Oneshort Lealtad [Roronoa Zoro]

[Kitsune] //NFSW

Advertencias

Kitsune! Arya
NFSW (contenido sexual/
lemon)
Arya en celo
Zoro celos
Oneshort largo
Divergencia del canon
de "Lealtad [Roronoa Zoro]"

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Celoso! Roronoa Zoro x
Kitsune en celo! Arya

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Zoro apretó sus dientes mientras hacía ejercicio aún más intensamente, era uno de esos días en los cuales decidió entrenar en la cubierta en vez de encerrarse en el nido de cuervos, pero ahora su buen humor se había ido al caño debido a que veía como el idiota del cocinero pervertido seguía siendo tan molesto como siempre, pululando alrededor de Arya como si fuese una mariposa siendo atraída por una exótica flor.

Sinceramente, el espadachín estaba en conflicto con respecto a si su continua irascibilidad era debido a que el rubio era un completo idiota pervertido o si era por el hecho de que estaba coqueteando con Arya.

El espadachín no era un completo idiota ajeno, por supuesto que a esas alturas se había dado cuenta de su creciente gusto por la chica Kitsune, ¿Cómo no podría hacerlo? La mujer manejaba ferozmente una poderosa lanza dorada, sensuales ojos rasgados color fucsia intenso, nariz perfilada, labios regordetes por los cuales se asomaban dos finos colmillos, un largo cabello celeste pastel y en su cabeza, dos esponjosas orejas que la hacían ver tan jodidamente adorable, en especial cuando abría sus ojos confundida por las costumbres humanas y actuaba tan linda...

¡Maldita sea! ¡Arya era más tierna que Chopper!

Ugh... no podía negar que él era débil ante las cosas tiernas, no por nada era especialmente flexible cuando se trataba de Chopper o Arya....

Pero, enserio, ¿Quién podría negarse a una hermosa Kitsune que se ocultaba entre sus esponjosas colitas celeste pastel? Abrazando sus esponjosas y mullidas, mirándote con sus ojos abiertos y brillantes por curiosidad, las mejillas sonrojadas y sus labios entre abiertos y... ¡Gah!

—Zoro-ssi está rojo, ¿quiere jugo? —preguntó suavemente Arya apareciendo frente a él, haciendo que las orejas del hombre se pusieran ligeramente rojas—. Parece que te está dando una insolación, lo mejor sería refrescarte un poco.

El espadachín soltó pequeños murmullos inentendibles antes de aceptar beber el jugo que le estaba ofreciendo Arya, mientras sostenía las pesas sobre su cabeza y luego retrocedió ligeramente antes de dejar caer sus pesas en el suelo del Sunny y tomar la toalla que le ofrecía la mujer, haciendo que soltara un pequeño gemido placentero ya que la toalla estaba ría ante su sudoroso y caliente cuello.