Capítulo 38

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- ¿Qué pasa? - saliste al pasillo y pasaste la mirada por todo el espacio, quizás con la esperanza de volver a ver a alguien, ¿A quien?

- Quiero que hablemos, T/N... - Thor te tomó de la mano, deteniendo tus pasos. No te percatabas que estabas alejándote de él.

- Thor... - sentiste un nudo en el estómago, el calor de su mano coló por todo tu cuerpo.

- Deberías tener más cuidado - Thor te miró a los ojos, su mirada era dulce y eso te mataba - Y no llamar tanto la atención.

- ¿Qué? - la atmósfera cambió para ti con ese comentario.

- No quiero que te metas en problemas - Thor pasó a tomarte del brazo - Y eso de salir con ellos a misiones...

- Ok - diste un paso atrás - Me parece que te estás preocupando de más. Solo estoy ayudándolos...

- ¿Preocuparme de más? - Thor volvió a acercarse a ti - T/N, acaban de perderte en esta estúpida misión.

- Primero, - levantaste tu dedo índice casi en la nariz de Thor - nadie me perdió; se dio una pequeña situación que yo misma arregle y recuperé el propósito de la misión. Y segundo, - levantaste el dedo medio junto al índice - no era una "estúpida" misión, ¿Qué te pasa, Thor? El amigo de Rogers nos necesitaba...

- ¿Amigo de Rogers? - Thor se mostró un poco molesto - ¿Te expusiste en una misión banal por un amigo de Rogers?

- Pues para mi era muy importante - te sentiste molesta con la actitud del príncipe de Asgard.

- ¿Por qué? - el tono de Thor fue burlesco.

- ¡Porque yo fui James Barnes, Thor Odinson! - contuviste las lágrimas que querían escapar por las comisuras de tus ojos, respirando hondo - Vi mi historia en ese soldado. Y a mi me hubiese gustado que alguien hubiera ido por mi.

- T/N... - Thor entristeció y te abrazó fuertemente - Lo siento. Solo quiero protegerte...

- Ya no tienes que hacerlo - te alejaste de los brazos de Thor, ese lugar que mucho antes era tu favorito, que ahora ya no se sentía tan "tu lugar" - Tú lo dijiste ¿recuerdas? - te limpiaste las lágrimas con el dorso de tu mano, ocultando tu cara a Thor - Las cosas ya no son como antes.

- Yo dije eso... - Thor caviló - ...lo dije porque...

- Ya no quiero que hagas esto - le miraste muy seria.

- ¿Qué? - rio confundido.

- Esto, Thor... - te encogiste de hombros - Plantearte como mi protector ante los Vengadores, mostrar que tienes un derecho sobre mi... hacer... esto...

- ¿Qué cosa, T/N? - Thor volvió acercarse a ti, pero tú diste inmediatamente un paso hacia atrás.

- Mostrarte afectuoso e interesado conmigo... - ahí venían las lágrimas de nuevo - No tienes idea de lo que me está costando superarte - Thor te miró sorprendido - Tú... - lo sentenciaste con tu dedo - tú tuviste quinientos años para hacerlo... - tu voz se vio afectada por tus sentimientos en ese momento - Yo lo llevo asimilando estos pocos meses...

- T/N... - callaste a Thor poniendo tu mano en sus labios. Tenías que terminar de decirle, ya que tenías la oportunidad y el valor en ese momento, aunque te quebraras por dentro... otra vez.

- Quizás el tiempo corrió de forma diferente para los dos... - agachaste la mirada, respiraste profundo y volviste a verlo a los ojos - ...quizás a ti te ayudó el creerme muerta... - Thor se conmovió y sus ojos se humedecieron - Yo aquí estoy haciéndome a la idea todavía... Y no me estás ayudando, Thor... - tu mano pasó de sus labios a su mejilla, le miraste a sus bellos ojos azules, sonreíste - Dime si te vas o piensas quedarte...

Thor cerró los ojos dolido y una rebelde lágrima rodó por su mejilla. Tomó tu mano con la suya y depositó un dulce pero dolido beso en ella, volvió a poner tu mano en su mejilla y la presionó con fuerza, abrió los ojos y te miro... sentiste un plomo en el pecho y que el piso a tus pies se hundía. Tu garganta ardió como braza.

- Eso pensé... - quitaste tu mano de entre la suya, aunque Thor la presionaba para que no lo hicieras.

- T/N... - Thor se aferró a tu mano.

- Esta bien, Thor... - le sonreíste - ...Estoy bien... - Que gran mentira.

Soltaste su mano y caminaste por el pasillo, no entraste a la sala en donde estaban los demás. Continuaste caminando sin saber a donde ir, solo necesitabas alejarte de Thor.

Al pasillo salió Steve Rogers, que había visto tu figura pasar por la ranura de la puerta, que no estaba del todo cerrada ¿A caso los había estado "espiado" sin querer? ¿Capitán? Miró hacia ambos lados, pero tú ya no estabas, miró a Thor que inmediatamente ocultó su rostro, carraspeó y caminó en el pasillo en dirección opuesta la tuya.

- ¿Y bien? - Stark salió también.

- No está - Rogers miró con intriga hacia donde te había visto ir.

- Pero esta bien... - Stark toqueteó el hombro de Steve - Hablaremos más tarde con ella - y volvió a entrar a la sala.

Caminaste hasta salir del edificio, te dejaste caer en una banqueta que estaba en un amplio corredor. Oficialmente, terminaste con Thor... ya no era algo incierto. Fue un punto final. Y fue en ese momento en el que te derrumbaste de nuevo; lloraste, tus ojos eran un mar de lágrimas y tu garganta estaba ardiendo. Sentiste un agujero en el estómago y clavos en el corazón.

Alguien llegó a abrazarte, no supiste quien era pero te aferraste a esa persona. Acarició tu cabeza que estaba sobre su pecho y te abrazó con fuerza.

- T/N, ¿Qué pasó? - Peter estaba preocupado, se enteró de que te habías perdido en la misión del Capitán Rogers y al solo decirle Stark que ya habías aparecido llegó tan rápido como pudo al Complejo. Y encontrarte llorando lo preocupó más.

- Thor... - lograste decir, apenas se te escuchó.

- ¿Quieres salir? - Peter entendió de inmediato - ¿Quieres ir a otra parte? - Asentiste con la cabeza - Quiero que me esperes aquí - Peter levantó tu cara para que lo vieras, enjugó tus lágrimas y te sonrió con tristeza - Ya vuelvo.

Peter salió a prisa. Fue hasta el estacionamiento y con presteza buscó a alguien que pudiera ayudarle.

- ¡Sam! - corrió hasta él, que acababa de llegar al estacionamiento.

- Parker - Sam le saludó con un movimiento rápido de cabeza.

- Préstame tu auto - Peter le miró emocionado.

- ¿Qué? - rio Sam.

- Solo un momento - Peter juntó sus manos en gesto de suplica.

Seguías sollozando en la banqueta, cuando un auto se estacionó frente a ti. Era Peter, bajó del auto y te extendió su mano. La tomaste con duda, acababas de llegar y ya te ibas... y con Peter. La sonrisa de Peter te dio seguridad, subiste con él al auto y salieron del Complejo Vengadores.

¿QUIÉN ES ELLA?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora