LEY DE ATRACCIÓN

Capitulo 21

Finalmente llegué a mi amada Turquía otra vez...pero esa vez, se siente distinto,raro y se muy bien porque. Mi auto, la que me acompaña ya hace mucho tiempo, todavía seguía aparcada allí donde la dejé, adelante de mi casa, antes de tomar el taxi. Subo al auto y no me doy nisiquiera el tiempo de entrar a ver mi departamento, que me dirijo hacia la empresa y allí están todos.
Sin saber que iba a volver, por eso cuando entré todos quedaron en shock y mi mamá y el señor Kemal se apuraron en llevarme adentro del despacho para hablar. Le había prometido a Serkan no decir nada sobre lo que hemos vivido en esas últimas horas, así que tendré que buscar una excusa muy buena para que me crean y no se preocupen.
-Hola mamá, señor Kemal-
-Llámame solo Kemal, hija-
¿Hija? Que ha pasado aquí?
-Eh vale-
-las dejó solas, seguro que tendrán mucho para hablar. permíteme solo una pregunta, ¿todo bien con Serkan? no fue el la razón por la que volviste verdad?-
No podía mentirle así y encima darle l culpa a él. Claramente tengo que buscar otra razón.
-Sisi, con Serkan todo genial, pudimos hablar y resolver nuestra situación, trabajábamos muy bien juntos.-
-Me alegra escuchar esto querida, bueno hablen tranquilas, yo tengo una reunión. Les contaré todo después ¿vale?- dice y se va cerrando la puerta.
-¿Mamá? No me vas a explicar porque me dijo hija?-
-Simplemente quiere ser amable, bueno, en realidad teníamos la esperanza de que nos dijeras que tú y Serkan...pues, eso-
-Ah vale, ya entendí-
-¿Y tu porque volviste? Que me alegra mucho tenerte aquí y todo pero, si tan bien se llevaban porque volviste tan apurada?-
Si solo supieras mamá... odio no poder contártelo pero solo estoy tratando de protegerte, no quiero perderte como perdí a papá.
-Bueno, es que había mucho estrés mamá, me empecé a sentir mal y de acuerdo con Serkan decidimos que lo mejor era volver aquí y estar más tranquila.-
-¿Te desmayaste otra vez? Eda eso no está bien, tienes que volver ya al médico-
-No hace falta mamá, Serkan me hizo visitar allá y dijeron que estoy bien, solo es que mi cuerpo no soporta mucho el nivel de estrés que hay en New York.-
-Que alivio, lo tendré que llamar para agradecerle.-
-Como tu quieras mamá. Solo...necesito que vengas conmigo porque perdí las valijas y el celular también.-
-¿Como? Pero hija estás segura de que los perdiste?-
-Si mamá-
-Bueno, vamos ya mismo entonces.-Pasamos toda la tarde de compras, he gastado bastante dinero pero la verdad es que era lo único que podía hacer.  También estuvimos charlando mucho, como solíamos hacer cuando yo era un poco más pequeña.
Extraño bastante esos tiempos la verdad.
-¿Que hiciste para tu cumpleaños en New York hija?-
Una parte de mi solo quería abrazarla y decirle que me despedí para siempre del único hombre que amo y amé en mi vida, pero la otra sabía perfectamente que eso no era posible.
-Estuve festejando con mis colegas y Serkan obviamente.-
-¡Que bonito mi niña!-
-Si la verdad fue una noche muy linda, aunque debo admitir que se sintió raro no festejarlo contigo y con mis amigas como siempre-
-¿Quieres que hagamos una fiesta? O algo para celebrar tu día juntas, aunque ya pasó, igualmente algo podríamos hacer si te apetece-
Lo que menos quiero ahora mismo es festejar, no puedo estar feliz sabiendo el infierno en el que está viviendo Serkan por mi culpa. El dice que no, pero yo de muy bien, que si no hubiese sido por mi el estaría tranquilo allí en New York haciéndose una vida y libre de conocer a una mujer que pueda amarlo sin límites y miedo.
Al llegar a mi casa, veo una cajita sobre mi sillón, debe ser la que he dejado antes de irme. La abro, y cuando veo esas fotos mis ojos se llenan de lagrimas, son todos los recuerdos que tengo con Serkan, de cuando todavía nuestra historia de amor tenía un sentido y libertad.
En ese momento la vida de Serkan depende de nuestra relación, más lejos estemos mejor será por el. Esa foto que tengo en la mano en ese mismo momento, tiene su perfume.
Si cierro los ojos, puedo sentirlo a mi lado, es una sensación tan hermosa y triste a la vez... tocan timbre e inmediatamente guardo la foto en mi bolsillo.
-¡Voy!- digo mientras me dirijo hacia la puerta.
-¿No pensabas decirnos nada?-  dicen Ceren, Pyril y Melo al unísono.
-¡Ay chicas! No saben cuanto las extrañé- digo mientras nos unimos en un abrazo. Pyril me mira fijo y me guiña el ojo, debe haber estado hablando con Serkan.
-¿Salimos?- dice Ceren, ella siempre es el alma de la fiesta, me hace sentir mala amiga tener que decirle que no, pero la verdad es que ya estoy muy cansada.
-No chicas, yo paso. Si quieren vayan ustedes, de verdad. Estoy muy cansada y necesito descansar y estar tranquila, ya tuve bastante con lo caótica que es New York-
-Espero que hayas disfrutado de mi cama, amiga- vuele a hablar Ceren entre risas.
-!Ya cállate! Ajajajaajaj pero debo admitir que es muy cómoda-  y en los brazos de Serkan aún más...si solo supieran.
-Bueno entonces, si la señorita quiere descansar, nos vamos-
-Ay no, quédense de verdad no me molestan eh, me hace bien tenerlas aquí-
-Ya, pero lo que nosotras queremos saber, necesita energías y tiempo querida Eda, así que ve descansado y hablamos mañana.- dice mi dulce Melo.
-Vale, como ustedes quieran.- vuelvo a contestar yo.
-Ustedes vayan, yo necesito hablar con Eda de unos asuntos urgentes de trabajo- dice Pyril y claramente no era de eso que quería hablar, se lo leí en la mirada.
-Claro, siéntate y ya en un ratito hablamos-
-Bueno pues nosotras nos vamos, hasta mañana viejitas aburridas-
-¡Eres tremenda!- digo y cierro la puerta, dirigiéndome rápidamente en el sofá donde se encuentra Pyril sentada esperándome.
-Entonces...- dice ella, se que quiere saber algo así que voy directa al grano.
-¿Quieres saber si ha pasado algo entre Serkan y yo? Pues si, muchas cosas han pasado. Nos volvimos a encontrar y ambos nos seguimos amando locamente como siempre. Pero no puedo estar con el, sabiendo que por esa misma razón, podría estar en peligro. Se que quieren llegar a mi-
-De eso vine a hablar Eda, no quieren llegar a ti. Estos tipos, ese señor...solo buscan vengarse de Serkan y se meten contigo porque saben que él te ama.-
-¿Como? De que estás hablando Pyril..-
-No puedo darte los detalles, porque Serkan me mata si llega a descubrir que te estoy contando eso, imagínate si te lo cuento todo por completo. Lo que tienes que saber es que Serkan simplemente hizo justicia, metió en la cárcel un asesino, que es alguien muy importante para el tío que los está persiguiendo y por eso mismo quiere dañarlo de alguna manera a Serkan.
No va a parar hasta conseguirlo, por eso él se alejó de ti hace tanto tiempo, por eso él te dejó y se fue sin luchar, por ti. Para salvarte y que tengas una vida más feliz-
-¿QUE? ¿Que me estás contando? No me lo puedo creer.-
-Si Eda, esta es la única y sola verdad.-
-Te juro por dios que ese tipo me la va a pagar, esto n ose va a quedar así, querido Ahmet Öztürk.-
-¿Sabes su nombre?-
-Claro, Amy me lo dijo.-
-Eda ten cuidado con lo que haces por favor-
-No te preocupes, voy a tener cuidado y no me va a pasar nada. Ahora tienes que hacerme un favor-
-No Eda no me hagas ponerme en contra de Serkan si se entera de eso, yo..-
-Te doy mi palabra que jamás haré tu nombre. Mañana vas a llamar a Serkan y le vas a pedir el número de Ahmet, lo tenemos que conseguir como sea-
-¿Y si me pregunta porque lo quiero que le digo?-
-Le dirás que te han llamado de manera anónima diciendo que tienen documentos que pueden afectarme a mi y a la empresa y que Engin va hablar con él haciéndose pasar por un policía para rescatar esos documentos-
-¿Cuando estuviste pensando todo esto?-
-Hace mucho que vengo pensando una manera de vengarme, legal y justa claramente.-
-Eres genial-
-Tu también, gracias por ayudarme Pyril, lo aprecio mucho, por cierto ni media palabra con nadie de todo eso, ¿vale?-
-Claro, ni tienes que decírmelo. Sabes que estoy aquí por lo que sea que necesites, cuñadita-
-Bueno bueno ehh no te vengas a burlar de tu jefe señorita-
-Ajajajjajaaja que tonta eres, te quiero-
-yo también, mucho-
-Pyril...-
-¿Que? Dime-
-¿Puedes decirle a Serkan que lo amo y lo extraño mucho? No voy a hablar con él hasta que eso no esté terminado, para protegerlo y cuidarlo. Además, no tengo más mi celular porque lo rompí y perdí mi numero y todos los contactos.-
-Dame tu nuevo celular, yo me ocupo de todo ¿si?-
-Pero no te preocupes, yo puedo sola-
-No pero de verdad déjame ayudarte, en cinco minutos ya tendrás todo arreglado ¿si?-
-Esta bien, toma-
Después de unos diez minutos ya tenía mi celular como antes, vi que también me puso el número de Serkan y una sonrisa melancólica se dibujó en mi rostro.
-Mi trabajo aquí está terminado, te dejo descansar ahora. Cuando tenga el número de Ahmet te voy a llamar ¿vale?-
-Si claro, pero..¿le mandaste mi nuevo número s Serkan también?-
-Si Eda, Ahmet Öztürk no tiene el poder de controlar vuestros celulares y mucho menos vuestras llamadas o mensajes, así que por favor, por lo menos hablen- se que tenía razón y también me moría de ganas de escuchar su voz. la única voz capaz de darme tranquilidad.
Y así fue, cuando Pyril se fue de mi departamento, llamé a Serkan.
-Hola..-
-Lo que extrañaba tu voz...¿tienes número nuevo?.-
-Si, tuve que tirar mi celular. Debo ser sincera, yo no quería hablarte ni llamarte, porque pensé que iba a ser la única manera de protegerte-
-Pero no lo es, no me tienes que proteger a mi, cuídate tú.-
-Yo se cuidar de mi, lo sabes. Pero en ese momento sentí que tirar el celu y entonces no poder volver a hablarte, sería la única manera de protegerte, como te dije antes y también darte la posibilidad de conocer alguien que puedas amar sin tantos problemas-
-Pero yo te amo a ti-
-Y yo también. nunca más voy a amar alguien tanto como te amo a ti, acuérdate de eso siempre. ¿vale?-
-Suena a despedida..-
-No te preocupes, de hecho, quería hablarte también para decirte que le he dicho a mi madre que volví porque tuve mucho estrés y el médico me aconsejó que vuelva-
-Bien, perfecto. Gracias por informarme-
-No me tienes que agradecer...ahora discúlpame, pero me voy a dormir porque estoy muy cansada-
-Vale, buenas noches Eda te amo y te extraño mucho-
-Yo también, buenas noches Serkan-
cerramos la llamada y me tumbé en la cama con el celular en la mano, después de ese día tan agotador finalmente mis ojos se cerraron.