Jungwon sacó algunos billetes de su alcancía, había estado guardando dinero para comprarse una sudadera nueva, su hermana tenía razón, usaba la misma la mayoría del tiempo, pero detuvo su ahorro cuando la situación se empezó a complicar y ya no guardaba la ganancia para él.
ㅡSolo será esta vez, podré conseguirlo de nuevoㅡse dijo a sí mismo, tratando de ser positivo, casi nunca salía porque no tenía mucho que aportar.
Jake y Riki estaban hablando animadamente entre ellos cuando Jungwon bajó a la sala, ya listo para salir.
ㅡ¡Wonnie! ¿No estás orgulloso de nosotros?ㅡsonrió emocionado el menor de todos.
ㅡClaro que si, son buenos ayudantes.
ㅡFue interesante, tienes vecinos muy lindosㅡse sonrojó el pelinegro, recordando su encuentro con el guapo rubio hace un momento.
ㅡCreo que si, hay mucha gente linda por aquíㅡdijo, apareciendo una imagen de Jay automáticamente en su cabeza. Frunció el ceño ante su propio pensamiento, apartándolo rápidamente.
ㅡYo también me encontré con un chico muy lindo, es alto y de cabello rosa, fue muy amableㅡsuspiró con una enorme sonrisa, Riki. Según él, había sido algo asi como atracción a primera vista
ㅡ¿Cabello rosa y alto? ¡Hablas de Sunoo!ㅡrió JungwonㅡEs un gran cliente, muy amable y sonriente.
Los tres chicos iban hablando sobre lo sucedido en ese día mientras caminaban hacía la plaza, Jungwon les habló de Jay y de la actitud que tenía cada vez que lo veía, Riki dijo que ya no debería ir a esa casa porque nadie debía hablarle mal o hacerle el feo al trabajo que con tanto esfuerzo hacía, Jake dijo algo similar, sabía lo mucho que se esforzaba para que fueran groseros con él, pero Jungwon estaba consciente de que no siempre todo salía bien y que a veces no era bueno ser persistente.
ㅡAhora que recuerdo, ¿alguno de ustedes sabe como hacer cupcakes?ㅡlos miró esperanzado, esperando que alguno pudiera enseñarle porque él solo podía hacer galletas.
Ambos negaron.
⎯¿Piensas expandir tu negocio? Es buena idea.
ㅡSolo quería intentar algoㅡhizo un pucheroㅡEn fin, ¿comemos y vamos al cine?
ㅡ¡Sí!ㅡrespondieron los otros dos al unísono.
Los tres adorables chicos se encaminaron hacia un pequeño restaurante cercano, comieron algo liviano y luego se dirigieron al cine.
Jungwon no pudo evitar pensar en que pudo haber guardado ese dinero, pero al ver la felicidad de sus amigos cuando estaban con él lo hizo sentir mejor, dejando de lado cualquier preocupación, quería divertirse y no había nada mejor que una película para mejorar los ánimos.
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ㅡJay~ vamos~ no seas malo.
Sunoo seguía haciendo pucheros y caras tiernas para convencer a su mejor amigo de salir, ya estaba aburrido de llegar a su casa y pasar el rato viendo documentales o viendo como Jay pasaba todo el tiempo en su celular, ni siquiera lo dejaba hacer ruido.
