subway

cuatro

Alfa.

Era un alfa.

Su omega gimió, Louis tragó saliva con sus ojos abiertos.

"¿Te lastimé?" Preguntó.

Louis no respondió, su corazón latía con fuerza y el frío ya no le molestaba tanto. El alfa vestía completamente de negro y sobre sus hombros estaba un saco haciéndolo lucir como un dios, sus bonitos ojos verdes lo miraron curioso.

"Lo siento, no me fijé." Susurró. "¿Qué haces aquí?" Preguntó, su aroma comenzaba a marearlo y quería enterrar su nariz en su fuente de aroma. Quería hacerle tantas preguntas.

"Me abrumo adentro." Murmuró. "Tienes frío."

No pudo responder cuando ya le estaba poniendo su saco, Louis se dejó, dócil y feliz, observando como abotonaba el saco negro con dedos ágiles.

"Soy Harry, por cierto." Dijo cuando terminó de vestirlo.

"Louis." Susurró. "No te vi."

"¿Perdona?" Harry alzó una ceja.

"En el metro, no te vi." Louis se quitó el flequillo de la cara. "¿Cambiaste de ruta?"

"Resulta que no me curo solo." El alfa sonrió de lado y comenzó a caminar a una banca, Louis lo siguió. "Me quedé en cama."

"Oh." Louis se sentó a su lado. "¿Estás mejor?"

"Sí." Harry lo observó y respiró con profundidad. "Sí, ahora estoy mejor."

"Me alegro." Louis jugó con sus dedos sin saber que decir para no estar en silencio. "Tú..."

"¿Yo...?" Harry lo miró, no parecía tener frío.

"Eres un alfa." Soltó con los ojos cerrados.

"Lo soy." Harry se aclaró la garganta. "Si te molesta, me retiro."

"¡No!" Louis tiró de su brazo haciendo que se sentara otra vez. "Y-Yo creí que eras beta, no olías a nada y sé que no es correcto decir quien es lo que es pero, sólo me sorprendió tu aroma."

"Lo lamento." Se disculpó. "Es sofocante, lo siento." Harry bajó la mirada.

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Harry se mordió el interior de la mejilla, era obvio, Louis no toleraba su aroma y eso lo hizo sentir como si fuera aplastado por un tren. Claro que iba a reaccionar así, su aroma era horrible, era tan intenso que molestaba la nariz y...

"Hueles maravilloso."

Harry lo miró.

Louis soltó una risa.

"Tu aroma es tan agradable, lo siento, me recuerda a muchas cosas que me hacen feliz pero no puedo describirlo." Louis le regaló una mirada, sonreía amplio.

Harry enmudeció.

"¿Por qué antes no podía notarlo?" Preguntó moviendo sus pies en la nieve que comenzaba a acumularse. "¿No tienes frío?"

Harry sonrió y luego se cruzó de brazos.

"Me has quitado el saco."

"Me lo pusiste tú." Se defendió el omega sacándole la lengua.

"Temblabas." Harry intentó no volver a respirar con profundidad sólo para poder llenarse con el dulce aroma del omega pero no pudo evitarlo, el omega no lo notó porque se desabotonaba el saco. "Estoy bien."