Disagreement

59 11 0
                                    

Al llegar el Castillo visualizó rápidamente al señor Cowner, un viejo caballero que vestía excéntricamente y mantenía siempre expresión dura y altiva.

No era la persona favorita de Seungmin y sabía que él tampoco lo era para el señor Cowner.

Respiró profundamente luego de salir de los establos tras haber dejado a Holt en su corral. Caminó hasta la entrada del Castillo pero esta vez Hyunjin no desapareció y lo acompañó en su trayecto a las clases.

Casi había esperado que desapareciera para que no tuviera que ver sus frustrados intentos de baile.

— No pareces muy emocionado — no desmintió a Hyunjin y siguió su camino hasta el salón principal que se encontraba a la izquierda de las escaleras que lo llevaban al segundo piso. —. ¿Tu maestro es tan malo?

Negó, viéndose derrotado. — Soy yo el problema — confesó entonces —. Yo y mis dos pies izquierdos.

— Llega tarde, príncipe Seungmin.

Bueno, tal vez el hombre si tenía una pizca de maldad. Pero era solo porque Seungmin no soporta su egocentrismo y prejuicio.

— Debería trabajar en su puntualidad, un verdadero Rey no-

— No hace esperar a nadie, lo entiendo señor Cowner.

— Y tampoco interrumpe a un mayor. — añadió el hombre.

Seungmin quería arrancar su larga barba blanca y ponerla en su boca. Aún no había empezado la lección y ya sentía como si llevara en la espalda una olla de catorce kilos.

— Colóquese en posición, espalda recta y cabeza arriba. Derecha doblada al frente e inferior cruzada de forma vertical, pie adentro, majestad.

Trató de imitar la posición lo mejor que pudo. La música ya estaba siendo tocada suavemente por la pequeña orquesta del señor Cowner. Habían tres hombres y una mujer; dos tocaban el violín, uno la flauta y luego la mujer que tocaba el violonchelo.

— Concéntrese príncipe Seungmin.

Casi pierde el equilibrio pero se mantuvo en pie. A un lado del profesor Cowner, Hyunjin miraba al hombre y luego a él para imitar su posición con una gracia que hizo a Seungmin fruncir el ceño.

¿Cómo es que la postura le favorecía a su aura elegante tan bien? él parecía un niño jugando a bailar.

— Haga una reverencia.

Hyunjin lo hizo primero, inclinando su pecho hacia adelante al igual que su cabeza. Seungmin trató de imitarlo pues Hyunjin lo hacía ver más fácil que el señor Cowner.

Impresionantemente Hyunjin hacía que se sintiera natural, como la corriente de las olas, era suave y constante pero impactante.

— Eso es, muy bien — felicitó Cowner. —. Ahora, de un paso hacia atrás con la derecha y extienda su mano.

Hyunjin sonrió haciendo lo que el profesor decía antes de agregar —; Solo... intenta ser coqueto, en un baile real es divertido jugar con la contraparte.

— Con que esa es tu naturaleza.

— ¿Disculpe?

Miró con cierto pánico al señor Cowner quien lo observaba con una ceja alzada, esperando una respuesta a lo que había dicho.

Se disculpó rápidamente. — Mi cabeza estaba en otro lado, disculpeme.

Cowner tarareo sin quitar su mueca. — Intente mantener su concentración, majestad, o no llegará a ningún lado en esta clase.

In Love With DeathWhere stories live. Discover now