Cada vez que te veo [ErrorDream]

Capítulo 12

Sonidos de vómitos hacian eco en la esfera de garabatos.

No tenía otro lugar al cual acudir, quería estar solo en ese instante de su vida. Su bufanda se manchó un poco por la tinta que estaba derramando de su boca, pero lo que le dejó más desconcertado fue... que no hacía ninguna expresión de dolor.

Apenas vio su reflejo en el charco de tinta negra que el mismo empezó, supo que sus viales se habían acabado, usualmente el hubiese rellenado de inmediato los viales. Sin embargo, solo quería quedarse ahí, en su miseria y recostado en el pasto, de inmediato vinieron los recuerdos a el.

- ¿Que haz hecho Error? - Por impulso solo tocaba el charco en donde se reflejaba, no quería ver su cara. Esa cara sin color, sin emociones, sin expresiónes, sus pupilas no eran las de siempre. Solo habían orbes blancos y ojeras de por medio que ni el mismo se dió cuenta que tenía, como si estuviese muerto por dentro, ser el guardián de todos los universos no es cosa fácil.

Bueno, tecnicamente estaba muerto y sin alma pero quería olvidar todo eso, lo unico que quiere es no pensar en nada ahora. Estaba confundido y sin nadie, estaba solo como siempre.
Dió un suspiro y abrió un portal con su gran pincel hacia UnderSwap, quería respuestas a lo qie le estaba pasando en ese momento.

Pasó por el portal encontrandose del otro lado una habitación acogedora, las mismas paletas de colores azul y variantes de este, dió un vistazo a los alrededores y notó un cierto objeto que no estaba ahí antes. Se acercó a la pequeña cómoda de madera y observó aquel hueso con sangre que estaba a dimple vista, resaltaba entre todas las cosas que se encontraban ahí, Blue no era capaz de invocar huesos afilados además de que era la misma sangre del pequeño que encontraba ahí.

Se alarmó un poco después de oír el sonido del chillido de la puerta, quien la abrió no era alguien inesperado, era Blue quien solo se encontraba mirandolo fijamente, al parecer se dió cuenta de que le faltan sus viales por lo que su expresión cambió a una de completo desagrado y rápidamente caminó hacia el, arrebatandole de sus manos aquel hueso.

- Por tu expresión y las muecas que haces ya debo tener una idea de quién fué el responsable de eso.

Dió una sonrisa seca mientras apuntaba aquel hueso blanco afilado con carmesí adornandolo, incluso en ese ambiente tan pesado su cara seguía sin expresióna excepción de su sonrisa.

- ¿Y qué con eso? Se muy bien lo que hago Ink. Fuera de aquí y déjame en paz.

Invocó un hueso celeste y apuntó hacia el pecho del contrario, haciendo que este solo se acercase al hueso causando pánico en el de pañoleta azul.

- Me parece totalmente absurdo que me amenaces y aún así no tengas el corage de herir a la gente, mucho menos a mi que sabes que no me importa herirte a ti o a cualquiera. Solo mira tu patética cara.

- ¡Estás loco Ink!

Exclamó y lanzó el hueso antes de que el pintor se lastimara, dió un suspiro pesado y se sentó en su cama.

- Dime que es lo que quieres y lárgate.

- Sigo sin entender como es que me tratas así... "amigo".

- Tu mismo lo dijiste, no te importa herir a la gente, ni siquiera a Dream.

Debido a la rabia momentánea que sentía el pequeño, agarró la bufanda del guardián sin aviso haciendo que este se tornara serio otra vez.

- Vaya... así que lo sabes. Es una pena.

- Bastardo... tu sabías que Dream le gustaba Cross, sabías que estaba sufriendo, sabías que si tu no te entrometías en su camino ellos dos pudieron estar juntos, sabías de las dudas que tenía Cross y tu te encargaste de manipularlas todas. Tu lo sabías todo y aún así seguiste con tu maldito teatro barato.