¿Es incorrecto ser una chica en un calabozo? [Reescribiéndose]

28. Un resultado inesperado

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Correr por la ciudad es algo que casi nunca he hecho en mi vida. Puede ser porque se vería extraño hacerlo en un lugar como ese y no es un sitio hecho para correr o me daba vergüenza hacerlo.

Aun así en este momento no me importa mucho la situación y lo que piensen los demás de mí.

Tsubaki termino de forjar mi nueva arma y ya deseo tenerla en mis manos por lo que salí corriendo de la Mansión Crepúsculo hacia el Taller de Tsubaki.

Ha pasado poco desde que deje de entrar al calabozo diariamente, sin embargo, debido a que aún no encuentro algo que hacer como hobby o en mi tiempo libre, el calabozo resuelve ese problema.

Claro está la posibilidad de morir, pero me siento normal peleando en contra de los Goblins.

Luego correr por un tiempo doble las rodillas por el cansancio, pero ya estaba afuera del Taller de Tsubaki. Tomando aire recupero mi compostura y toco la puerta.

"¡Puedes entrar!"

Con el aviso de Tsubaki abrí la puerta y rápidamente vi a Tsubaki quien estaba acomodan algunas armas en las cajas.

"Oh, estás aquí enana" Tsubaki hablo con una gran sonrisa "Tengo tu arma lista, el tiempo que esperaste valió la pena para ti"

"¡Por supuesto!" le dije sin duda alguna. En ocasiones esperar sirve más que hacerlo todo rápido.

"Es esta" Tsubaki tomo una espada enfundada desde debajo de la barra y me la entrego a lo cual la tome con mis dos manos desde ambos extremos.

La aprecia bastante y lentamente la saqué de su funda. Admirando el filo y su empuñadura, contemple que no tenía decoraciones y lo único que podría considerarse llamativo sería su funda.

"Está hecha de Damasco. Un metal útil para aventureros principiantes, no obstante si no cuidas tu espada esta terminara desgastándose hasta romperse o perder su filo"

"¿Eh?" me sorprendí por sus palabras.

"Haha, sabía que tú no tendrías en cuenta los cuidados de un arma luego de haber visto tu navaja"

Me sonroje un poco, pero agite la cabeza alejando esa vergüenza y mitigándola. Tengo que aprender a no avergonzarme por mis acciones o terminaré siendo un blanco fácil para algunas personas.

"¿Qué es lo que daña la espada?"

"Lo principal es la sangre de los monstruos" Tsubaki me explico "Si dejas la sangre entonces el arma se oxidará, incluso el polvo es capaz de arruinarlas"

"Ah"

Definitivamente, ese fue un dato muy sorprendente el que ella me dijo. Nunca tuve un arma como está en mi vida y por consiguiente no se acerca de los cuidados que tienen.

Esta espada es parte de mí. En el caso de que se me destruya en el calabozo quedaré indefensa y mi única arma será mi cuerpo, pero aun así hay monstruos que son resistentes a los golpes y terminaré perdiendo o muriendo.

"Nosotros los herreros nos enorgullecemos de nuestras creaciones así que no me hagas arrepentirme por ayudarte" Tsubaki me regalo una sonrisa la cual también compartir una con ella.