47: Peor y más largo día de la semana: Lunes

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El lunes llegó más rápido de lo hubiera querido, seis de la mañana ya estábamos todos de un lado al otro, Illel había ido a dar un paseo a Gray y yo terminaba de preparar el desayuno, July aún se ponía su uniforme

-Nena, ya esta servido- avisé, ella salió y nos sentamos a comer, minutos después llegó mi esposo uniéndose

-¿Repasamos el plan de hoy?- sugirió llevándose un pedazo de sandía a la boca

-Claro, irás a dejar a July a su escuela- indiqué y alcé las cejas en señal de que prosiguiera

-Luego el resto de la mañana voy a mi universidad a ayudar como encargado de mi paralelo y tu estarás aquí arreglando todo para la reunión- asentí y él señaló a July, esta respingo acordándose su parte

-Después irás a verme a la escuela, me traerás, almorzaremos y empezaremos a arreglarnos para irnos a tu graduación- culminó sonriente, ambos afirmamos su parte de igual manera

-Después regresamos aquí y comenzamos nuestra fiesta personal- terminé diciendo emocionada, luego seguimos hablando trivialidades y comenzamos nuestro ya pautado día.

Decían que cuando uno planificaba su día todo salía mucho mejor, que mentira había sido para mí…

Narra Illel

Me encontraba en la universidad verificando que estén todos los diplomas de la maestría listos según la lista de mi curso, para mi tranquilidad después de quince minutos comprobé que si lo estaban

-Señor Illel- me llamó el decano, yo volteé con una falsa sonrisa, no me gustaba el “señor” apenas tenia veinticinco años

-Buenos días- le saludé dándonos un apretón de manos, se notaba particularmente ansioso, mirando de un lado al otro

-¿Todo está en orden?- cuestionó más para él viendo todo y dándoles pequeños toques

-Sí, los diplomas están completos y ya está verificada la asistencia- le informé ya deseando irme, quería comprarle un juguete a July por haberse portado tan bien

-Perfecto ¿y ya tiene lista su intervención?- indagó seriamente, mi incomodidad aumentó, me había debatido entre darla o disculparme para que la de otra persona pero los días pasaron y ya no había tiempo para eso, además ella no quisiera eso

-Por supuesto- le aseguré, este me miró sonriente para luego retirarse dándome una palmada en el hombro

 ….

Narra Yeray

El apartamento nos había quedado precioso, dorado, blanco y algo de negro daban el balance de fiesta y reunion ideales

-Podemos ser decoradores en nuestro tiempo libre- sugirió Lor, orgulloso, esta era su última semana aquí así que ya estaba libre, sus prácticas habían salido grandiosamente

-Creo que tenemos futuro- aseguré terminando de acomodar una esquina de fotos

-Sí pero ya es hora de almorzar

-Hay que esperar que lleguen- contesté divertida, tenía mucha hambre y aunque yo no me quedaba atrás, no me gustaba la idea comer sin ellos

Nos sentamos a tomar agua con hielo sentados viendo una película, después de una media hora ellos llegaron

-¡Tía!- chilló mi sobrina al verme con una felicidad que no entendía hasta que vi el regalo en la puerta, nuestra mandíbula cayó

-¿Otro perro?- cuestioné viendo al pequeño can al lado de mi sobrina

Amor traumático Donde viven las historias. Descúbrelo ahora