IDOL

JOESONGHABNIDA : 69

Esa noche me emborracho después del concierto, mi habitación a oscuras con las cortinas abiertas con vista a las luces de la ciudad.

Es lindo, pero estoy tan triste que mis lágrimas salen. Tocan a la puerta, me sujeto de la cama, mueble y paredes, abro la puerta sin fijarme.

- Apestas a alcohol -

- Eres muy listo - se adentra a la habitación, me sujeta por la cintura y me lleva a la cama - Debes irte Seojin -

- No soy Seojin - me suelta bruscamente en la cama.

- Ojala lo fueras - me siento y tomo otro sorbo de Vodka.

- Ten, medicamentos para la loca que estoy obligado a cuidar - me da los medicamentos que necesito.

- Gracias -

- Debes dejar de beber entonces - me quita la botella.

Barcelona

- Después viajaremos a latinoamerica... Será duro regresar supongo -

- Estaré drogada por la medicina, será fácil -

Me ayudan los medicamentos con mis actividades, pero vuelvo a empezar desde cero con los síntomas secundarios, Jae ik esta más pendiente de mi, vuelve a ser agradable, obviamente no le gustó a la trinidad ni a Gregor este cambio.

- ¿Debes estar en sus entrenamientos? -

- Querías que la cuidara - vuelve la vista a la tableta. - Preparala -

- Claro que lo haré. -

Esa promesa silenciosa entre los dos me inquieta.

Avanzamos el entrenamiento, voy a la escaladora, antes de comenzar Gregor apaga la maquina.

- Hoy te enseñare algo más útil, regresa -

- ¿Por que? -

- Es mi deber prepárte -

- Soy muy tonta y no se las sospechas que tienen con él, pero gracias por preocuparte y ensañarme a ser hábil -

- Te necesito fuerte - se quita los guantes.

- Me dio mis medicamentos. -

- Es bueno saberlo -

- Lamento el trato que te di, no mereces esto. -

- Gracias. Empecemos -

Me enseña Bokator a escondidas de Jae ik. No pongo objeción cuando mis músculos duelen o cuando pienso en lo imposible que es golpear su cabeza con mi rodilla.

- Toma impulso  recuerda donde pisar y gira con tu cuerpo pero ten cuidado al caer nuevamente. -

- ¿sencillo? -

- Lo será con la práctica -

.

Los conciertos y las convivencias mejoran. Todo mejora o son la drogas, pero me siento mejor con todos.

Manejo mejor los mareos  ya no parezco ebria al caminar, a Gregor le tocan mis náuseas durante el entrenamiento, no se enoja, no abiertamente, de hecho es considerado.

Sacó mi cabeza de "La cubeta del vómito", tal cual está nombrada así y fue adornada lo más infantil posible por Gregor, me acerca una botella de agua.

- bebe y escupe - me deja tomar aire, seca mi rostro con la toalla.

- Ya pasará. - le aseguro.

- Él me contó sobre ti, se que pasará. -