Ceo in love [Taekook] (PAUSADA)

02

Jungkook tenía razón cuando pensó en que Namjoon haría varias pruebas. Lo que aún no entendía era porque dejó que ese chico también las hiciera.

Se estaba concentrando más en eso que en hacer las cosas de forma correcta, así que se desanimó al pensar que no lo conseguiría.

Y al final, ambos terminaron bastante cansados.

Entonces Namjoon se acercó a ellos.

—Los veré a los dos aquí mañana, siempre tienen que llegar a tiempo. Si van a faltar deben avisarme al menos con un día de anticipación.

—¿Eso quiere decir...que ambos estamos dentro?

—Sí. ¿Por qué? ¿Pasa algo?

—Pensé que...estábamos compitiendo por el puesto—Ahora que lo decía en voz alta sonaba un poco tonto.

—Nunca haría algo como eso—No pudo evitar reír al recordar el rostro que había puesto Jungkook cuando este vio que Hoseok estaba a su lado cuando llegó—Los dos tienen mucho talento y disciplina, además podrán apoyarse o hacerse compañía en caso de que no pueda dar una clase y tenga que encargarsela a ustedes.

El pelinegro quería meter su cabeza en un agujero, se había puesto a sobrepensar mucho antes de que las cosas pasarán.

Tan sólo esperaba que Hoseok no se sintiera incómodo, o en el peor de los casos que le cayera mal por eso.

[...]

Al acabar, Jungkook salió del lugar para regresar a su departamento, sintiendo que alguien lo había tomado del brazo.

—¡Espera!—Hoseok se había apresurado tanto que incluso todavía tenía los tenis desabrochados.

—Oye, ten cuidado, si sales corriendo así podrías lastimarte—Al menos debía ser amable después de mirarlo mal durante casi todo el proceso de la prueba, con ello, se agachó levemente para ayudarlo a abrocharlas

—No te preocupes, justo iba a hacerlo—Intentó que parara pero ya casi estaba terminando—¿Te parece si un día vienes a mi casa o salimos?

—¿En serio?—Extrañamente durante su infancia tuvo muchos amigos, y cuando creció, en los próximos grados o escuelas no logró tener ninguna relación cercana con un amigo—Me parece bien.

—Entonces te pasare mi número—Tomó su mano nuevamente mientras sacaba un plumon ya que fue lo unico que encontró, para así poner su número y dirección—¡Jungkook!

—¿Qué pasa?—Se exaltó un poco tras ver que el contrario intentó borrar lo que había escrito.

—¡Lo siento! Es que no encontré otra cosa y me acabo de dar cuenta que este plumón es difícil de quitar, bueno, no se quedara para siempre pero tardara unos días en desaparecer por completo...

—No te preocupes, no fue tu intención. Nos vemos mañana—No le gustaba la idea de tener su mano remarcada de plumon, aunque en sí no era culpa de Hoseok.

Ni siquiera se preocupó por eso, porque estaba feliz de haber conseguido un empleo y a un nuevo amigo.

De camino al trabajo, Namjoon envío mediante un grupo de WhatsApp en donde sólo estaban incluidos Jungkook y Hoseok, que llegarían algunos niños nuevos que se habían inscrito la semana pasada, y que esas primeras impresiones eran muy importantes. También tenían que tener en cuenta que las condiciones de todos podrían ser diferentes.

De tan sólo pensarlo, Jungkook pateó una piedra tras leer el mensaje, la paciencia con los niños no era su fuerte.

Sobre todo si eran de esos que corren de un lado al otro y no hacen caso.

Sin duda debió haberle dicho a Namjoon desde el principio que prefería ayudarle con las clases superiores.

[...]

—¡Papá! No quiero llegar tarde, por favor, hay que darnos prisa.

SeokJin aceleró un poco más, esperando a que la policía vial no lo viera.

Y no culpaba a su hijo, ya que él le estuvo recordando varias veces al día que sus clases de Takwondo iniciaban a las 5:00 p.m.

Aunque el trabajo lo tenía muy ocupado prefería llevarlo por sí mismo a donde él necesitara.

—¡Es ahí!—El pequeño niño se levantó del asiento, tomando el rostro de su padre para dirigirlo hacia donde había un lugar donde podía estacionarse.

—Soobin, siéntate por favor o vas a lastimarte—Al menos se sentía más tranquilo tras ver que muchos niños a penas estaban entrando al local.

Ambos bajaron del auto, caminando de forma apresurada a la entrada donde Jungkook estaba recibiendo a todos con una sonrisa.

—¡Bienvenidos!—Luego de hacer una reverencia se hizo a un lado de la puerta para que Soobin pasara—Puede pasar por su hijo a las 6:30. No dejaremos que salga a ninguna parte hasta que usted venga por él.

—Muchas gracias—Luego de hablar con aquel chico amable, se agachó levemente, dándole un beso en la frente al más bajo—Pórtate bien, ¿Sí? Y...

Este asintió, realmente parecía tan desesperado por entrar que no espero a que Jin terminara de hablar.