Rebecca Martínez una niña que nunca sintió el amor de una familia y siempre soño que alguien la adoptará.Pero las circunstancias no la favorecen, los adoptantes de hoy en día solo quieren a niños/as pequeños y ella con catorce años perdió todas las...
Los sábados sin duda eran mis días favoritos, No teníamos clases y eso implica tener que jugar y descansar todo el día, menos a la mañana que nos poníamos a limpiar el orfanato para que 5 reluciente para los adoptantes. Cada sábado a la tarde mientras todos estamos en el patio, los adoptantes pasaban a visitar para ver a quien se llevarían.Estos días no tenían gracia o al menos sentido para mí, porque solo escogían a los más pequeños.
Me encontraba en el patio jugando con las chicas que siempre juego, está vez yo estaba dándole el biberón de juguete a mi bebé, mientras ellas preparaban la mesita para la fiesta del té.
- Becky ya está todo listo, ¿vienes?-
- Sisi, esperen que agarro el cochecito para poner al bebé y voy- apenas lo encontré apolle a mi bebé y lo lleve a la fiesta del té. Estuvimos un largo rato jugando yo ya tenía sueño, eran las tres de la tarde.
-Pequeñas vamos a dormir la siesta- La señorita Paula era su cuidadora, ellas al ser pequeñas podían dormir la siesta, en cambio yo no porque ya era grande .
-Bueno, Becky nos vemos luego ¿está bien?-
- Si chicas, adios- apenas respondí, se fueron a sus habitaciones.
- Rebe te dije que te puedes lastimar si te tallas los ojitos- dijo la señorita Paula.
-Lo siento seño, es que tengo sueño-
- Rebe, lo lamento pero sabes que no puedo dejarte dormir la sienta-
-Lo entiendo, me voy a jugar seño, adios- me di media vuelta y me fui a jugar un rato mal yo sola, fui a buscar en el baul de juguetes un chupete para mi bebé pero termine encontrando una mantita amarilla suavecita, la tendí en es césped y me acosté encima de ella e inconscientemente caí en un sueño profundo.
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Pov's Heros Russell
El trabajo era demandante, la empresa crecía muy rápido eso significa que las responsabilidades y el estrés también. Son las consecuencias detener la mejor aseguradoras del mundo, Si no fuese por mi esposa estaría en un colapsó terrible. Estar debajo del ojo público todo el tiempo es estresante, la farándula estè detrás tuyo esperando un mínimo error para hacerte quedar mal delante todo el mundo. Pero puedo decir que valió la pena cada gota de sudor y toda el esfuerzo que puse en salir adelante por mi familia . Salgo de mis pensamientos cuando escucho la puerta de mi oficina.
-Esta abierto, adelante- Apenas se habré la puerta y toda mi atención de la lleva mi esposa, Hera Stone de Russell. Una mujer hermosa por dónde la veas, castaña, con unos labios carnosos, cuerpo de en sueño, una sonrisa perfecta y una mirada encantadora. Estaba vestida con un pantalón tiro alto media acampanado color hueso, una camisa blanca de seda, unos tacos negros que la hacían más alta pero no más alta que yo. Su pelo estaba totalmente lacio, tenía un labial nude que combinaba perfectamente con todo su look.
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