II

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Era un día soleado en aquel lugar desconocido para Morgan, no sabía a donde ir, así que comenzó a caminar hacia donde sea que iba. Esperaba poder encontrar a alguien que la pudiera ayudar.

Scott estaba en clase apuntando lo del pizarrón cuando un leve aroma llegó a el, inquieto agudizó sus instintos y pudo notar a la pequeña persona que le pertenecía, podía verla desde la ventana del salón y pudo notar lo pequeña que era. Sin decir nada salió de ahí rápidamente, al localizarla suspiro y camino lentamente hacia ella para no asustarla.

—Oye niña, te vi hace unos segundos ¿estás perdida? Te puedo ayudar a encontrar a tus padres.

Morgan se dio la vuelta y miro al hombre que tenía enfrente, achicó sus ojos y tras unos segundos suspiró.

—Hola, estoy perdida me podría ayudar por favor.

—Scott que es lo que te...¿Scott?.

—Está perdida Stiles.

—Hay que llevarla con mi papá, el la podrá ayudar.

—¿Le puedo hacer una pregunta?.

—Supongo que depende cual, soy Scott y el es Stiles.

—¿Usted que es?-Ambos mejores amigos se voltearon a ver.

—No entendemos.

—Si ya sabe, que son, que ser sobrenatural
-Susurro cerca de ellos para que nadie más escuchara.

—Como es que lo sabes...digo... ya no me puedo retractar, ya lo dije-Se encogió de brazos Stiles-Lo siento Scott, pero al menos yo no se lo dije.

Morgan se comenzó a reír de Stiles, le parecía muy gracioso y aunque no lo conocía le agradaba. Scott temiendo la reacción de la niña le enseñó sus ojos y ella asombrada se quedó parada sin moverse.

—Nunca había conocido a un hombre lobo y menos a un Alfa Verdadero.

La Niña comenzó a hablar sobre aquel tema de cómo se enteró de ellos, cuanto estuvo investigando y cuando le había llamado la atención el tema y poder conocer a hombres lobos. No paraba de hablar, hablaba de un tema tras otro y no es que lo hiciera con todos pero cuando se acercaron a ella lo sintió, sintió la calidez que sentía con su familia, con los vengadores.

Stiles miraba a Scott emocionado, aquella niña hablaba tan felizmente y exageraba sus gestos al hablar que quedó totalmente enamorado de la pequeña. Así que no tardo en unirse para platicar con ella. Morgan se presento y contó lo básico de su familia para que así la pudieran ayudar.

—¿A donde vamos?.

—Con un amigo nuestro.

—¿Ustedes son mis amigos? ¿No me harán daño?.

—Somos tus amigos.

—Nosotros no hacemos daño, ayudamos a las personas.

.

No secuestraron a la niña verdad-El sheriff se acerca a los dos jóvenes.

—¿Que? ¿Por qué la secuestraríamos?.

—No lo se.

Scott le hace una seña al comprender los guía a una oficina y cierra la puerta.

—¿Perdida pequeña?.

—Algo así.

Morgan le explica un poco para que pueda comprender, le piden si puede salir un momento mientras ellos platican.

—Saben que es muy poco probable que vuelva a ver a sus padres verdad.

—Lo sabemos papá.

—Tendré que llamar a un orfanato para que se puedan hacer cargo de ella.

—¡No! Papá, nosotros la podemos cuidar, mientras buscamos una alternativa para que vuelva con su familia. No la podemos dejar, le prometimos ayudarla.

—No se puede Stiles ¿Quien la cuidará? Yo trabajo y ustedes van a la escuela.

Mira a su hijo con una mueca, aunque quisiera ayudar a la pequeña no podrían tenerla en casa no la pudieran cuidar. Estaba marcando al número cuando escucho un gruñido.

—Scott que te sucede-Pregunta Stiles preocupado.

—Aléjate Stiles.

—Contrólate.

Sus garras salen y sus ojos se vuelven rojos, otro gruñido audible sale de su garganta.

No se irá de mi lado, ella se queda conmigo.

Con movimientos lentos va colgando el teléfono para no hacer enojar al hombre lobo.

.

—Entonces Derek, ¿Qué haces aquí?-Morgan balancea su pequeños pies en el aire.

—Te conteste tú pregunta para que contestaras la mía no para que siguieras haciendo más.

—Es un extra, quieres información confidencial ¿Quien me garantiza que estás diciendo la verdad?-Mira sería a Derek.

—¿Como se que me estás diciendo tú la verdad?-Enarca sus cejas irritado.

—¿Por que me seguirías insistiendo si no lo supieras?.

—¿Podrías dejar de contestar con otra pregunta?.

— ¿Por qué lo haría si tú también lo estás haciendo?.

Morgan sonrío orgullosa al ver la cara molesta de su nuevo amigo, hacia unas caras muy graciosas. Una risa se escapó haciendo que Derek frunza su ceño.

—Que es lo que te causa tanta risa.

—La caras raras qué haces-Vuelve a soltar otra carcajada.

—¿Por que mejor no vas a jugar con tus muñecas?-Rueda los ojos molesto.

—Jugar con muñecas es aburrido, prefiero entrenar con la Tía Nat eso si es divertido y
ver cómo les patea el trasero a todos.

—Pues vete hacer lo que sea qué haces.

—Me llamó Morgan.

—Hasta allá se escucha la humana ¿Dolor de cabeza querido sobrino?-Se burla Peter.

—¡Oiga señor!-Peter voltea lentamente a verla con el ceño fruncido-Olvídelo ya se donde hace esas caras raras, su querido sobrino.

—No soy un anciano ¡Todavía estoy joven!.

—Usted me dijo humana, lo soy pero me ofende.

—Pero que carácter para alguien tan miniatura como tú ¿Quien eres?-Peter sonríe divertido.

—Que se puede esperar, soy una Stark Strange
-Sonríe orgullosa-Me llamó Morgan.

—Peter Hale, dime solo Peter no anciano que me haces sentir viejo-Derek enarca una ceja.

El corazón se ambos hombres lobos comenzó a latir rápidamente, sintieron un tirón, sintieron a la pequeña parte de su manada y sintieron la necesidad de protegerla.

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