Un sentimiento de culpa.

#46.

Esos alfas ya habían llegado, estaban jugando un poco con Kenma quien ni siquiera puso resistencia. ¿Que podría hacer contra esos alfas? ¿golpearlos? seria estupido, solo tenía la esperanza de que Kuroo viniera hacia el, lo salvara.. odiaba no ser salvado, odiaba siempre caer en todo y que nadie lo ayudara, ¿había hecho algo mal? ¿había hecho algo tan malo para que su vida fuera así? eran unas múltiples dudas.

Los alfas ya habían comenzado a meter su pene en el, como si fuera una muñeca inflable; ¿eso era lo que realmente era? en esos momentos, se consideraba una pequeña muñeca, no un humano.
El grito de Taiki se hizo presente segundos después de que un gran golpe se escuchara, Kenma se sintió ya salvado; era su alfa pero no era Kuroo realmente, Kenma sabía que el no vendría por su cuenta.

— Alfa..

Sus ojos brillaron con suavidad al ver como Kuroo entraba, las feromonas de furia no tardaron en hacerse presente en toda la habitación afectando de inmediato a los alfas que se encontraban en esa habitación e incluso a Kenma.

Kuroo no dijo ni una sola palabra, solo comenzó a golpear a cada uno de esos alfas quienes se debilitaron al sentir las feromonas de un alfa realmente enojado, furioso. El alfa no sabía cuántos alfas habían ahí, solo tenía en mente que quería matar a cada uno de ellos si fuera posible y si bien no los mató, les rompió a cada uno uno que otro dejandolos en el piso.

— Pequeño..

Kenma miró a el hombre que tenía en frente y solo rompió en llanto nuevamente. El alfa de Kuroo no salía hacerse presente, solo en su celo de vez en cuando pero hundido en sus "instintos" de celo, por lo cual, mucho contacto entre ellos no había pero Kenma lo adoraba. El era en si posesivo, pero era cariñoso, lo aceptaba tal cual era y lo hacía sentir valioso de una u otra forma, lo adoraba.

— Ven, ven. — Lo cargó, haciendo que se colgara de el como un Koala.

Las feromonas de furia poco a poco fueron desapareciendo, cambiándose por feromonas de amor y tranquilidad, haciendo que Kenma pudiera sentirse más seguro y poco a poco dejara de temblar.
Kuroo comenzó a caminar hacia donde se encontraba Taiki quien estaba tirado en el piso.

— A los alfas no se los llevaran, pero a ti sí.

— N-No me hagas nada.. — Rogó. — Kuroo, por favor. Sabes que no soy.. a-ah.

— No soy como el otro Kuroo, así que rogando no haras nada.

Tomó su celular  para así llamar a la policía quien no tardó en llevárselo, Taiki vivía un infierno dentro de la cárcel y era obvio que inocente no saldría, tendría el cargo de intento de homicidio hacia Kenma. A los alfas no se los llevaron, solo los dejaron fuera de la casa de Taiki y ya.
Cuando se lo llevaron, Kuroo cubrió a Kenma con la chaqueta que traía encima para así comenzar a caminar en dirección a la casa de Kenma.

— Perdoname por.. no estar, ¿sí? yo realmente no quiero que sigas así y te amo, te amo demasiado Kenma.. — Besó su cabello con suavidad. — Desde que comencé a existir, te amé y te amaré pero se que tu no eres feliz, se que el otro Kuroo te trata horrible y detesto eso, lo detesto por que se que tu eres un omega increíble y si hubiera la posibilidad de eliminar el enlace que tenemos.. lo haría y me dolería demasiado pero la prioridad eres tú, quiero que te sientas bien y que seas feliz, que busques a la persona que realmente te haga feliz y que te haga sentir importante por que se que yo no puedo estar y no podré estar siempre para protegerte.

— Estoy bien así. — Habló en un tono suave. — No hay necesidad de separarnos y aunque se pudiera, no lo haría por que estaremos juntos para siempre y.. siento que aún puede cambiar. — Se escondió en su cuello, rozando su nariz con suavidad en ese lugar. — Lo único que nos puede separar es la muerte, ¿no? — Rió con suavidad. — Estaremos juntos.

Kuroo simplemente suspiró, dando cariño hacia Kenma. Le preocupaba su omega, tenía miedo que algún día el no pudiera aguantar y se fuera de este mundo, no quería perderlo por nada del mundo, quería realmente tener una adorable vida con el, verlo crecer y luego tener sus pequeños cachorros, verlo vivir feliz sin preocupaciones de su cuerpo ni de el mismo, pero con la real personalidad de Kuroo no se podría.
Cuando llegaron a la casa, tocó la puerta y abrió Sugawara.

— ¡K-Kenma! que.. oh.

Miró a Kuroo por unos segundos, no tenía la misma vibra de siempre pero igualmente su cuerpo tembló.

— ¿Puedo explicarle después? solo.. Kenma necesita descansar. — Lo miró, sonriendo con suavidad e intentando verse amable.

Sugawara asintió, desconfiado.

Kuroo fue a hacia la habitación de Kenma, dejándolo en su cama para luego cubrirlo con unas pequeñas mantas. Kenma de camino había dormido, por lo cual Kuroo solo dejó un beso en su frente y sonrió.

— Perdoname por todo.. te amo.

Luego de eso, volvió a bajar para así ir por Sugawara quien en ese momento estaba entre enojado y desconfiado, sabia que Kuroo no era bueno.

— ¿Que le hiciste?

— Sugawara yo..

— ¿¡Que le hiciste!? — Interrumpió.

El dolor de cabeza se estaba haciendo presente en Kuroo, sabia que su lado "humano" si se podría decir así estaba intentando volver así que tendría que hacer las cosas rápido.
Kuroo llevó a Sugawara hacia un sillón, sentandolo ahí debido a que no quería que se alterara, podría afectar a su bebé.

— Primero escuchame, ¿sí? — Se sentó frente de el. — Explicando un poco.. no soy el lado humano de Kuroo, si no que su alfa.. me entiendes, ¿no?

— Mh.

— Kenma me mandó una señal de ayuda y sabía que las cosas no iban para bien. Intenté tomar el control del cuerpo de Kuroo por que sabía que el por su cuenta no iría y al hacerlo, fui hacia Kenma. — Bajó su mirada, mordiendo su labio inferior. — Taiki, un amigo de Kenma estaba ahí. Había planeado al parecer.. dañar a Kenma, también habían alfas abusando de el y yo.. solo. — Lo miró a los ojos, sintiendo como estos se humedecian. — Disculpame por no poder salvar a Kenma a veces.. pero por favor, cuidalo y protegelo, no quiero que lo dañen más. — Respiró de forma profunda. — Se llevaron a Taiki y probablemente lo metan a la cárcel. Denuncienlo, hagan que pague lo que hizo y aunque no pude hacer nada contra los alfas, contra Taiki si se puede.

Sugawara cubrió su cara, sollozando. ¿Por qué le tocaba todo eso a su pequeño? Kenma era un pequeño angel que no dañaba a nadie, Kenma solo merecía ser feliz, merecía todo lo bueno.. Sugawara estaba aburrido de que siempre le dañaran a su pequeño Kenma, ¿pero qué más podría hacer? ni Kouki podía hacer algo siendo que los alfas siempre eran quienes lo dañaban, ellos reinaban.

AAAA fue duro escribir este cap así que espero lo hayan disfrutado! <3

recuerden seguirme en ig (@vikkyu__) subo cositas de mis historias y así:D

y esop, ahora iré a almorzar tranquila dkskd chau, los quiero