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En estas semanas la manada había estado saliendo más y estaban enfocados en el nuevo peligro que había llegado a Beacon Hills. Ya no compartía tanto tiempo con los de la manada y la preocupación invadía su pecho, pues varías veces miraba como llegaban con algunos rasguños o cortes.

Lo que no sabían que cada vez que los miraba así el enojo se hacía presente y su magia hacía acto de presencia, cada vez más constante y más fuerte que algunas veces le costaba controlarse.

Se había estado quedando al cuidado de Peter. Era el único que se mantenía normal y pasaba el mayor tiempo con ella. Morgan le pidió ayuda para poder seguir entrenando sus poderes pues quería poder controlarlos. El encantado consiguió algunos libros que le pudiera ayudar, así que todo el fin de semana se concentró en eso y en una cosa más.

En el Jeep de Stiles, no sabía si en realidad lo quería pintar así que lo dejo así, pero lo que si hizo fue que alguien lo arreglara. Después de todo tenía la tarjeta de su papá Tony, no se daría cuenta. Al principio pensó que era mala idea pues no la iban a aceptar pero ¡Sorpresa! No se dieron cuenta y fue aceptada.

Esperaba que en verdad le gustara y que no se enojara con ella. Pues fue el único regalo que pensó que le podía dar, ademas sabía que tan importante era aquel viejo y querido Jeep.

En la banqueta Morgan estaba sentada esperando a su manada preocupada porque algo les haya pasado. Cuando los miro soltó un suspiro aliviado y se acercó corriendo para abrazarlos.

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—Todas las tardes se la pasa inspeccionando que el humano lo hago correctamente-Peter le cuenta a Scott-Y cuando está apunto de anochecer sale y se sienta en la banqueta a esperarlos.

—¿Humano? ¿Que es lo que inspecciona?-La preocupación invade todo su cuerpo.

—El regaló para Stiles.

—Gracias por cuidarla Peter.

—Sabes porque lo hago, no es necesario que me lo agradezcan, no cuando se trata de ella.

—¡La cena esta lista!.

Toda la manada estaba en la casa de Scott pues querían tener un momento de paz, sin tener que pensar en los problemas de la manada de Alfas. Morgan emocionada de pasar tiempo con todos comienza a hablar y preguntando cosas, todos se centraban en la pequeña, escuchando cuan tan feliz se escuchaba y las emociones que emitía.

—Morgan es cierto que ya tienes el regalo de Stiles?-Liam hablo mientras se servía más comida y se puso rojo de la vergüenza, lo había olvidado.

Morgan lo volteó a ver mal y sabía que tendría que huir. Stiles la miro divertido y con un brillo en sus ojos, tenía curiosidad.

—Nada puede ser sorpresa en esta manada
-Se cruzo de brazos e hizo un pechero.

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Otras semanas más habían pasado y las cosas iban peor, todos estaban frustrados por no poder encontrar su escondite y pistas. De cierta forma Morgan quería ayudar pero sabía que no la iban a dejar.

Hoy se quedaría al cuidado del Sheriff que de muy mala manera la dejo Peter pues lo necesitaban. Tan solo un descuido y Morgan ya se encontraba dando ordenes de que es lo que tenían que hacer, sentada en el escritorio de su abuelo miraba a todos moviéndose acatando las órdenes.

¿Como es que le hacían caso? Fácil, se había ganado el respeto de todos allí, les mostraba que tan inteligente era y cuanto le gustaba dar órdenes, siempre pensando con inteligencia cada paso.

El sherrif al ver a sus hombres moverse de un lado a otro comprendió lo que sucedía, miro a la pequeña que adoptó como nieta y una sonrisa creció en él. Totalmente seria mientras sus pequeños pies se abalanzaban en el aire, cuando lo miro le sonrió inocente y sus mejillas se tornaron rojas.

—Tan solo me fui cinco minutos y ya los tienes de un lado a otro.

—¿Quien es ese guapo?-Apunta con interés.

—Jordan Parrish, mi ayudante.

Como si lo pudiera escuchar volteó a donde estaban ellos y miraba un pequeño cuerpo en la silla del Sheriff, entonces Morgan lo saludo con una sonrisa. Divertido le devolvió el saludo, y siguió caminando.

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Disparos se escuchan y miraban como una agitada mujer se acercaba.

—¡Nos están atacando! Tiene que salir la niña de aquí.

Se levantaron de sus asientos y comenzaron a caminar para la puerta antes de que dieron otro paso más vidrios cayeron rotos, habían entrado unos hombres. Cuando los miraron supieron que eran uno de los muchos Alfas que estaban invadiendo Beacon Hills.

Preocupada comenzó a jalar al Sheriff que estaba disparando, para cuando habían comenzado a moverse el se tiro contra el, Morgan con su magia lo alejó haciendo que se goleara con un mueble.

—¡Vamos! ¡Tenemos que correr!.

—Tienes que ponerte a salvo.

Comprendió que no lo haría cambiar de opinión así que comenzó a correr, hombres corrían atrás de ella, para cuando volteó a ver iban a matar a Jordan, un escudo lo rodeó y una bola fue directo al hombre lobo. En un descuido por ayudarlo se le tiro encima uno.

Viernes

Su collar se transformó como el traje de Iron man solamente que fue a su mano derecha y lo estampó en la cara de el, comenzó a correr por el bosque y aquella parte que había volado volvió a ella.

Disparaba con su magia dándoles y tirando uno por uno, el último estaba en constante moviendo que no lograba darle así que se detuvo y se quedo quieta. Para cuando sintió que se le iba a tirar encima ¡Pum! Salió a la dirección del hombre lobo y puño del traje al ataque.

Su abdomen dolía y se tocó esa parte, al pararse un poco notó que tenía vidrios incrustados, gimió de dolor y se detuvo al no poder seguir corriendo.

Away from homeWhere stories live. Discover now