¹𝗘𝗧𝗜𝗔𝗠 [𝓛𝔂𝓭𝓲𝓪 𝓜𝓪𝓻𝓽𝓲𝓷] {𝘁𝗲𝗲𝗻 𝘄𝗼𝗹𝗳}

𝗦𝗘𝗫 (+𝟭𝟴)

𝗦𝗔𝗘𝗩𝗜𝗘𝗡𝗧𝗘𝗦

—SEIS

❝Intrusos❞

—Recuerden que si necesitan ayuda pueden pedírmela, estoy en segundo pero estaré al pendiente. Los profesores son buenas personas, hay unos que son más eufóricos que otros y otros que no parecen tener estamina en absoluto pero estarán bien, solo no hablen durante economía y no entren al equipo de lacrosse.

Pongamos al día un poco lo que había estado ocurriendo en las últimas dos semanas con la manada McCall: ya todos conocían a los recién llegados, ninguno se había opuesto debido a que ambos eran realmente carismáticos (y Ruby había dado un par de amenazas) y era casi imposible negarse a su encanto. Kurt y Syaoran estaban en primer año de preparatoria, fácilmente los habían aceptado en la Preparatoria de Beacon Hills con ayuda de los chicos de tercero y de segundo, dependiendo mucho más de la influencia que tenían las excelentes calificaciones de Lydia y Ruby y la capitanía que Scott poseía; (por no decir que incluso el director se había compadecido y encariñado con el par de niños).

Aquel era el primer día de los niños, Ruby les daba información extra mientras recorrían los pasillos, detrás de ellos iban Scott y Stiles, sonriendo ante la ternura y paciencia que Ruby irradiaba con aquellos dos, lo que ella ya no demostraba con sus hermanos.

—Es buena en esto.

—Siempre tuvo ese instinto —su hermano mayor asintió—. Derek estaría orgulloso.

—O quizás molesto, ya sabes que es un hombre lobo amargado que apenas tolera niños, no tiene tacto en absoluto con las personas y carece de habilidades sociales —Stiles hizo una mueca logrando que su amigo riera—, pero sí. Lo estaría.

—Estuvo tan ocupada con ellos que todavía no pudo conocer a Theo.

—No es como si fuera muy importante igualmente —murmuró con fastidio.

Después de años de amistad, Scott y Stiles pasaban por un leve momento de tensión debido a los intrusos recién llegados al pueblo. Ruby había visto a uno de ellos de reojo en los pasillos, junto a su hermano mayor y también recordaba que él los había ayudado con aquel sujeto que casi había asesinado a su hermano, pero lo cierto era que poco le importaba la existencia del rubio, sabía que era compañero de los mayores de la manada, que su hermana había muerto y que parecía demasiado angelical, tanto que no podía decidir si confiar en él. Su instinto de Alfa nunca fallaba y ese tipo no le daba buena espina. Sabía lo suficiente de él y, teniendo en cuenta que no le daba buena espina, consideraba que era más información de la que quería.

—Por favor ya no nos llames así.

—Pero si son mis cachorros.

— ¡Kurt lo es!

—Y tú lo serás pronto —la morena les sonrió y dio un apretón en los hombros de ambos—. Almorcemos juntos.

—Bien —aceptó el rizado antes de tomar la mano del más bajito y entrar a clases.

Las clases transcurrieron con normalidad para todos los miembros de la manada, tenían clases diferentes pero habían almorzado todos juntos, poniendo al día a los nuevos y haciendo que se sintieran cómodos.

Ruby se sentía feliz de saber que la manada los había aceptado, sus amenazas no habían sido tan necesarias al final. Kurt y Syaoran se habían ganado un pequeño puesto en el círculo y les encantaba. Kurt era más reservado y tranquilo, además de ser perezoso hasta no poder más, era alto con rizos azabaches, piel suave y ojos café oscuro, Syaoran sin embargo era lo opuesto, estaba lleno de energía y a veces hablaba realmente alto, llegando a ser un poco molesto para la audición licántropa, era bajito y también tenía rizos azabaches, solo que menos definidos, sus ojos también eran café oscuro y tenía pecas en sus mejillas dándole un adorable toque.