Capítulo 3.

285 44 7
                                    

     —Bien, creo que es la última —Izuku terminaba de empacar sus cosas. Cuando cerro su última maleta dio un vistazo, a la que fue por un largo tiempo, su habitación asegurándose que no olvide nada.

—Izuku~ —Melissa entró a la habitación semi vacía abrazando a su amigo —No puedo creer que te estén yendo —la chica tenía las lágrimas al borde de sus lindos ojos azules amenazando en salir en cualquier momento.

—Yo también te voy a extrañar —Midoriya le regreso el abrazo a su amiga logrando hacerla llorar.

La rubia era un mar de lágrimas contagioso, Izuku estaba comenzando a llorar también. Aquella habitación se convirtió en un concierto triste de llanto, despedidas y promesas de algún día volver a encontrase. Aquel momento conmovedor fue interrumpido por el padre de Melissa.

—Vamos, vamos chicos —el castaño camino hasta donde los amigos estaban y los envolvió en un cálido abrazo —No se pongan tristes, Izuku sabe que cuando lo desee puede venir y tener un lugar a donde ir. Te recibiremos con los brazos abiertos.

Las palabras de David hacían feliz a Midoriya ya que pudo hacer grandes lazos con personas tan maravillosas. En verdad agradecía mucho a Toshinori sensei el haberle presentado a personas tan magnificas como los Shield.

—Lo sé, muchas gracias señor Shield —Izuku se limpió las lágrimas y con una enorme sonrisa agradecía tan amables palabras del mayor.

—Bien, entonces. Es momento de irnos, tu avión está a punto de partir —David tomo un par de maletas del muchacho de rizos — ¿Es todo tu equipaje?

—Sí señor, gracias por su ayuda y por llevarme hasta el aeropuerto —Izuku tomo las maletas que no hace mucho había terminado de hacer caminado a la salida de la habitación.

—No hay de que, si puedo ayudar al aprendiz reconocido por Toshinori lo haré con mucho gusto.

—Has sido muy bueno con nosotros y tu compañía fue muy grata, si podemos devolver la amabilidad que nos has dado lo haremos —agrego Melissa.

Salieron de la habitación dejándola por completo vacía y se dirigieron al auto. La mañana comenzaba a verse más clara y el frio le calaba los huesos a pesar de tener un suéter. Colocaron las maletas del nipón en la cajuela del auto para después abordar a él.

Durante el trayecto Melissa no dejaba de hablar de las cosas que no pudieron hacer durante su estancia en la unión americana, así que le hizo prometer al pecoso que si alguna vez regresaba a estados unidos harían lo que no pudieron durante lo anteriores 7 meses.

David le notificó al joven japonés que quien lo recibiría en el aeropuerto sería su maestro Toshinori junto a su madre. Izuku al escuchar la mención de su madre se estremeció, pues no le había dicho nada de lo que hizo en estados unidos con su persona.

Midoriya hablaba diario con su madre por teléfono, pero solo hablaban de las cuestiones académicas, solo pocas veces Izuku hablaba de sus actividades nocturnas y sus nuevas perspectivas. Pero nunca, ni por error, le menciono su cambio de personalidad e imagen.

Estaba asustado por la impresión que generaría en su progenitora al presentarse, en especial con las perforaciones y ese ridículo tatuaje que se hizo en la fiesta de despedida que Melissa le organizo. Eso era lo que más le preocupaba a Izuku, él que su madre pensara que se volvió en un vago o gánster.

Al llegar al aeropuerto sus nervios crecieron más. Se despidió de la familia Shield y abordo su avión de regreso a Japón, por lo menos tendría 20 horas para pensar en que decirle a su madre cuando lo viera.

AmnesiaWhere stories live. Discover now