𝟣𝟫-. 𝖢𝖺𝗌𝗈 𝖼𝖾𝗋𝗋𝖺𝖽𝗈. 𝖯𝗍 𝟤.

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 Tanto fue lo que cada uno dejó en su confesión

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 Tanto fue lo que cada uno dejó en su confesión. Que la propia Jisoo, una chama que tiene labia y argumento, pero le da pena hablar en público. Hasta esa mismita, se puso las pilas y después de preguntarle a Rosaida si ya podían ser novias, esta le dijo que se lanzaba pal beta si Jisoo decía lo que tenía, la carajita no peló el bonche y pidió permiso para una intervención.

Es que hasta usted, estimado lector, puede tener su intervención. Dígame: ¿le gusta el café con leche y pan?

—Mi declaración tiene que ver con respecto a la indebida prohibición de la autopsia del señor Jong. —y ahí andaban, Jimin, Yoongi y Rosaida, callando a los demás pa' que dejaran oír a Jisoo. —Y es que a mi me había parecido raro. No fui la única, ya que doy fe de que Namjoon tuvo que hacer una investigación a escondidas, o sea, propio jefe investigando a escondidas porque sencillamente nos censuraron más que políticos a los medios de comunicación... Y tras esa investigación, halló un indicio que demostraba que era posible, que la muerte del señor Jong, no haya sido por medio de un disparo sobre la cien. Yo misma investigué la composición de una vitamina que le era suministrada de forma inyectable. Y vaya que encuentro cianuro en eso. Cianuro, que más tarde encuentro en el cuerpo de la víctima, que me van a disculpar los presentes familiares que no permisaron la autopsia, pero en dado caso, ¿qué tanto sabían? Tengo entendido que fue el señor Junghwa el que denegó el permiso legalmente. —se giró hasta el mencionado, que elevó la vista hacia ella. —¿pero fue usted el que tomó la decisión?

Junghwa negó. Ese era otro más que si podía, se quitaba el Jeon.

—La hice notar como legal ya que me encontraba siendo el abogado representante en esos momentos, pero la queja como tal, vino del señor Julio César.

—¡Exacto, Julio! —Seokjin se levantó de su asiento, llamando la atención. Hasta de la doctora Polo, que intentaba sacarse un uñero del pie. —A quien casualmente, el mismo día que Namjoon interrogó a la señorita Bárbara, le hallé un bote de cianuro en su oficina, ¿Para qué estaba eso ahí? dudo muchísimo que para la calidad de casa que tiene, eso esté ahí para las ratas, y de estarlo, ¿quién guarda eso en su oficina?

Julio no estaba en modo: ¡atrapadaaa! Sencillamente ya estaba en la mierda, pero hundido así hundido como el Titanic.

—¡Ejele, hay alguien aquí que no ha hablado! —Changkyun había estado documentando (chismoseando) el beta grabándolo con el celular de Jooheon, pero le dio la loquera que se levantó en medio de brinquitos. —¡Hyungwon no ha hablao' se está haciendo el mususiú!

—¡Ciertoooo!

—¡Verda'!

—¡Kihyun, anda a compra' chucherías que se acabaron!

—Eso es cierto. —alegó la doctora Polo. —el señor Chae tiene que dar su declaración.

El mencionado se levantó con una ladilla, pero de las buenas, se echó un estirón y hasta se llegó al público, hasta dónde Christopher, que le extendió el pote de cotufas y aquello lo aprovecharon los demás para molerlo a lepes. Cuando tomó asiento en el sitio indicado y hizo su respectivo juramento, fue que contó la vaina.

¡𝙴𝙿𝙰, 𝙲𝙸𝚄𝙳𝙰𝙳𝙰𝙽𝙾! ;; 𝗍𝖺𝖾𝗄𝗈𝗈𝗄.Where stories live. Discover now