➪Una historia donde Yoshida Reiko es parte de Bonten y tiene una relación poliamorosa con algunos de los miembros de esta organización.
Comenzada: 8/9/21
Finalizada: ???
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Sanzu es tierno cuando quiere
El día de hoy Reiko tenía mucho papeleo por hacer.
Ella era una persona perezosa respecto a sus responsabilidades, porque cuando quería, su energía estaba al máximo.
Ciertos hermanos de cabello morado no tenían nada que hacer, habían ido a solucionar unos trámites en la mañana y hasta hace poco que habían terminado su trabajo.
Aburridos, lo único que se les ocurrió a ellos fue ir a molestar a su querida pareja.
Una vez llegaron a su oficina, porque si, allí todos tenían una oficina propia, a excepción de los hermanos Haitani, que la compartían.
— Rei-chan~ — llamó a la chica.
Esta se encontraba rellenando y leyendo papeleo que le había entregado Kokonoi.
— Déjenme en paz —
Su voz sonó directa y enojada, lo que hizo que a los dos hermanos les recorriera un escalofrío por toda su columna vertebral.
— Eres muy grosera, Rei~ — habló ahora el Haitani menor mientras acariciaba el cabello de la contraria.
— No estoy de humor pierdanse —
— Ya no nos quieres — Ran hizo un puchero, al cual le siguió Rindou.
La oji gris suspiró antes de girar su cabeza para mirarlos.
— Perdonen, Ran, Rin, es que estoy un poco agobiada — les sonrió.
— Te podríamos ayudar — sugirió Rindou.
Así es como entre los tres comenzaron a revisar todo ese montón de hojas que había sobre el escritorio de la fémina.
[ . . . ]
Sanzu miró como la peli blanca se sentaba al lado de él en el sofá.
Parecía cansada, pero es que realmente había estado encerrada en aquella oficina cerca de siete horas.
Obtuvo ayuda de los hermanos Haitani, pero un rato después ella les dijo que no se preocuparan y que aprovecharan su momento de descanso, aunque ciertamente el rato que estuvo con ellos pudo avanzar bastante gracias a ellos.
El de orbes color zafiro se acercó a la chica y la abrazó por la cintura, apoyando su cabeza sobre la de ella.
La chica, la cual tenía los ojos cerrados, correspondió a su cálido abrazo sin rechistar.
— ¿Estás muy cansada? — preguntó el hombre.
La contraria solamente asintió levemente.
— Llevas muchas horas allí, ¿comiste algo? — como respuesta recibió una negación por parte de la de ojos grises.
Varias sirvientas pasaron por su despacho preguntando si quería algo, pero ella negaba diciendo que no tenía hambre.
Sanzu no quería separarse de ella, estaba muy cómodo y supuso que ella también, pues estaba casi dormida, pero debía levantarse para prepararle algo, no quería que su pareja se quedara sin comer.
— Rei~ — llamó suavemente a lo que recibió un "mmh" por parte de esta — Iré a prepararte algo de comer, no te quedes todavía dormida.
Con todo el esfuerzo del mundo se separó de ella para dirigirse a la cocina.
Luego cayó en cuenta de que no tenía ni idea de cocina.
Por su mente pasó la idea de llamar a Kakucho, pero luego recordó que no estaba en la casa por lo cual no era una opción. Llamaría a las sirvientas pero ellas se iban a las once de la noche y ya eran las doce y media de la noche pasadas.
La única opción que tuvo fue experimentar para ver que podría cocinar.
Su salvación fue ver un maruchan instantáneo, así que no dudó en agarrarlo y 'hacerlo'.
Se sintió mal no poder cocinarle algo mejor pero al menos lo que cuenta es la intención, ¿no?
— Rei, hice maruchan instantáneo, lamento que no comas algo mejor pero es que no se cocinar — rascó su nuca después de haber dejado aquel recipiente en la mesita de cristal.
La fémina negó, restándole importancia al asunto y comenzó a comer adormilada.
Después de terminar su comida dejó caer su cabeza en el hombro de Sanzu, el cual anteriormente se había vuelto a sentar a su lado.
Después de un rato, Sanzu decidió ir a dormir y dirigió su vista a su pareja.
Se encontraba dormida, por lo que decidió llevarla a su cuarto y dormir con ella, supuso que no le importaría, no era la primera que dormían juntos, después de todo eran pareja.
Reiko abrazó al chico y este obviamente le devolvió el gesto.
Sanzu era alguien burlón, pero que quería mucho a Rei y a sus seres queridos. Él tenía un lado muy tierno y cariñoso, que normalmente sólo salía ala luz con Reiko.
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