Reencarnando En Un Nuevo Mundo Sin Las Responsabilidades Clichés [FINALIZADA]

Capitulo 32: Fin

Volvimos de la batalla contra el ejército demoníaco, aunque se complicaron las cosas demasiado y terminaron con la intervención de los dioses, pudimos reducir las bajas al mínimo por lo que apenas hubieron muertos de nuestro lado. Por cierto, al llegar al castillo después de teletransportar a todos cai inconciente.

Pasaron unos días antes de poder despertarme y en ese plazo me encontraba en un espacio a parte, hablando con Zest. Según el, no es la primera vez que un humano se convertia en un dios, pero, nadie había adquirido ese resultado de la forma en que yo lo hice. También dijo que, aunque técnicamente ya era un dios completo, pasarán unos Miles de años para que me acepten como uno y tenga que ingresar en el reino divino y dejé de intervenir con el mundo. En resumen, puedo hacer todo lo que un humano haría por unos Miles de años. Pero eso es una historia para otro día.

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Por fin desperté de mi incidencia y los primero a los que me encontré fueron q las chicas que se encontraban durmiendo a mi lado. Cuando vieron que había despertado me abrazaron con fuerza y me dieron un gran regaño por ponerme en tal peligro, al final terminaron perdonandome cuando les prometí cierta cosa, la cual no pienso mencionar.

Por cierto, en cuanto supieron que había despertado los primeros que invadieron mi habitación (luego de las chicas) fueron Kouki y Ayame. Los cuales me pidieron una explicación de todo lo que hice mientras me miraban fijamente, sinceramente, dió un poco de miedo, pero, termine explicando todo y pidiendo disculpas por lo que me perdonaron. Cómo pensé también me pidieron que me fuera con ellos hacia el otro mundo, pero, obviamente yo me negué y cuando le pidieron una explicación simplemente les dije que yo ya tenía una nueva familia y no pensaba abandonarla. Ayame parece que se había dado cuenta de algo y empezó a pedir un explicación con respecto a mis prometidas y yo simplemente le respondí mientras mi cabeza estaba confundida por la seriedad con la que preguntaba, pero mis dudas fueron eliminadas al oir sus palabras.

"¡Entonces yo también me volveré una de tus prometidas!" Dijo con el rostro rojo y todos en la habitación se quedaron en silencio y congelados. El único que se movió de forma normal fue Kouki el cual se giró a mirarme a los ojos con una expresión fría.

"Tu...¿Acaso nunca te diste cuenta de que Ayame estaba enamorada de ti desde que eran niños?" Dijo Kouki y yo me quedé mucho más impactado.

"EL USUARIO HA ADQUIRIDO EL TITULO 'DENSO'.....POR TERCERA VEZ."

Pude sentir como el sistema decía esa última parte con una voz molesta. Quiero decir ¡¡Yo tampoco quiero ese título!!

Al final intenté que Ayame volviera a su mundo original pero se negó y decidí tomarla como mi prometida. También prometí casarme con todas en unos meses y fuimos a informar al rey por nuestra decisión. Por cierto, Leonhart me preguntó si quería algo como recompensa por ayudar a los héroes y dije que quería reconstruir el reino de Brinfeld y vivir hay una vez las cosas se calmaran.

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Pasaron los meses y me case con Ayame, Liscia, Lucia y Kuna. También habíamos reconstruido la mayor parte del Reino de Brinfeld al eliminar a todas las bestias mágicas de las cercanías. El reino estaba reconstruyéndose a un ritmo rápido y seguro, por cierto, me convertí en su rey en el momento en que me case con Lucia, la cual es la única sobreviviente de la familia real de dicho reino. (Aunque su madre tambien estaba viva, pero ella no era original de la familia real).

También cabe mencionar que las chicas siempre me han estado diciendo que quieren tener un hijo, pero yo les sigo diciendo que es demasiado pronto y de laguna forma u otra las termino calmando o cambiando de tema.

"Que bien por ti." Esas palabras vinieron de mi cabeza, más específicamente del que se encuentra dentro de mi. Si, hablo del Dios demonio el cual puede hablar conmigo después de que se fusionó conmigo, es inofensivo, pero, habeses me molestan un poco sus comentarios, pero no puedo quejarme.

"Tu cállate." Dije respondiendo al dios demonio en mi cabeza.

Luego de una pequeña conversación con el, me dirigí a terminar con los asuntos que tenía en cuanto a la reconstrucción del Reino, y así pasamos nuestros días de paz y tranquilidad.

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*10 AÑOS DESPUES*

Un niño se despertaba en una gran habitación en un gran castillo, el niño era Leo Brinfeld, príncipe de Brinfeld. Actualmente tiene 7 años, tenía el cabello blanco como su padre y los ojos rojos como su madre.

El niño se vistió y salió de la habitación para dirigirse hacia el comedor, en el camino se encontró con muchas sirvientas y mayordomos los cuales lo saludaron con respeto. Al llegar al comedor se encontró con muchos niños los cuales ya estaban hay, tambien se encontraban 5 adultos sentados.

"Buenos días Leo." Dijo el hombre de pelo blanco y ojos azules que se entraba sentado en el asiento especial.

"Buenos días padre." Dijo el niño y tomo asiento al lado de los otros niños, los cuales son sus hermanos.

"Realmente te tardaste." Dijo una niña de pelo negro que estaba a su lado.

"Eres lento para despertar Leo." Dijo un niño con pelo rubio y ojos azules.

"Perdonen, es que ayer me acosté tarde por leer muchas historias." Dijo Leo.

"¿Que clase de historia estaba leyendo?" Pregunto una mujer de largo cabello rubio y ojos rojos.

"Estaba leyendo 'Las aventuras del héroe de Tristan'." Dijo el niño lo que provocó que el hombre de pelo blanco se atorara con el agua que estaba bebiendo.

"L-leo, no creo que deberías leer eso." Dijo el hombre mientras miraba al niño.

"Es que quiero saber sobre las aventuras que padre tuvo cuando era joven." Dijo el niño mientras miraba al hombre.

"Ti-tienes razón, pe-pero, es un poco vergonzoso que la gente lea sobre eso." Dijo el hombre mientras se rascaba la mejilla.

"¿Que tiene de malo? Deberías dejarlo leer tranquilo, Sirius." Dijo la mujer de pelo y ojos negros.

"Bueno, si eso quiere." Dijo el hombre mientras se encogía de hombros.

"Por cierto padre, quiero entrenar contigo esta tarde, está vez si te ganaré." Dijo el niño.

"Por mi bien, pero, no podrás ganarme." Dijo el hombre y se ganó unos pelliscos en sus mejillas por parte de las mujeres que estaban a su lado.

"Deberías ser más fácil con tu hijo." Dijo otra mujer con pelo rubio que estaba a su lado.

"Tiene razón." Dijo la última de las mujeres, la cual tenía orejas y cola de zorro.

Así era la vida de Sirius despues de haber logrado la paz y haber formado una familia feliz...

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Hola, soy CesarOtamer4 y vengo a avisarles que este será el final de mi primera historia.

Espero que a todos ustedes que la han leído hasta aquí les haya gustado y la hayan disfrutado.

Bueno, me despido, pero no será el adiós para siempre. Si me da por escribir otra historia pues lo haré. Bueno, si antes no me lleva Camión-kun.

Ahora así. Chaaaaaooooooooo~~