¿El final del cuento de hadas?

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Un zumbido constante me despierta, trato de orientarme y logro ubicar la fuente del ruido en la mesita de noche junto a la cama; Alex está al lado mío durmiendo profundamente. Rebusco entre las sábanas mi celular, tengo 26 llamadas perdidas de Laura y una más entra justo en ese momento.

-¿Por qué demonios tanta insistencia, que pasa Laura?.-Pregunto aún confundida y con la cabeza dándome vueltas.

-¡Por fin contestas!, llevo más de media hora tratando de comunicarme contigo. Tienes que apresurarte y venir a mi casa ahora mismo. Tu mamá y Bob llamaron, tuve que mentirles diciendo que estabas en el baño. Quieren venir por nosotras para llevarnos a desayunar. Así que más te vale salir de la cama del motelucho de cuarta al que te haya llevado el engendro de satanás, y traer tu trasero hasta acá.-Dijo mi amiga de corrido sin tomar aire ni una sola vez.

-¿Hace cuánto fue esa llamada?-Pregunté despertando de golpee por la alerta de Lau.

-30 minutos aproximadamente. Más te vale estar aquí antes de que lleguen.-Agregó colgando al instante.

Rápidamente me levante olvidando por un segundo que me encontraba desnuda, tomé la sabana para cubrirme saliendo a toda prisa hasta el baño levantando mi ropa en el camino.

La cabeza me explota de dolor cuando enciendo la brillante luz; y veo mi reflejo en el espejo.

La imagen me muestra a una persona que no reconozco, pero a la vez me es familiar. Mi cabello es un desastre, mis ojos abiertos por completo de par en par y cristalinos; en mi cuello y brazos puedo notar pequeños moretones que supongo son a causa de lo ocurrido la noche anterior. Y una extraña incomodidad en mi entrepierna.

Dejo caer la sabana y entro a la ducha; siento el agua correr por mi cuerpo y de alguna forma intento lavar todo lo sucedido; aunque no sé porque.

Al terminar me envuelvo con una toalla y me percato que la sábana en el piso del baño esta manchada de sangre; la tomó rápidamente llevándola hasta el lavabo para intentar quitar la evidencia de lo ocurrido. Cuando termino extiendo la sabana en la cortina de la regadera para que seque y me visto para después peinar con mis dedos un poco mi cabello; no me da tiempo de secarlo, debo irme de aquí lo más rápido posible.

De vuelta en la habitación; veo que Alex sigue profundamente dormido y decido no despertarlo. Tomo mi bolso y salgo disparada para tomar un taxi hasta casa de Lau.


Sin aliento y con el corazón a mil por hora, llego a casa de mi mejor amiga quien ya me espera con la puerta abierta de par en par.

-Me debes la vida Adkins.-Dice cerrando la puerta tras de mí.

-Lo lamento Lau, me quedé completamente dormida y no escuche el celular hasta varias llamadas después.

-No hay tiempo para juzgarte como es debido en este momento, pero por el amor de Dios Adele, metete a bañar rápido que desde aquí apestas a jabón de motel barato.

-No seas grosera Laura.

-Solo digo la verdad. El imbécil ni siquiera tuvo la decencia de llevarte a un buen hotel.

-¡Ya basta Laura!, no dejaré que me arruines el momento.-Repliqué enojada al tiempo que corría al baño de mi amiga.

-Para nada cariño; apuesto que tu querido noviecito se encargó de arruinarlo él solito...

Antes de ponerme a discutir con ella, preferí abrir la llave de la regadera y bañarme nuevamente. Y sin comprenderlo, no lograba quitarme la sensación de no poder lavar mi piel lo suficientemente bien.

-¡Adele! Apresúrate, tu madre y Bob ya están aquí.-Gritó Laura al tiempo que terminaba de secar mi cabello.

Escaleras abajo me encontré con la cálida sonrisa de mis padres.

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⏰ Dernière mise à jour : May 07, 2022 ⏰

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