.•°〖Vampire〗.•°

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El frio de la noche chocaba con las mejillas de ambos gemelos, los cuales se encontraban en el tejado de una de las viviendas de el pueblo, estos se encontraban contemplando la gigante luna llena.

Esta vez Nahoya tomo las primeras palabras, retirando su mirada de la luna y posandola en su hermano el cual le miro confundido.
_ Angry, ¿Que haremos él día de mañana? Tú sabés, papá no nos dejara ir a ver los pinos que hay en la montaña.

_ Es tu culpa.- Souta respondió. Y es que era así, ése día, el día que se encontraron con aquél chico Nahoya no se había querido despegar de este, de repente el sol se empezo a asomar y fue cuando el pobre de Souta entro en pánico, su padre los iba a matar, el sol no les hacía mucho daño pero las quemaduras en su piel pálida serian un problema, por eso era mejor utilizar prendas que cubrieran la mayor parte de su piel, pero el problema no era ello, el problema es que era hora de ayudar en casa.

Souta le informó a Nahoya sobre el sol asomandose entre las montañas y fue ahí que reaccionó, se despidieron correctamente del chico y prometieron volver a verlo para luego encaminar rumbo hacía el pueblo con la esperanza de que su padre no notara que aún no se encontraban dentro.

Tan pronto como pisaron la entrada su padre apareció, ceño fruncido y brazos cruzados; mirandoles desde arriba prosiguió a decir. "_ Tienen prohibido subir a esa montaña por una semana, han roto una regla, no se pude llegar a casa luego de que el sol salga, sean el ejemplo de los mas jovenes.-" se marchó tan pronto termino su última oración, dejando a ambos gemelos con la cabeza gacha.

Entrando a casa se encontraron a una hermosa mujer de cabello rubio grisaceo acariciando el cabello de una pequeña con el mismo color de cabello de la mujer mayor, la abrazaron y se adentraron a la calida casa siendo seguidos por la pequeña que se les abalanzó y no dudaron en atráparla.

_¿Como te encuentras pequeña?, ¿mamá te ha dado de comer correctamente? Mamá no debe ser una bruja malvada ¿verdad pequeña Joy? - Fue lo que le pregunto Nahoya a la pequeña. Recibiendo una ligera risita de la menor y gran golpe en la cabeza por la mujer mayor, la cual sonreía mientras se le marcaba una pequeña venita en la frente.

_ Madre por favor disculpalo, estar tanto tiempo bajo el sol le quemo sus dos neuronas, las únicas que tenia lastimosamente. - Souta contraataco, obviamente estando de lado de su madre quien orgullosamente infló el pecho al tener a uno de los gemelos de su lado apoyandola contra dos pequeños moustros que les gruñian levemente.

La mayoría no sabe cómo pasó, pero ambos gemelos se encontraban encima de un vampiro recién elegido por la luna, este se atrevio a atacar a su preciado chico.

¿como paso esto?

Claro, por ser mayores entre los demás vampiros y dando un gran progreso en los días de invierno fueron considerados dignos de dirigir y controlar a la mayoría de chicos que ese año iban a subir a la montaña a entregarse por completo a aquella luna bañada de un colorido tinte rojo, tan escandaloso como la sangre.

Grande fue la sorpresa de ambos gemelos al ver a lo lejos a unos ojos brillar en un azul intenso, estos los analizaban a ambos desde lo lejos y fue ahí donde entraron en pánico, mas de diez chicos y la posibilidad de que siete vampiros se presentaran era alta, tendría que cuidar de que esos tres o dos humanos no fueran asesinados, pero ahora había otro problema. Aquél chico, Takemichi estaba ahí y corría un gran peligro, no podían acercarse o alejarlo de ahí ya que seria un grabe error, los oidos de un Vampiro son muy sensibles al presentarse, aún mas que el oído de un lobo como Takemichi.

Si se mueven, esos cinco vampiros que ya estaban a finales de presentación atacarían sin dudar a Takemichi ya que sería una presa fácil a su vista al ver a uno de sus cuidadores tocarle o cercarse.

Takemichi parece no estar consciente del peligro, cada vez se acerca más a ellos y eso los tiene alerta mirando a cada uno de los ahora ocho vampiros levantándose del suelo y mirando fijamente a la luna, saben que apesar de que esten hipnotizados en cualquier momento pueden atacar.

Lo bueno aquí era que no solo estaban ellos dos, había otro vampiro ahí, uno llamado Izana que al igual que ellos había logrado impresionar a su padre, tendrían que darle el trabajo de cuidar a esos dos humanos mientras ellos cuidaban de su chico.

Cuando ellos iban a por Takemichi un Vampiro se les adelantó y alcanzó a tomarlo bruscamente tumbándolo contra el troncó de un pino haciéndole caer inconsciente, a lo cual los gemelos tomaron a el vampiro y lo tumbaron, haciendo que este caiga al suelo.
Nahoya golpeaba la cara del tipo fuertemente mientras Souta lo tomaba por detrás impidiendole el movimiento. Dejando al vampiro débil se apresuraron a llegar lo antes posible al cuerpo inconsciente de Takemichi, todo esto siendo observado por Izana, el cual sonrio ladinamente tomando a un para de vampiros que amenazaba por pasar y atacar a los dos gemelos, Izana ya arto de ello decidió noquear a cada uno de ellos mientras se sentaba en el suelo y observaba en silencio aquella escena junto a los dos chicos humanos que habían estado todo el tiempo tras suyo.

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Dios, luche un montón para sacar este capítulo.

¿No creen que izana es un amor? Y obvio la hermanita de los gemelos también lo es.

Me alegra que aún sigan leyendo este Fanfic cuándo las primeras actualizaciones fueron bastante cortas, me demore mucho en publicar muchas veces, solo espero que los siguentes sean de su agrado.

Gracias por leer, no olviden darle a la estrellita si les gusto.