23.

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—Que haces acostada en el pasto?

Esme abrió sus ojos y la enorme cara de James esta sobre la suya mirándola con curiosidad.

—Trato de relajarme.
—Y no puedes relajarte en la cama como una persona normal?

Esme le hizo una mueca y James le sonrió, ella apartó la cara y se volteo para acostarse boca abajo dejando su caneca y pecho levantados y te ardiste en sus brazos.

—Te quieres unir a mi?
—Los insectos hacen popó en el pasto.
—Dios mío, deja de ser tan ridiculo.
—Esme, mis pantalones son Versace, como me voy a sentar en la popó de animales?
—Quien se pone pantalones Versace para estar en su casa? Además no es como si no pudieras comprar otros.

James se sentó junto a ella, estirando sus piernas y quedando en forma de L, Esme se levantó y se puso a su lado tomando los hombros de James y empujándolo para que se acostara quedando ella encima de él para después acostarse a su lado.

—Aunque no lo creas, nos parecemos en algo James.
—En que?
—Yo tampoco disfrutaba mi vida, si hacía algunas cosas pero nunca disfrutaba todo al cien por ciento. Me deje llevar tanto por el trabajo que empecé a descuidar otros aspectos de mi vida, al igual que tú.
—Y ya no mirabas el cielo.
—Era algo que hacía cuando era niña.
—Hacías muchas cosas cuando eras niña.
—Tu que hacías?

James se quedó pensando. Desde que su familia había fallecido, la mayoría de sus recuerdos habían sido bloqueados, pensaba que si no recordaba sus experiencias no le dolería el pensar en su madre y hermana.

—De niño siempre quise tener una piscina, era mi sueño y cuando estaba buscando una casa lo primero que miraba era la piscina.
—Desde que llegue jamás te he visto usarla.
—No tenía tiempo.
—Y que te detiene en este momento? Tienes que crear nuevos recuerdos James o será muy tarde.

James fingió que pensaba unos segundos y se puso de pie, tomó a Esme como si fuera un bebé y comenzó a caminar a la piscina.

—No lo hagas, no se nadar James.
—Confías en mi?
—Tengo opción?

Esme cerró los ojos y dejó de respirar haciendo que James comenzara a reírse y saltó junto con ella adentro de la piscina. Adentro James soltó a Esme por unos segundo y volvió a tomarla con sus manos por su cintura y Esme puso sus brazos alrededor de su cuello para luego salir a la superficie.

—¡Tus Versace James!— Le gritó Esme y James solo se rio.
—Cada semana íbamos a comprar un helado, era el único día en el que podíamos pedir lo que quisiéramos.—Hablo James viendo los ojos de Esme.
—Y qué pasó?
—Pues crecimos y... deje de hacerlo.
—Por que te limitas tanto?
—Quieres hacerlo?
—Hacer que?
—Crear recuerdos conmigo.
—Y por qué no? No tengo nada que hacer.

James comenzó a nadar hacia la orilla y Esme lo apretaba con fuerza porque comenzó a sentir frío, cuando llegaron a la orilla James salió primero y fue por una toalla para dársela. Esme se tapó y fueron a la cocina.

Esme se sentó en la isla viendo como James se quedaba en el medio sin saber qué hacer.

—No sabes donde está el helado?
—No se donde está todo.
—Lo intentaste— Dijo mientras palmeaba la espalda de James.

Pasaron unos quince minutos y la isla estaba llena de botes de helado, galletas y varios dulces.

—Por que tengo todo esto en mi casa y no lo sabía?
—Por que eres un aburrido. Buenas tardes señor, que le puedo ofrecer?

James no pudo evitarlo y comenzó a reírse.

—Crees que puedas darme lo que quiero?
—Lo intentaré.
—Uno de vainilla con todo lo que puedas ponerle encima.

Esme asintió y tomó un plato hondo y comenzó a servir varias bolas, le puso chocolate líquido arriba y comenzó a quebrar galletas para esparcirlas. En ese momento James se sintió en paz, aunque su vida estaba a punto de cambiar sintió tranquilidad y algo de felicidad.

—Son 10 dólares.
—No te parece algo caro?
—En serio? El hombre que compra pantalones de 2000 dólares está llorando por 10 dólares?

James sacó su cartera la cual aún seguía mojada y le mostró a Esme que no tenía ninguna billete.

—Aceptas tarjeta?
—No se puede.
—Puedo pagarte de otra forma?— Pregunto James.
—Y de que forma seria?— Esme se acercó un poco.

James le acercó una cucharada d helado a la boca y Esme la aceptó, James sintió algo en su cuerpo, Esme toda mojada, su ropa interior traspasando un poco su pequeño vestido, acercando su cara a él, quería tirar todo lo de la isla y solo ponerla en la mesa para ahora comerse a ella.

Esme tomó la otra cuchara y con su lengua comenzó a lamer el helado sin meter la cuchara a su boca, unas gotas comenzaron a bajar por su boca y James se acercó más queriendo limpiarlas con su lengua pero acercó su dedo y las quito.

—Tiene una llamada señor.
—Estoy ocupado.— Respondió James sin dejar de ver a Esme.
—Es importante, de verdad.

James torció los ojos y volteó a ver a Colson asintiendo, se alejó de Esme y volvió a echarle una mirada antes de decir algo.

—No te vayas, volveré rápido.
—Está bien, tomate tu tiempo, yo estaré en la sala.
—No. En serio, quédate aquí, no voy a tardar.— Le dijo de forma autoritaria.

Esme se quedó de pie hasta que el hombre salió de la cocina, se estaba dando cuenta de que James ya la estaba apreciando o por lo menos ya la toleraba un poco más, gracias a eso ya se sentó un poco más segura pero la culpa ya estaba comenzando a atormentarla, James realmente estaba haciendo un esfuerzo mientras que ella solo fingía pasarla bien con él para así tener otro día más de vida asegurado.

En su estudio James tomó el teléfono aún molesto porque Justo cuando estaba teniendo un gran momento lo interrumpieron.

—James Barnes.
—Lo siento James...

Las palabras de Steve hicieron que La Paz que James había conseguido ese día desapareciera por completo.




Se me olvidó poner mi notita como siempre jajaja, la verdad me siento triste de que no haya algo de Steve con Esme porque a mi me gustan ellos, sus personalidades son parecidas en mi cabeza y pues....
Muchas graciaaaas por leeer ❤️❤️

Líderes -Bucky Barnes-Where stories live. Discover now