Miradas

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Eran vacaciones, muchos viajando en playas y acampando en bosques... Pero otros tenían algunas responsabilidades.

Pasaba por quinta vez el paño sobre la mesa, con pereza; ni siquiera estaba sucia, desde la segunda pasada ya estaba limpia. pero que más hacer si no había ningún cliente en el local y le pagaban por su tiempo en el lugar.

-¡Aaagh! ¡Demonios, aún faltan 4 malditas horas!

Se tomó de sus rubios cabellos jalandolos hacia abajo con desesperación, no importa si se lastima; el mismo entro en crisis. Si seguía así lo despedirían. tenía que despertar y encontrar algo que hacer en ese viejo lugar.

-¡hey Tontitsu, deja de lloriquear! ¡Te golpearme yo mismo si continúas!

Inosuke estaba tras la barra con la fregona en manos y la paseaba de un lado a otro, era su forma de "limpieza".

-¡Matame de una buena vez! Así acabaré con este sufrimiento... ¡Dios, tu mejor guerrero va en camino!

El rubio se dejó caer sobre la mesa casi recostandose sobre esta, dejó caer su cabeza con fuerza sobre la mesa de madera fina.
Inosuke rueda los ojos y suelta un suspiro ondo, y recarga la fregona sobre la pared.

-¡Tus quejas me están cansando rubia teñida!
- ¿si bueno, y que?
- ¡uuhg! Me das asco.
- Dime algo que no me han dicho...

Zenitsu levanto la mirada mientras se reincorporaba de la mesa y comenzaba sacudiendo la silla.

-"blablabla", iré a buscar algo con que jugar, ¡puede que regreso esa rata blanca! ¡Vamos Monitsu!
- ¡¿E-eeh?, ¿Estás loco? Claro que no!
-¡Tsk! Bien... ¡Si tienes algo mejor! ¡Iré a luchar con ella!

Inosuke sonrió animado mientras entraba a la bodega de la cafetería dejando a Zenitsu solo.

- uuh... Y ahora solo... Genial, ¿ahora que?...

Se arrepintió, ahora no tenía con quién hablar y pasar el tiempo.

Por cosas de la vida, Zenitsu agradecido que sonó la campanilla de la puerta indicando que entraron nuevos clientes. Volteo a la puerta mostrando su "mejor" sonrisa a las personas que le salvaron del tiempo muerto.

-¡Bienvenidos a la Cafetería "Rayo de luz"! En qué puedo ayud...

No termino en cuanto su mirada captó ese angelical rostro, tan puro y hermoso. Se sonrojo levemente y comenzó a tartamudear.
Una linda pelinegra con mechas naranja y ojos cuál Berilo rojizo estaba frente a el.

-A-aayu... Uda... Aiiuda!..

La chica lo miraba fijamente sin decir alguna palabra, después de un rato le regala una suave y tierna sonrisa a Zenitsu.

-A-ayu.. ayuda...

Zenitsu finalmente termina esa simple palabra, aunque ya no sabe si realmente era el quien ahora buscaba esa ayuda, su corazón se aceleró al ver esa bella chica frente a el. Es la primera chica que lo recibe de esa forma, una simple sonrisa hizo que su corazón brincara de alegría.

-Dios al fin me mira...

Susurró para el mismo y se acerca a la chica decidió a tener algún tipo de conversación con ella.

-¿En que puedo servirte hermosa?

Zenitsu toma su pequeña libreta del bolsillo junto a un bolígrafo listo para apuntar y levanta una ceja, y muestra su sonrisa ladina era su mirada "coqueta".
Eso jamás funcionaba con ninguna chica, pero jamás se rendiría a sus "encantos naturales y actos de seducción", la emoción de al fin una chica le dirige la mirada lo ponía estúpido más de lo normal.
La chica de ojos cómo el Berilo Rojo borro su sonrisa; parpadeo un par de veces, estaba viendo a Zenitsu detalladamente, no movió ni un músculo de su ser.

No Hablamos, Quiero Escuchar Tu Corazón. [ZeniNezu]Where stories live. Discover now