Capítulo 52: Encendedor

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Nota: como es Viernes de dosis dulce... allí les van 5 capítulos :D

✨🌙✨

Jueves. 5:58 am

Esta vez no fue la alarma lo que despertó a Nanami sino el sonido de una llamada. Salió de debajo de las sábanas y tomó el teléfono. Ni siquiera revisó quien era.

—Nanami... diga.

Era la voz de Ijichi.

—Señor Nanami... Tengo malas noticias.

Oh su voz temblorosa sin duda era el presagio de la más terrible tragedia. Nanami se incorporó.

—¡Sólo dilo!

—Falló una primera intervención. No pudimos sacar al señor Sukuna de la estación. Estamos en este momento en una habitación de un hotel. Venimos a comer y cambiar de ropa. Por lo que sabemos... todo ha sido planeado como usted le dijo a la señorita Tsukumo ayer... alguien está tratando de culparlo. Por lo que hay algunas cosas que lo hacen ser el principal sospechoso. Son cosas tan... no sé cómo decirlo, obvias quizás, que en verdad parecen una burla. Sukuna ha desmentido completamente las primeras pruebas se puso algo histérico, logramos calmarlo. Y no son solo las pruebas, el fiscal... es de los mejores del país. La señorita Tsukumo está sumamente...

Alguien le arrebató el teléfono a Ijichi. Era ella.

—¡Furiosa! ¡Esto está muy mal por donde sea que lo vea, Kento!

—¿Y por qué crees que estás allí? —le respondió con fastidio. No era bonito escuchar su voz tan temprano.

—¡Ya lo sé! Lo voy a sacar.

—Bueno más vale que no pase de hoy. Sukuna no debe llegar a prisión...

—¡Ah! ¡¿Ahora me estás poniendo tiempo?!

—Desde luego y no es porque quiera. Por favor pide protección para él. Sabes a lo que me refiero. Lo más seguro es que pongan pruebas falsas que lo incriminen. Fue una fiesta sabemos que no estaba en sus cinco sentidos es muy fácil de manipular.

—¡Ya! Sí lo entiendo. Tendrás al ególatra de tu jefe fuera. Algo más ¡¿su majestad?!

—Cuídense ustedes.

Y colgaron. La noche por demás había sido horrible. Solo había dormido cuatro horas y por momentos. Ahora se sentía desgastado justo como cuando salió del hospital, aún recordaba el dolor en su garganta por la irrupción de aquel tubo. Se preparó. Pasó a otra habitación donde tenía una caminadora e hizo unos cuantos ejercicios con la finalidad de despejar su mente. No funcionó. Luego se metió a bañar, la ducha siempre era lo peor porque solo podías pensar y pensar. Escogió un traje gris oscuro y camisa color vino... corbata del mismo color del traje. Salió de su departamento y subió a su coche. Al salir notó que el día era triste, tal vez llovería. Eso no lo animaba y tampoco saber lo que le esperaba. Hizo una breve parada en una tienda cualquiera, compró algo que le fue entregado en una bolsa. Y volvió a subir al coche. Pero... paró... no fue capaz de ver su compra solo abrió la guantera y aventó la bolsa dentro.

Incluso antes de llegar al edificio ya se veía la cantidad de periodistas. Le sería imposible acelerar y entrar ya estaban tapando el acceso al estacionamiento. Volvieron a inundarlo con preguntas y preguntas. Y llegó un punto donde ya solo esperaba que golpearan el carro y lo sacaran a la fuerza. No pondría resistencia si querían hacerle daño estaba bien... solo pedía que fuera rápido. Pudo entrar al estacionamiento y allí se quedó un rato recargado en el asiento. Y cedió. Abrió la guantera y sacó el contenido de la bolsa. Abrió la caja y puso un cigarro en su boca. Lo encendió y dejó que el humo entrara a sus pulmones. Sus manos temblaron ante el consumo de la nicotina. Eso en el pasado lo relajaba y ahora tenía el mismo efecto momentáneo en lo que el fuego lo consumía por completo. Bajó del auto antes de terminar, apagó la colilla y la dejó encima de uno de los botes de basura. Subió al elevador.

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Nota: gracias por leer... no olvides dejar tu voto si te ha gustado el capítulo <3

Moondust - Jujutsu KaisenWhere stories live. Discover now