres la reproducción del capitán américa niño. Tienes lo que se necesita para dominar el mundo...sólo necesitas dirección.

-Pero a mi no me interesa hacer eso.- Bufó James haciendo que el tipo soltara una fuerte carcajada.

-Tengo grandes planes para ti, A04.- Dijo apenas dejó de reír con su semblante serio.

-Mi nombre es James.

-Prepáralo, quiero ver que tiene para mi.

-Esta bien, ¿contra quién señor?.

-¿Cómo se llama ese niño extraño que siempre dice la misma palabra?.

-¿D-12? Señor, no creo que sea buena idea.

-¿Por qué no?.

-Porque tiene habilidades muy diferentes a las de A-04. No conseguirá nada.

-Yo creo que si, al menos una lección para que abandone su insolencia.

¿Clon O Hijo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora