⪤Las cortinas se cierran⪤

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Todos estaban de vuelta en el salón, todos acurrucados y desconfiados el uno del otro. Uno de nosotros... uno de nosotros... uno de nosotros... era la manta que todos parecían tener sobre sus cabezas. La sospecha se espesaba en la atmósfera. La animosidad crecía entre cada galleta. Nadie habló. El silencio era ensordecedor...

¿Cómo terminará este fiasco? pensó Almond. ¿Hasta que todos estén muertos? ¿O hasta que me atrapen? Y si es así, ¿qué pasaría con Walnut? ¿Quién la cuidará? Y también, ¿por qué estoy haciendo lo que dijo este tipo? ¿Qué hubiera pasado si no hubiera cumplido? ¿Fue un chantaje en esa carta... No me acuerdo...

Todo lo que Almond podía recordar era poner una trampa en la que no implicaba el habitual trabajo gruñón de asesinato, ¿algo con las ventanas? ¿Las estatuas? No se acuerda, hasta que...

"¿Podrías cerrar las cortinas?", preguntó Latte a Sparkling. 'Es realmente brillante aquí ...' Sparkling hizo lo que le dijeron. Cerró las cortinas y notó que algo brillante caía al suelo. Se inclinó y... un cuchillo apareció de la nada, golpeando directamente en su espalda. Incapaz de mantenerse consciente, se fue a la deriva en un profundo sueño, para nunca volver a despertarse, mientras la mermelada de fresa rezumaba de los orificios donde el cuchillo había penetrado la tela ...

Todos estaban horrorizados. ¿De dónde vino el cuchillo? Nadie estaba cerca de él, y aun así, ¿cómo podría un cuchillo salir de la nada con solo cerrar las cortinas? Todos estaban conmocionados y confundidos. El silencio estaba en el aire, momentáneamente roto por el péndulo del reloj del abuelo y los gemidos y gritos de Herb. Estaba conociendo a Sparkling, pensando que habría una posibilidad de algo nuevo ... y ahora Sparkling yacía muerto en el suelo.

Había una hoja de afeitar unida al extremo de una cortina. Y una cuerda unida a un extremo del soporte de la cortina sostenía un cuchillo y una moneda, ocultos por otra cortina. Las luces del exterior probablemente lo habrían delatado, pero las luces del salón eclipsaron ... la sombra. Almond calculó en su mente que si alguien hubiera cerrado las cortinas, la cuerda se rompería, soltando la moneda primero, lo que llevaría a la víctima a inclinarse y tratar de recogerla, luego el cuchillo, que ...

El silencio en el salón era aterrador ... tres asesinatos hasta la fecha... y el asesino no ha sido atrapado ... no se puede confiar en nadie...







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⊱~Murder Me Sweetly~⊰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora