59. Reloj

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El pelinegro secaba con una toalla los claros cabellos del contrario. Pasaba la tela desde su cabello hasta su espalda, acercándose a ella para dejar tiernos besos en su extensión.

El peligris estaba viendo detalladamente el mapa que su novio había hecho para tratar de memorizarlo, quería mantener este lugar como un secreto por lo que creyó que llevárselo no sería la mejor idea. Sintió un dolor en los hombros por lo que dirigió su mirada al contrario frunciendo el ceño.

- " ¿Me vas a seguir mordiendo? Y se supone que yo soy el vampiro...Dame mi blusa, se que la escondiste, lobito malo." Tomó entre sus manos el rostro del pelinegro, quién lo miraba burlesco.

- " Me faltaba una ahí.. " Minho se levantó en busca de la dicha prenda, la había dejado estirada en una de las sillas antes de bañarse. Cuando la tomó se la acercó a Han para que la tomara. El peligris no alcanzó a terminar su "gracias" porque el pelinegro se la alejó.

- " Beso." Exigió el pelinegro acercándose a su rostro.

- " A ver, el perro aquí eres tú. No me estés dando ordenes." Habló molesto el peligris porque el contrario lo había estado molestando desde que despertó. El pelinegro le sonrió de manera amenazante.

- " Beso." Repitió con su sonrisa mientras se cruzaba de brazos.

- " Pata." Extendió su mano el peligris en respuesta. El rostro de Minho cambió a uno serio, provocando un escalofrío en el peligris. Inclinó su cabeza mientras lo observaba detenidamente.
La penetrante mirada de Minho lo obligó a hablar nervioso.

- " Ya, ya, perdón. " Han se levantó también para acariciar su cabello y tranquilizarlo. El pelinegro seguía viéndolo serio pero luego de sentir sus caricias se aferró a él para abrazarlo.

- " Buen chico." Rió el peligris para darle palmaditas en su espalda pero sintió el fuerte agarre del contrario quién lo levantó para ir a tirarlo a la cama.

- " ¡No, no, espera, ESPERA, LO RETIRO, LO RETIRO!" Minho se había dejado caer encima de él mientras mordía su cuello a pesar de los manotazos en su espalda. Puso sus manos en su trasero y lo apretó sin piedad, el peligris se removía mientras se quejaba.

- " Deja de moverte. Quédate quieto." El pelinegro lo besó con mayor fervor pero luego de unos minutos el peligris corrió el rostro para cortar el beso, negó y puso una de sus manos en la boca de Minho, para pararlo.

- " Mhg.. no, no, ya fue mucho por hoy, deja mi trasero tranquilo." Han puso sus manos en las de Minho para aflojar su agarre pero el pelinegro se negaba.

- " No quiero, es tan suave y esponjoso, como tus mejillas." El pelinegro masajeaba sus glúteos, los amaba, eran su nueva cosa favorita y lo mejor de todo es que era suyo.

- " Minho." Llamó serio el peligris.

- " Ugh, lo que sea. ¿De qué estábamos hablando antes? ¿De los chicos?" El pelinegro se recostó al lado del contrario mientras tomaba su mano y comenzaba a jugar con ella.

- " Oh , de Jeongin." Recordó el peligris.

- " Él, se veía feliz de tener a alguien más con quien hablar... que no seamos nosotros.
Tenías razón, si se iban a llegar bien."

- " Obviamente, yo siempre tengo razón." Dijo orgulloso el vampiro mientras sonreía, el contrario solo negó con su cabeza poniendo su mano en su rostro para molestarlo. El peligris rió mientras tomaba su mano para detenerla.

[ At Midnight ]Where stories live. Discover now