Capitulo 48

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Mmmmm como huele de delicioso por aca - inhalo aun mas profundo el aroma de los wafles y el delicioso y nutritivo desayuno que les estaba haciendo su omega.

El alfa del azabache no paraba de mover su colita y saltar de felicidad al ver a su omega feliz y cuanto amor le brindaba, quizas en un tiempo pasado se habia portado mal, pero se arrepintió y ahora le demostraba todo el amor que tenia por el, lo estaba recompensado.

Ya habian pasado dos meses desde que habian regresado de su luna de miel, cada noche despues de que su cachorra se durmiera, el disfrutaba haciendo el amor con su hermoso esposo.

Se acerco a el por la parte de atrás y envolvió sus brazos en su pequeña y sexy cintura, le brindo un besito en su cuello donde portaba con mucho orgullo y amor la marca que el le habia dejado, la noche de su boda.

El estaba trabajando arduamente todos los dias para poder hacer realidad el sueño de su cachorrita que habia pedido un hermanit@ y el como todo un padre consentidor queria brindarselo.

El omega solto una timida sonrisita - Buenos dias mi amor, ya casi esta el desayuno - susurro el omega castaño moviendo su rostro hacia un lado brindandole un exquisito beso de buenos dias a su queridisimo esposo - como amaneciste mi vida.

Sonrio en medio del beso al escuchar el suspiro de amor que dio su alfa, el apago la estufa a como pudo.

Se giro para poder enrollar sus blanquecinos brazos y sus suaves dedos en medio de sus cabellos azabaches dandole un sutil masaje.

Al parecer su alfa no tenia lo suficiente de el por las noches porque sus manos se dirigieron hacia sus esponjonsitas nalgas y con un apreton el entendio lo que su alfa le pedia.

Sin hacerse el de rogar, el dio un pequeño brinco y con ayuda de su esposo enrollo sus largas y bellas piernas alrededor de su cintura sin siquiera dejar de besarse.

El alfa azabache tomo rumbo hacia la habitacion que ambos compartian, anhelaba hacer suyo de nuevo a su esposo antes de ir a trabajar, necesitaba su dosis de energia y amor para ser aun mas feliz de lo que ya era.

No le importo si su desayuno se enfriaba, que mejor desayuno que comerse enterito a su delicioso omega, que lo estaba volviendo loco con su embriagante y dulce aroma.

Lo que ni uno de los dos se percato fue que la abuela del castaño, que vivia con ellos se habia levantado ya y hiba ingresando a la cocina, cuando vio como esos dos venian comiendose a besos sin siquiera ver el camino, si ella no se hace a un lado para que pasaran, hubieran chocado.

La dama ya de edad avanzada solo movio su cabeza negando con una sonrisita que hizo su rostro enrojecer al ver a su amado nieto en esa situacion, ella daba gracias a los cielos que despues de tantos años de angustia y dolor, podia ver a su niño feliz.

Porque si lo era, ella habia visto todo lo que el azabache lucho para demostrarle al castaño que era digno de su amor, rogaba tambien al cielo que ya pronto tuvieran un bebe, ella estaba como loca por querer tener a alguien mas que consentir.

Ya que su biznieta ya se creia una niña grande ya no le gustaba que la estuviera tomando en brazos y hablandole como una bebe, ella decia que ya era mayor y que ella necesitaba un hermanito para consentirlo entre todos, lo que provocaba que todos sonrieran felices, sentia una paz y tranquilidad, todo lo malo habia pasado, habia quedado atrás.

Ella suspiro, siguiendo su rumbo para terminar el desayuno para los demas, el que su amado nieto habia dejado a medias, con tal de ir a consentir a su alfa.

Los dos tortolitos al llegar a la habitacion, ambos jadearon al alejarse un poquito por falta de aire, el azabache puso el seguro en la puerta ya que no queria que su cachorrita llegara y los encontraran en pleno acto.

No te imaginas las ganas que tengo de hacerte el amor en estos momentos mi amor - susurro el azabache teniendo su frente junto con la de su omega, ambos se encontraban con los ojitos cerrados, disfrutando sus respiraciones agitadas.

Parece que mi bello y sabroso alfa no tuvo lo suficiente anoche - sonrio el omega burlandose de su esposo.

El azabache tambien sonrio de una manera coqueta y sensual - jamas tendria suficiente de ti mi amor, eres tan delicioso que me eh vuelto adicto de ti, por favor dejame hacerte mio mi amor, no seas malito con tu alfa, dale un buen mañanero para tener las fuerzas necesarias para trabajar duro en la empresa.

Dijo el azabache con voz profunda llena de lujuria, su polla dolia como el infierno, su pantalon se hacia cada vez mas pequeño en esa area, el alfa anhelaba con todas su fuerzas el toque de su timido omega.

Mmmmmjumm - suspiro el omega - mmmmm gimio suavecito al sentir los besos sutiles y esa lenguita que hacia todo su cuerpo estremecerse de necesidad.

Corazón ValienteWhere stories live. Discover now