VI

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Señor, usted no puede llegar y entrar en mi casa de esa mane–

– Cierra tu puta boca, Changbin. ¿Dónde está el hijo de puta?– Park estaba enfadado, ayer el mencionado no le había enviado las fotografías que había pedido, eso implicaba un mayor retraso en obtener su dinero.– ¿¡Dónde!?

– Abajo, joder. Por aquella puerta– Le indica con su dedo índice y tensa su mandíbula, dedicándole una mirada rápida a su amigo, ambos estaban nerviosos.– Park.......

El mafioso abre la puerta de un brusco movimiento y baja las escaleras, abriendo la puerta de la celda de manera ágil. Su mirada se cuenta con la del menor el cual estaba sentado en la cama con un libro en la mano y con fuerza tira de el hacia abajo, dejando a Hyunjin completamente descolocado y asustado.

– ¡Puto niñato malcriado! – Lo empuja con fuerza, haciendo que el mas joven caiga inevitablemente hacia atrás, golpeando su espalda y cabeza contra el suelo. – Esto es porque tu padre no ha pagado nada. – Su puño impacta en su cara con brutalidad, recibiendo como respuesta un gemido de dolor. – Esto es porque me estas trayendo muchos problemas con la policía de mierda.– Se levanta y lo patea en la costilla, haciendo que se coloque en posición fetal para intentar recibir menos impacto.– Esto es porque me estás haciendo gastar mi jodido tiempo......

– Basta, Park. – La voz de Changbin lo hace soltar al rubio y lentamente saca la pistola de su bolsillo, apuntando hacia el rostro del agredido.

– Un paso y lo mato, te lo advierto ¿Desde cuándo te importa que le dé una paliza a alguien? – Una risa sarcástica escaba de sus labios y niega con suavidad, regresando su mirada al rubio para volver a darle una patada, pero en el rostro.

Changbin respira profundamente al ver al contrario en el suelo, con el rostro ensangrentado y desvía la mirada, no iba a negar que verlo bañado en sangre no lo excitaba, pero no era la "manera" en la cual desearía verlo. Estaba enojado, pero no ganaba nada si intervenía mas es probable que lo mate,

-Es espero que sepas princesa que tu padre tiene menos de 10 días para entregarme los millones que me debe o vas a morir. Voy a venir yo y te voy a matar.- Su mirada era penetrante y fría, al igual que la de Changbin, pero parecía que estaba vació por dentro y no tenia ninguna historia para estar así.

Park se aleja y camina rápidamente hasta la salida de la habitación, no sin antes empujar a Seo hacia atrás con rudeza, acercándose a su oído para murmurar.

-Mátalo cuando falten ocho días, ¿Vale? Este no puede salir vivo de aquí. -Dicho esto sube nuevamente y abandona la casa, dejando a Hyunjin desorientado y en pésimas condiciones.

Bangchan baja por las escaleras, viendo la escena perplejo y suspira con profundidad, apoyando su mano sutilmente sobre el hombro de su amigo y lo mira detenidamente, descubriendo aquello que parecía tan bien oculto

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Bangchan baja por las escaleras, viendo la escena perplejo y suspira con profundidad, apoyando su mano sutilmente sobre el hombro de su amigo y lo mira detenidamente, descubriendo aquello que parecía tan bien oculto. Sube otra vez, caminando hacia el baño para tomar el botiquín y una botella con agua de la cocina antes de regresar al sótano para entregárselo a Changbin, dejándolo solo.

El mayor se acerca hasta el herido y coloca suavemente su mano sobre su brazo, intentando hacer que dejara su posición fetal y muerde su labio inferior, tenia un gran corte en su mejilla, trataba de controlar su impulsos por morderle aquella zona y probar su sangre.

El rubio se limitaba a llorar y abre sus ojos para encontrarse con los de Changbin, sentándose con cuidado antes de lanzarse a sus brazos con fuerza, sujetándose de su cuerpo como si su vida dependiera de ello y es que, realmente era así.

-Tranquilo...- Murmura acariciando su espalda con lentitud, probablemente su camisa iba a quedar con sangre, pero eso no algo que no importaba en estos momentos. – Respira, tranquilo.

Hacia tiempo que no recibía un abrazo y jamás había recibido uno de su victima lo unico que recibía en cambio de ellas era su ultimo suspiro antes de acabar con sus vidas de la forma mas grotesca que se le ocurría, pero esto estaba mal.... Era consciente de que estaba realmente mal, porque las posibilidades de que Hyunjin saliera con vida de esto era nulas y quería hacerle sentir bien, porque no había otras oportunidades. Estaba angustiado, necesitaba salir y tomar aire o quedarse allí.

"¿Qué mierda Changbin? Tú no tienes sentimientos, déjalo estar y ya....

Son sus últimos días, joder

Pero no tienes que hacer esto, déjalo ahí y vete, luego esperas a que venga Park y por fin para él, dinero para ti."

-Yo no.... Yo no debería estar abrazándote.- se separa dejando al contrario sobre sus rodillas, sollozando, el estaba completamente destruido y era lógico. – Te curare y me iré.

-N-No, por favor. – Hyunjin observa fijamente, al contrario, inclinándose al suelo debido a que el dolor que sentía en su cuerpo era infernal.

El mayor voltea para tomar el botiquín y regresa ayudándole a levantarse para recostarlo sobre la cama con delicadeza. Sus manos abren la botella de alcohol y la aplica en las bolitas de algodón, deslizándolas por las heridas de su rostro hasta llegar a la que parecía ser la más profunda, que estaba en su pómulo derecho, fue mas sencillo que la vez anterior debido a que Hyunjin sentía dolor en todo su cuerpo, le de igual el ardor en su rostro provocado por el alcohol.

-Changbin...- Era la primera vez que escuchaba su nombre desde sus labios y asiente, esperando a que continuar hablando.- ¿Por qué no querías que me siguiera golpeando?

–Porque te iba a matar.

–Pero ¿Por qué no le has dejado? Si lo tenia que hacer, lo hubiera hecho y ya. – Hyunjin hablaba con los ojos cristalinos e hinchados, sus manos estaban temblorosas posicionadas al costado de s torso.

–Porque......

"Piensa en algo rápido, rápido"

– Porque uhm yo, no lo se. No quiero mas preguntas ¿Vale? – Sus manos tomaron con delicadeza la camiseta del menor y la quitaron con suavidad, relamió su labio inferior al ver su maltratado torso, deseaba ser el quien dejara esas marcas en cada centímetro de esa piel blanquecina. Pero él no se merecía esto.

– Eres buena persona

El semblante del mayor cambia radicalmente, dejando a un chico confundido delate de él. Por su puesto que no era buena persona, ojalá tuviera una idea de la cantidad de personas que murieron en sus manos, ojalá supiera que el mismo mato a su padre, ojalá supiera la cantidad de pensamientos insanos y enfermos que a tenido con respecto a él, las veces que ha querido lastimarlo para satisfacerse y las veces que lo imaginaba llorando de dolor debajo de él.

– ¿He dicho algo malo? Mierda, lo siento yo no, sabia que eso te podía molestar, pero para mí lo eres. Eres buena persona, mira como me tratas, Changbin. ¿Por qué lo haces?

– No soy una buena persona. Jamás lo podre ser, Hwang. – El mencionado se acerca lentamente a su cuerpo y apoya suavemente una mano sobre su hombro, dejando suaves caricias. – ¿Qué...?

– Déjame saber por qué no, déjame saber todo de ti, por favor. Quédate conmigo esta noche y cuéntame quien eres. – Changbin estaba estático, nunca había estado en una situación similar y por lo tanto no tenia idea de como reaccionar. – Me atraes, Me gustas....

"No... no , no , no"

–Haces mal Hyunjin. Haces mal en gustar de mí, yo soy una maldita pesadilla y esto, no te conviene. – No tenia idea sobre que mas decir, por primera vez en su vida, se sentía increíblemente vulnerable ante tal situación.

– Cuéntame que es lo que esconden tus ojos...Dime que pasa por tu cabeza y la razón por la que no me has matado aún.

– Me tengo que ir.

Rehén [Changjin]Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt