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Abrió sus ojos cómo todos los días, tallando estos. Se estiró un poco y tomo asiento sobre su propia cama. ¡Hoy debía ir a la escuela! Cosa que solía emocionarle.
Para Marcy Wu, cualquier cosa la había sentir emocionada, sea mínimamente pequeña sus ojos brillaban con intensidad por la simpleza que algo le llamaba la atención o mejor aún, le daba emoción. Aquella chica asiática era bastante tierna ante los ojos de todos.
Su mayor pasatiempo era jugar videojuegos gracias a eso decidió crear un canal donde subía directos ¿porqué? Le emocionaba compartir sus juegos favoritos a los demás, claro cómo todo streamer tenía personas quienes la odiaban ( cosa que llegaban a desanimarle a tal punto de no hacer directos en días. ) Varias personitas la animaban a seguir con aquello ¡Además era bastante famosa! Hasta en la escuela.
Pero claro, Marcy Wu no quería fama, sólo divertirse y hacer lo qué más le gustaba.
En fin, cómo todos los días iba con emoción hacía la escuela, todos le llamaban nerds por tener ciertos conocimientos, participar en clases, hacer todas la tareas y así. Marcy lo admitía era bastante nerd ¡Hasta friki! Es más solía coleccionar funkos, los cuales ponía en una estantería especial bastante pulcra y llena de decoraciónes. También solía coleccionar consolas, las cuales cuidaba cómo si su vida trataban de ella.
Aunque de un tiempo para acá, comenzó a amar mucho su preciada Nintendo Switch, un regalo de sus padres cuándo apenas cumplió diez años, también había recibido varias juegos por parte de su mejor amiga desde pequeña Anne Boonchuy.
Sip, Anne tenía de mejores amigas tanto a Sasha cómo a Marcy ¿porqué nunca se habían presentado? Fácil, tenía miedo que gracias al fuerte carácter de la Alemana espantará a su pequeña amiga.
La trataba cómo si fuera una bebé, cosa que Marcy amaba, la cuidaba, sobreproteguia y esas cosas. Cosas que realmente sus padres no hacían con ella, pasaban trabajando y llegando a tardes horas en la noche, en simples palabras pasaba realmente sola en casa. Le daba total igual, ya qué siempre yacía encerrada en su habitación jugando videojuegos o hasta haciendo sus deberes.
Cómo buena niña que era.
Había llegado a la escuela, viendo cómo su mejor amiga corría hacía ella y la abrazaba con fuerza.
— lo siento por el comentario de ayer, es qué realmente me gustas... ¡Claro cómo amiga! — soltó una risita suavemente mientras ambas mejillas ardían.
— tranquila no pasa nada,, igual me dió risa. — habló de forma suave la azabache mientras sonreía.
Anne solía molestar a Marcy para ver el ardor en sus mejillas, cosa que le hacían ver tierna y mucho.
A los lejos una cabellera rubia hizo presencia, Sasha. Quién estaba con su grupo de porristas, quién se había acercado hacía ambas con una cara bastante ¿Sería? De por sí, ella era así mostraba su lado frío hacía cualquier persona.
— ¡Sasha! — gritó la tailandesa dejando atontada a la pobre asiática.
Le había gritado en todo el oído.
— Boonchuy y... ¿Yo a tí... te conozco? — comenzó a examinar sin vergüenza alguna a la chica azabache.
Marcy se sonrojó a más no poder al sentir su mirada sin descaro alguno encima de ella.
— ¡Sasha por favor! Me la pones nerviosa. — suspiró suavemente la tailandesa mirando de reojo a su mejor amiga.
— cómo sea. — se encogió de hombros para luego mirar a la castaña. — en fin... ¿Harás algo en la tarde?
Anne se quedó pensativa.
— Aunque espero que no andes insinuandote a la chica esa de los directos. — habló de forma suave cruzada de brazos.
Marcy abrió su boca en o. ¿Acaso ella también veía sus directos? ¡Ahora que se acordaba! Una nueva persona había entrado en el ayer, seguramente era ella. La miró con cuidado sin que ella se diera cuenta.
Alta, cabello rubio unos ojos negros cómo la noche, los cuales demostraban seriedad y seguridad, cosa que podía llegar a hacer temblar a la menor o hasta a cualquiera Tenía un lindo lunar adorando su cara situado un poco más abajo de su ojo, el cuál resaltaba bastante en su rostro, piel pálida bastante bonita ¿Sería bastante suave a la hora de tocarla o besarla?
Marcy ladeó su cabeza ¿Cómo iba a pensar eso de aquella chica?
— ¡Oye! No me insinuó, solo me gusta verla sonrojada. — soltó una risita suave ante su comentario.
— qué homosexual eres, Boonchuy.
— tu eres peor, Waybright ¿crees que no me doy cuenta cómo mira a la mayoría de las chicas? — arqueó una ceja.
Se cruzó de brazos ante el comentario de su mejor amiga, rodo los ojos.
Marcy las miraba a ambas con el ceño fruncido, usualmente ella en grupo no habla mucho, opinaba con un simple ujum o si y no. Es más se perdía bastante fácil en su mundo, ignorando por completo la conversación entre ambas.
En su mundo estaba cierta rubia, no dejaba de pensar en ella y peor aún ¿Porqué no podía? Además tenía un fuerte carácter que asustaba a cualquiera ¿porqué a ella no le asustaba? Es más, le encantaba por así decirlo.
Vaya, estaba realmente jodida en aquél momento.
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