59 ! La respuesta. ( 8 años )

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No sé cuando te llegara este papel barato pero vale la pena intentar responder tus escrituras através de esto, siempre tuve la fantasía de hacerlo.

En el momento en el que pasó todo esto no podía verlo por la ceguez, tenía 20 cuando pase por un trauma que ni siquiera podría predecir.

Quizás debía ser más empático con la situación pero ya traía mierda conmigo desde antes, el hecho de saber que mi mejor amigo me traicionó de la peor forma me molestó tanto que solo pude esconder mis ganas de estallar.

No me trato de justificar, después del incidente no dejo de culparme a mi mismo por lo que quackity pasó. Ahora puedo ver que estaba más que enfermo al respecto.

Actualmente estoy bien, gracias por preguntar, lana está más que feliz por la noticia de tu próximo hijo, cómo lo llamarías? Se me ocurren algunos nombres.

Entonces te hablare de lo que más preguntas dejó a todos allá, quizás se preguntan porqué me estoy casando con lana. De hecho, ni siquiera yo lo sé.

Hace años que no hubiera dejado que esto pasará pero ya tengo 27 años y no tengo un plan de vida fijo, creo que lo más sensato era aceptar el matrimonio para tener un perfil más presentable, tampoco es que no me guste lana, ella es tan cálida que deseo quedarme con ella hasta fallecer.

Esa frase es caótica, creo que necesitaré una cita con mi terapeuta después de esto, después de escribir esta carta. Pero no podía decir que amo a lana del todo porque sería algo mentiroso.

Sé que hace años tenía la oportunidad de no mudarme con ella, no besarla, no acostarme con ella y no proponerle matrimonio, soy un imbécil de mierda por hacerlo, pero estaba devastado.

Creo que sigo tratando de buscarme alguna excusa para ser mejor persona, a todo esto, ¿por qué no me puedo comunicar con quackity? Sé que él se irá del país en unos días y lo último que quería era que nos viera en aquella situación, lo destrocé aún más.

Estoy profundamente enamorado de él y quiero formar una familia con él, pero mi vida no depende de lo que quiero, depende de lo que debo hacer y estar con él no era y nunca será el camino correcto.

Además es un triste romance de un par de psicóticos, nunca en la vida ese guión será romántico en un libro escrito por alguien. Creo que ví en los anuncios publicitarios sobre el casino que abrió con sus colegas, quisiera ir a verlo pero está lejos de aquí, España.

...mientras escribo esto, me hace dudar sobre mi decisión, aun teniendo 27 sigo pensando como un niñato de 17. Crees que debería cambiar de opinión?

No importa, te enviaré la invitación del casamiento pronto, espero que seas mi padrino de bodas. Tengo un gato negro, lo adopté hace una semana para la casa de lana, lo adoró, necesito ideas de nombres para él, Es revoltoso y tiene los ojos más grandes de un plato.

— Cariño, ¿que escribes? — lana sujetó su hombro con dulzura, luzu recibió un besito en su frente que lo hizo encogerse de hombros.

— Nada, terminó de responderle a este tonto de acá. — la chica río de forma aguda, se alejó de la figura que sostenía el lápiz y de inmediato una pequeña lágrima salió del ojo de luzu, comenzaba a temblar mientras sentía el portazo.

Para finalizar quisiera que esto se lo entregaras a quackity, sé que él está muy furioso y tiene toda la razón, no lo he visto en meses y lo entiendo...solo quiero decirle lo último que podría decirle.

Lo amo demasiado, y odio hacerlo, odio su cabello negro suave, tal vez odio sus ojos grandes de color, sus dientes amarillentos o lo linda que es su risa al hablar, odio todo de él, odio lo mucho que me tiene pensando en él, odio lo mucho que es sentirse mal sin él.

Espero que en otra vida, nos hayamos conocidos en otras circunstancias. Quizás en esa vida, en ese universo nos hayamos besado más de lo que quiero hacer ahora, ojalá nunca haya sido así de horrible con nadie.

Deseo ir a su casino a verlo como jefe de la empresa, era algo que deseaba observar de cerca, ni siquiera necesito amarlo o que me ame, solo quiero verlo ser feliz incluso si no es conmigo.

— Ugh. — limpió sus lágrimas parando de escribir un segundo, escuchó la llamada de su gato ante la puerta de madera, así que procedió a levantar uno de sus pies.

Te amo quackity Wembley, espero seas feliz con la persona indicada, por mucho que intente ser yo.

— Listo, Vamos. — el chiquillo salió de la habitación sujetando una bolsa de comida con el estampado de una figura de gato.

(...) Presente.

— Uhm. — luzu se había despertado agarrando una almohada como si su vida dependiera de ello, su cabeza posaba de forma vertical, estaba mareado mientras se levantaba de la posición.

— Buenos días. — quackity estaba en la puerta sujetando una pila de ropa sobre sus brazos, su pelo estaba amarrado a una pequeña trenza que apenas se veía por lo corto.

— Tan temprano...? — sonrió viendo como las mejillas de quackity se enrojecían.

— No pude dormir bien. — entró con precaución a la habitación que estaba más presentable que la suya, paso las prendas en aquella cómoda.

— ¿Estas bien? ¿Necesitas mimos? — el pelinegro no podía negarse, fue atraído por el mayor enredando sus brazos entre su cuerpo, su cabeza estaba apoyada en su pecho que temblaba cada vez que respiraba con alivio.

— Soñe algo raro hoy. — susurró quackity cerrando los ojos por las caricias de luzu entre sus mechones negrizos, el contrario sonrió al verlo.

— ¿Qué cosa? —

— Te hacía una especie de carta pero no recuerdo qué decía. — bostezó dejando caer su nulo peso a los brazos de luzu, quien se había desconcertado por aquel relevante dato.

— Yo también soñé que hacía una carta. — antes de decir algo más Quackity estaba dormido en su pecho, escondido entre su cuello, con cuidado posó un besito cálido en su frente al llevarlo a su habitación llena de basura.

"Me costará tiempo ordenarla." suspiró dejando al chico recostado en aquel colchón blando.

Todo lo que hago es por amor (Borrador) Where stories live. Discover now