9. Nuevo día de clases

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Episodio dedicado a: Kenji_ikenaga

DAMMY P.O.V.

¡¡¡PIIIIIIIIIIII!!!

La Aero-Vía va a toda velocidad y pita con fuerza. Mi cabeza se golpea contra la ventanilla y al fin despierto del todo. Me había vuelto a quedar dormida. Además, no ayuda en nada el hecho de que anoche casi no pude dormir por culpa de que la vecina Lorraine sí que se había pegado su amanecida, con esas canciones a máximo volumen. Era evidente que no había dormido bien.

«Parada #15. San Francisco Central Institute»

Pero esa voz hace que caiga en cuenta que ya llegué a mi destino. Como impulsada por un resorte salto de mi asiento y aprieto el botón para ya bajarme. El tren-lador se detiene, abre las compuertas cerca mío, a lo que yo me bajo por las escaleras flotantes y me dispongo a entrar a mi Instituto. Y viene la típica rutina, los sensores me escanean, me rocían alcohol, me toman la temperatura, etc, etc. Yo solo bostezo.

Ya entrando a la recepción del Instituto me saco la mascarilla y veo a lo lejos a un flaco rubio, al que distingo como mi Tomatito Gruñón: Jack. Este, al verme, me sonría, pero rápidamente su expresión cambia a una de preocupación.

--¡¡Dammy!! --grita Jack, corriendo hacia mí.

--Hey --saludo con simpleza antes que Jack me agarre de las mejillas.

--¡Dios! ¿Estás bien? --vocifera Jack mientras me sigue apretujando las mejillas.

--Eh, ¿sí? --contesto un poco confundida.

--¡Por supuesto que no! ¡¡Mírate!! ¡Tienes moretones en ambos ojos! -exclamó Jack.

--¿Qué? --vacilé.

-Tienes morados ambos ojos -explicó Jack-. ¿Qué te sucedió? -preguntó

-Ah... -Ahí entendí a qué se refería Jack-. No son moretones, son mis ojeras -admití con pesadez.

-Oh... -Fue lo único que dijo Jack luego de haberse quedado un minuto entero procesándolo.

--Ahora... ejem... ¿m-me puedes soltar? --le pedí con un extraño nerviosismo.

--Ah! --soltó de repente Jack, alejándose de mí con las mejillas encendidas--. P-perdón, e-es que creía que eran moretones, y que el ladrón te había golpeado o algo así --dijo mientras se rasca la nuca.

--¿Tan demacrada me veo? --le pregunté con diversión.

--Ummm... --me miró de nuevo--. Bueno... --desvió la mirada y luego la volvió a mi--. Jeje --rió nerviosamente.

--Genial. Deberé usar maquillaje --dije con pesadez.

--¡N-no! ¡No es que te veas mal! S-solo... se te nota... un poquito --trató de arreglarlo Jack. Un intento inútil si me lo preguntan, su cara lo decía todo.

--Sí, sí, ya te creo --dije con sarcasmo--. En fin, mejor sigamos.

Llegamos al Salón de Robótica, ya que hoy nos toca esa clase a primera hora, esperando que el profe Manuel si pueda estar esta vez. Al llegar Jack y yo no nos sentamos en la misma mesa (que queda adelante), y poco a poco ya empezaron a llegar los demás estudiantes.

--¿Por qué me tienes en WhatsApp como "Tomatito Gruñón"? --preguntó Jack.

--Porque eres un gruñón que siempre se anda poniendo rojo como un tomate sin razón --dije con diversión, a lo Jack se volvió a transformar en un tomate.

La vida de una superheroínaWhere stories live. Discover now