Amnesia

Capítulo 7.

     —Realmente lo siento. —Deku estaba haciendo una gran reverencia en medio de la cafetería de la universidad ganándose las miradas de todas las personas que iban pasando.

Iida y Uraraka no sabían cómo reaccionar ante eso, estaban sorprendidos y nerviosos por la situación, estaban llamando demasiado la atención.

—Deku, no necesitas hacer eso. —dijo la castaña negando varias veces con sus manos al aire.

—Si necesito hacerlo —declaro el peliverde —Fui muy grosero durante la fiesta y los hice preocuparse. Sé que mis disculpas no saldaran todo lo que hice esa noche, pero quiero empezar con esto.

—Midoriya —Iida coloco su mano derecha sobre el hombro de su amigo obligándolo a dejar de hacer la reverencia —Fue algo del calor del momento, no te preocupes. Aceptamos tus disculpas —dijo el pelinegro con una sonrisa —Sin embargo, —Iida se colocó en una posición más recta y con una mirada seria —debes controlar más la cantidad de alcohol que puedes ingerir. Esta vez fue tu temperamento, pero la próxima vez te puedes hacer daño.

Sonriendo agradecido Izuku dijo: —Por supuesto, hare caso a lo que me aconsejas.

Terminando aquella conversación cada quien se fue al edificio de su facultad para las últimas clases. Izuku había tardado toda la mañana pensando en cómo disculparse y cómo arreglar las cosas con sus amigos, pero todo aquello se fue a la basura cuando los vio juntos en la cafetería.

"Debo decir algo que salga sinceramente desde mi corazón y no algo que he venido planeando" —pensó y con ese valor fue a enfrentarse a sus mejores amigos.

Con un alivio reflejado en el rostro el peliverde regreso al edificio de su facultad y mientras se detenía enfrente de una máquina expendedora puso sentir como alguien se acercaba a él desde atrás. Por reflejo se giró rápidamente para ver quién era, olvidando que traía a medio colgar su mochila, ocasionando que golpeara a aquella persona al girarse.

—Oh... ¡ah!... Todoroki lo siento. —exclamo preocupado el pecoso moviendo sus manos alrededor del de cabellera bicolor.

—Umm —negó Shoto frotándose la nariz —Fue mi culpa, el llegar de improviso y asustarte.

—En verdad lo siento, —se disculpó de nuevo Deku — ¿Ocurre algo? —cuestión luego de cerciorase de que su amigo no estuviera lastimado por el golpe.

—Solo quería saber si llegaste a casa a salvo, no supe de ti todo el fin de semana, estaba preocupado. —dijo el chico de ojos heterocromaticos.

Durante todo el fin de semana, Deku estaba acomodando sus ideas, al igual que sus maletas, por lo cual olvido por completo a sus amigos y lo que había sucedido en la fiesta, hasta que Uraraka lo llamó.

—Lo siento mucho, no quise preocuparlos ni ser grosero con ustedes.

—Descuida. Sólo me preocupaba que algo te pasara de camino a casa, pero me alegra que estés bien.

Izuku le sonrió a su amigo en señal de que estaba bien. No quería contarle lo que paso en el breve lapso en que se separó de ellos, el que casi es arrastrado por un desconocido y que Katsuki fue quien li impidió y quien lo ayudo a llegar a salvo, no a su casa exactamente, pero fue muy amable con él.

No quería hablar de ello, no solo para no preocupar a sus amigos, sino también para evitar todo el interrogatorio que se desataría si revelaba que Kacchan fue quien lo ayudo y quien se quedó a su lado. Él no sabía cómo explicarlo, ya que, él ni siquiera sabía cómo explicárselo a sí mismo.