Daddy issues (bnha)

17

—No hagan ruido, esperen —Fue un susurro —Shh, no empujen —Un poco más alto —Tomen fotos, por favor —Una voz de mujer. Todo aquello y el ruido de las pisadas sobre la madera terminó por despertar a Hitoshi.

Deku, Kirishima, Bakugo, Sero y Mina estaban mirando como Denki abrazaba al contrario mientras dormía, algunos con ternura y otros riéndose.

La noche anterior, Kirishima y Bakugo se habían quedado bastante preocupados por como se encontraba Hitoshi, así que a la mañana, estuvieron esperando a que pasara por la sala de estar para interceptarlo, cosa que no pasó.

Se preocuparon aún más por ello así que terminaron yendo a buscarlo a su habitación, pero tampoco estaba allí. En el camino, iban pidiendo ayuda a sus amigos para poder localizar al chico. No tenían mucho tiempo ya que tenían que ir a clases, pero no se irían sin encontrarlo.

Se dispusieron a buscar a su compañero perdido, ahora entre todos, y de las primeras suposiciones de su paradero había sido la habitación de Denki; y fue acertado.

Así terminaron todos entrando sin permiso a la habitación del rubio, encontrándose con aquella tierna imagen. Denki siempre olvidaba cerrar la puerta y aquella noche no había sido la excepción, así que no les costó mucho entrar.

Al ver a Hitoshi despierto, comenzaron a reír un poco más fuerte. Se espabiló un poco e intentó despertar a su amigo para que se separe, sin embargo, causó un efecto contrario, logrando que solo se presionara más contra su cuerpo. Ahora si sus amigos comenzaron a reír a carcajadas y el de cabello morado suspiró cansado. Tampoco es como que le interesara mucho que lo vieran así.

No le interesaba mucho que lo vieran así; que equivocado estaba. Al sentir al rubio aún más comprimido contra su pecho, recordó que debajo de su remera lo único que llevaba eran las vendas que Recovery Girl le había puesto, vendas que antes funcionaban bien como binder pero ahora se habían aflojado y no sabía cómo estarían.

Automáticamente miró a Kirishima con pánico. Fue Bakugo quien entendió la mirada y con disimulo golpeó en el brazo a su mejor amigo, quien lo miró confundido pero dispuesto a hacerle caso.

—Vámonos, hay que ir a clase —No dijo nada más, solo emprendió camino hacia fuera del cuarto. Algunos, confundidos, esbozaron algún que otro sonido desaprobatorio o cuestionando su accionar y Kirishima, por su parte comenzó a empujarlos fuera.

—Ya sabemos que está bien, ¡Nos podemos ir! —Y con eso, Kirishima los convenció aunque realmente no querían irse. Cerraron la puerta al salir pero segundos después volvió a abrirse para mostrar la cabeza asomada del pelirrojo —Bro, ¿Estas bien? —Seguía preocupado. Hitoshi se removió un poco para que pudiera verse mejor y asintió —¡Bien! Nos vemos entonces, ¡Te quiero! —Y sin más, ahora si se fue.

Si había algo que Hitoshi amaba de Kirishima era como podía ser tan afectuoso sin mostrarse contrariado con ello. Bakugo era algo que no lograba para nada pero confiaba en que algún día podría hacerlo. Igualmente sabía que las personas poco afectivas existían y, de hecho, él era una de ellas, pero sabía que Bakugo tenía mucho que expresar, tanto como el miedo que sentía por hacerlo.

—Denki... Ey, Denki... —Hitoshi removió un poco a su amigo con delicadeza para despertarlo pero sin resultado —Denki... —Dejó de moverlo y comenzó a tocar su cabello con tranquilidad para no exaltarlo.

Denki tenía su brazo aferrado a la cintura de Hitoshi, atrayéndolo un poco hacia él. Habían estado más cerca pero el pelimorado se había alejado un poco al querer comunicarse mejor con Kirishima y además porque quería alejarlo un poco de su pecho ahora que no estaba completamente plano. Ahora, sus rostros estaban de frente al otro, uno con los ojos cerrados y respiración tranquila y el otro tocándole el cabello con la mano rozando su mejilla y oreja.