Hay veces en las que nuestras vidas pueden ser crueles, devastadoras, tormentosas y tristes... y solo buscamos un escape de nuestra realidad, ese algo que nos haga sentir bien, como otros dirían nuestra paz en la tormenta y hay veces que ese escape...
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Nuestros monstruos.
Yo soy fiel creyente de que todos los tenemos y claramente no hablo de aquel que creímos encontrar debajo de nuestras camas, en el armario o en la oscuridad, yo hablo de nuestros pasados, en esos momentos que nos marcan, muchos dicen que esos momentos dejan enseñanzas, en mi caso no me han enseñado nada, pero siempre me persiguen. Un tiempo pensé en mi pasado y no hay manera de revivir esos días ¿entonces no me podían hacer daño?, la respuesta era que ellos si me pueden hacer daño... me atormentan en mis sueños, así que Decidí permanecer despierta por más tiempo, me atormentan en mi dia a dia viniendo a mi mente como pequeños flashes mentales, así que Distraigo a mi mente... distraigo a mis monstruos, me lleno de fantasía que me hace sentir demasiado bien y al parecer en eso coincido con mis monstruos por que cuando estoy entre líneas, en mis castillos ellos simplemente no aparecen, es como si cuando yo leo ellos simplemente se duermen o talvez a ellos también les encanta la fantasía y se olvidan de su propósito por un tiempo.
Una vez le comente esta teoría a Andrea y ella dijo que tengo una forma muy rara de ver la vida y a mi mente, eso me puso feliz, para muchas personas sería triste que les dijeran raros, pero a mi me encanta, eso significa que no soy como los demás, que no tengo esa forma triste de ver la vida.
Ella tenía una forma parecida a la mía de ver la vida pero muy diferente al mismo tiempo, ella creía que la vida se tenía que vivir al día a día sin conformarse con la vida tradicional, en la cual nuestro único motivo es sacar carreras universitarias y formar familias, ella quería más, quería viajar, conocer y quizás hasta vivir esas historias románticas que amaba leer. Cuando supe que ella pensaba así supe que la querría siempre a mi lado, que esa era la forma con la que yo quería ver la vida, claro que cambié y agregue algunas cosas de mis propias expectativas pero ese era nuestro sueño... viajar juntas, conocer y ser nosotras nuestro propio libro, ambas estábamos consciente de que algún día nuestro libro acabaría, siempre pensamos que el final sería para las dos igual, pero ahora el libro de ella ya terminó y yo sigo aquí escribiendo páginas tristes y solitarias sin algún sentido.
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