.Sheriff.

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Oficina del sheriff. 6:20 am.

El sheriff no pudo evitar observar a su hijo con una extraña y enorme sonrisa. Demonios este era exactamente igual a Claudia...como la extrañaba.

— Hijo, Sabes que Derek es un adulto y...bueno...ligeramente mayor que tú, No? -le recordó y este suspiró con suavidad.

Entre sus manos estaba una larga lista de síntomas y recomendaciones sobre el lobo que Stiles había hecho y entregado un poco antes de la entrada de este, intentando evitar topárselo durante el proceso.

Stiles y sus listas...

— Lo se papá, solo no quiero que Derek este en problemas, o si algo le sucede tengas una idea de cómo ayudarle. Te recomendaría no ponerlo a patrullar un par de días -sugirió, recibiendo una extraña mueca de este.
— Hijo, sabes que es una estación de policía, aunque lo intente no puedo garantizar que estará todo el día detrás del escritorio, todo puede cambiar de último momento, además se que lo que sea que esta pasando creo que él sabrá controlarse, o por lo menos lo intentará -tomo su hombro con suavidad y le apretó.
— Lo se...es muy bueno en ello...el problema es mas cuando estoy cerca...solo...solo que estoy preocupado -confesó, bajando ligeramente su mirada.
— Lo entiendo el solo hecho de que es un oficial es bastante, tu madre lo hacía todo el tiempo conmigo, incluso una vez vino a hablar con mis superiores, exigiendo que el día de mi cumpleaños debía pasarlo en la oficina y no patrullado callejones...es tu novio después de todo, tienes todo el derecho a preocuparte por él -le sonrió con suavidad, aún manteniendo el agarre sobre su hombro.
— Pero...tú...yo...no hemos hablado de ello...-le observo confundido.
— Lo se y debo admitir que me dolió un poco que ninguno me lo contara...y pues prácticamente lo descubrí por accidente, un día estábamos patrullando y su billetera cayó a mi lado, esta se abrió y sorpresa, una foto de mi único hijo salió de esta, el chico por poco nos estrella con un árbol -recordó, dejando escapar una pequeña carcajada.
— Por Dios...-cubrió su rostro por un segundo, ligeramente avergonzado, para después observarle- — Lo lamento, no llevamos mucho tiempo juntos, bueno, al menos de esta forma...ni siquiera creo que somos novios, es algo más fuerte y primitivo, cosas de lobos, ya sabes y la verdad no sabía cómo explicarlo, la manada apenas se enteró el otro día y solo por los celos lobunos de tu mejor oficial -intentó explicarse.
— Entiendo hijo, no te preocupes, ambos son adultos, son sus asuntos, además, se que ese hombre realmente te ama y estoy seguro de que eso no es algo nuevo exactamente -le sonrió se nuevo, llevando su mano a hacia su nuca- — Tú le amas? -preguntó con suavidad.
— Claro que si papá, le amo con mi vida -respondió con firmeza.
— Eso es lo que importa -susurró, para después apartarse y sentarse sobre su escritorio- — Lo tendré bajo vigilancia, en caso de que tenga que mandarlo a patrullar le asignaré junto a Parrish o Nathaniel, ambos tienen mi plena confianza -le aseguro, intentando tranquilizarle.
— Gracias papá, eres el mejor -agradeció con una enorme sonrisa.

Y entonces el gran Rey de Roma llego.

— Buenos días Hale...o debería decir Stilinski? -saludó el sheriff.

Stiles por poco tiene un ataque de asma.

Él definitivamente no sufre de asma.

— Suegro -saludó de regreso, en un tono demasiado cordial y tranquilo.

Suegro?.
Definitivamente estaba soñando.
En que universo paralelo se encontraba?.

— Stiles -saludó al menor esta vez, tomando su rostro con suavidad, para dejar un pequeño beso sobre sus labios.

Bien. Todo el mundo actuaba muy raro últimamente.

— Disculpen -una voz extra les interrumpió- —Oh hey Stiles! -saludó el hombre.
— He...hey Nathaniel -le saludó incómodamente, esperando una mala reacción del lobo.

El tipo parecía sacado de unos de esos calendarios de bomberos calientes, definitivamente Derek no estaría feliz.

— Mío -respondió el lobo de inmediato, cambiando su humor por completo.
— Uh tranquilo Hale, no planeaba tomarle...no me van mucho los tipos y ademas...-mostró su mano ligeramente, enseñando un anillo de compromiso- — Y uh...apestas la oficina amigo -le sonrió nerviosamente.

Bien, Stiles no estaba seguro si era bueno o malo el hecho de que Nathaniel era básicamente un hombre coyote, pues definitivamente sabía lo que pasaba pero al mismo tiempo podía representar una amenaza para un lobo en celo como Derek.

Y al parecer las cosas iban más por el segundo camino.

— Mío -repitió, mostrando los dientes y parte de sus garras, ignorando por completo todo lo que había dicho.
— Nathaniel, Podrías retirarte? Estaré contigo en un minuto -interrumpió Noah, antes de que las cosas escalaran.
— Si señor -respondió de inmediato, dejando a los tres hombres a solas.
— Derek, hijo... -le llamó el mayor, parándose frente a este, medio sacándole de su transe- — Recuerdas de lo que hablamos cuando recién comenzaste? Necesitas controlarte, eso, lo que sea que fue no está bien, si eso pasa allá afuera podrías terminar arriesgando tu vida o la de alguien más, se que son tus instintos pero recuerda son cosas primitivas de hombres que vivían alejados de la sociedad, es la actualidad, eres un maldito oficial hijo, las emociones no son un juego en el trabajo -le recordó, ligeramente angustiado, apretando su hombro como lo hizo con su hijo.
— Lo entiendo, lo lamento sheriff, mi lobo...-intentó explicarse pero el mayor le interrumpió con una suave negación.
— Yo se que eres más fuerte que él, Recuerdas que me contaste sobre lo que tu madre solía decirte? Encuentra tu ancla y pon los pies sobre la tierra hijo -finalmente dejó un par de palmadas sobre su hombro para después retirarse.

Encontrar su ancla? Pero su ancla estaba frente a él...aunque bueno...lamentablemente era esa misma ancla lo que ocasionaba su inestabilidad.

— Ya oíste al jefe -bromeó Stiles, intentando aligerar el ambiente- — Si te portas bien te daré una sorpresa esta noche, pero primero tienes que reparar el lío que causaste -le ánimo.
— Bien -suspiró- — Puedo repararlo -murmuró con suavidad.
— Muy bien niño bonito -finalmente se inclinó y le abrazo cariñosamente.

Y definitivamente Derek no pudo evitar sentir un extraño cosquilleo en su vientre.

Hola qué tal! He batallado demasiado para publicar este capítulo, prácticamente tenía cuatro historias completamente diferentes e incluso publiqué uno de ellos, pero al final no me convenció y lo terminé eliminando un par de minutos después...yup, el multiverse fue real lol, en fin espero que les agrade haha.

Los invito a comentar! Amo leer lo que piensan!.

Can you fix it? -SterekWhere stories live. Discover now