Bad Boys, Soft Boys Y Otros Descorazonados ~ Temporada 3

El Laberinto Divergente Del Hambre ~ Parte 2

Está bien, Gómez, no entres en pánico. Esto es simplemente una trama distópica tonta de libro prepuberto, pero con vampiros y hombres lobos. Nada que no hayas visto un millón de veces antes. Sobreviví a la ola de popularidad de Crepúsculo y Los Juego Del Hambre, puedo sobrevivir a esto.

Entonces, un cáliz de fuego. Lo siento, un cáliz de llamas, para evitar copyright. Si se trata de una situación tipo Los Juegos del Hambre, significa que las personas propondrán su nombre y se elegirá uno entre los grupos codificados por colores, como la selección de distritos. Siempre y cuando yo o cualquier otra persona de nuestro grupo no ponga su nombre, debería ser fácil saltarse todo este galimatías.

Otro cáliz más pequeño se coloca en el fondo del podio con piedras claras, como las que puedes encontrar en el fondo de la pecera de un proxeneta. Todo el mundo está callado como una cebra y casi igual de inquieto. El cáliz de llamas se coloca entre el cáliz de roca y el podio. Bueno, llamarlo "en llamas" es un poco... excesivo. Parece que alguien le echó una onza de sambuca y le prendió fuego. Ahora que lo pienso, el "cáliz," parece un vaso plástico que alguien sacó de una fiesta de universitarios mariwanos. ¿Alguien robó esto de una mesa de beer pong?

—¡Y ahora, procederemos con la ceremonia de selección! —grita el Dragoabuelo, elevando su bastón a los cielos—. ¡Acércate y coloca una roca con tu aura en el Cáliz de Llamas Quenoinfrinjeninguncopyright!

Se forma una fila frente al cáliz de roca de miembros de las diferentes tribus codificadas por colores. Parecen la línea de M&M más grasienta del mundo. Puedo saborear el arcoíris, y sabe a sudor y esmegma.

Puedo ver que, cada vez que alguien levanta una piedra, se vuelve de un color diferente. Bueno, es mejor que tener que cortarte la mano y poner mi sangre en unas rocas raras, pienso yo. Luego, la roca se arroja al cáliz. Dado que es solo un vaso plástico, se llena bastante rápido. Un asistente dragonoide agarra el vaso y arroja las rocas a un balde. Por qué no usaron el balde en primer lugar está más allá de mi comprensión mortal. Tal vez piensen que un vaso plástico es como una reliquia humana, robada de alguna guerra de hace mucho tiempo. O tal vez, solo tal vez, no me importa.

Lo que sí me importa es que nadie en nuestro pequeño grupos se acerque a esa orgía arcoiris. Hayden parece estar tan confundido como yo. El BL y Trevor el Hombre-hombre solo miran fijamente a la procesión. Okayden también está observando cada movimiento con sumo cuidado, excepto por los pocos momentos en los que Brayden lo distrae tirando de sus alas con la curiosidad de un nene con TDAH.

Mi hipótesis parece ser correcta. Mas o menos. Y sin Okayden poniendo su nombre en el vaso de demanda por copyright imminente, está rechazando hacer lo que haría un bad boy y evitará todas estas tonterías. ¡Bien hecho, Okayden! Muy orgulloso de ti, amigo. Todavía quiero saber qué quiere en la vida después de esto. Le preguntaré cuando todo esto termine.

Se necesitan un poco más de diez minutos para que la línea disminuya y al menos seis cubetas llenos de guijarros. Hace mucho tiempo que el cáliz perdió el fuego en el interior, y ahora es solo una copa deformada y medio rota que uno encontraría en el patio de una casa de fraternidad después de la juerga mensual obligatoria.

¿Cuando podremos ir a casa? Ahora es como la 1 a. m. y Brayden necesita su sueño reparador. Ya se está poniendo de mal humor, incluso después de que Hayden le dio una caja de juguito de manzana de emergencia.

Por suerte para nosotros, el último guijarro ha sido arrojado. Alrededor del 70% de los asistentes dieron su nombre, según mi mejor estimación. El Dragoabuelo sube al escenario una vez más tras una breve pausa de suspenso.

—¡Y así, la selección ha terminado! —grita el Dragoabuelo. Varios asistentes agarran los baldes y los sostienen en alto—. A todos los que han lanzado su nombre, de acuerdo con nuestras antiguas tradiciones... Tomaremos nota de su cobardía, y su fracaso en dar un paso adelante en este momento de necesidad será una mancha en el nombre de su familia.