T R E S

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al inicio y poco antes del final del capítulo hay comportamientos de trastorno alimenticio, recuerden que en la nota de autor se encuentran los trigger warnings por una razón. no me gustaría alterarles así que lean con discreción.

Cuando Yeonjun, el denomido príncipe del instituto por Kai y su amiga, llegó a su hogar, su hermano menor de quince años, Hyunjin, uno de los gemelos, estaba esperándolo sentado en uno de los muebles de la sala, levantando su cabeza y una sonrisa ...

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Cuando Yeonjun, el denomido príncipe del instituto por Kai y su amiga, llegó a su hogar, su hermano menor de quince años, Hyunjin, uno de los gemelos, estaba esperándolo sentado en uno de los muebles de la sala, levantando su cabeza y una sonrisa iluminando su rostro tan pronto como vio a su hyung.

Corrió a abrazarlo al momento que sus pies tocaron el piso y Yeonjun se permitió sonreír débilmente.

—¿Me extrañaste? —bromeó el mayor, a lo que recibió un asentimiento de todas formas.

—Mamá no ha venido y Yeji se encerró en su habitación apenas llegó. Me dejaron solo.

—Perdona por tardar un poco, salí con unos amigos por helado y luego me distraje. —bueno, no podría llamar a ese par de chicos sus amigos, pero tampoco tenía tiempo para explicarle a su hermanito lo que ocurría.— De haber sabido que te dejarían solo te habría llevado.

—No importa. —se encogió de hombros al separarse el castaño. Yeonjun vio su sonrisa transformarse en una mueca.— Mamá llamó, no va a llegar y tampoco puede mandar comida porque está demasiado ocupada. Yo no tengo dinero para el delivery y pues Yeji... ella está siendo Yeji.

El azabache rió levemente a la expresión de su hermanito. Ah, no era la primera vez que su madre olvidaba dejarles para comer, pero él seguía preocupándose por cosas que no le incumbían como si fuera la primera vez.

—Yo puedo cocinar algo, a menos que quieras algo en particular para comer, en ese caso yo tengo dinero para el delivery. No te preocupes por ello. —Yeonjun le desordenó el cabello, cambiando la preocupación en su rostro por una risita.— ¿Qué deseas comer? Nada de chatarra, eh.

Hyunjin pareció pensar por un segundo para luego mirar a su hermano mayor con ilusión.

—¿Podemos comer Mul Naengmyeon?

El mayor hizo su mayor esfuerzo para reprimir una mueca:— ¿Fideos fríos?

—Sipi.

—Okay, no hay problema, ¿quieres que los haga yo o quieres que los pida? —a decir verdad, Yeonjun estaba preguntando eso por cortesía. No tenía ganas de estar parado en la cocina más de una hora cocinando todo, pero Hyunjin se veía esperanzado.

No quería tener que arruinarle la felicidad a esa carita; cocinaría si el menor le decía que prefería que lo hiciera, pero nada lo privaba de rogar al cielo que su hermano quisiera pedirlos por delivery.

Puede que Dios lo haya escuchado o puede que Hyunjin haya intuido que su hermano acababa de llegar cansado del instituto y que pedirlos era más óptimo para el mayor y para su propia hambre.

JEALOUSY | TXT FIC. (SIN EDITAR)Where stories live. Discover now