Razones por las que no debes gustarme

Capítulo 4

Sooyoung estaba recostada en su cama, hablando con Hyeju, queriendo que la menor fuera con ella a aquella fiesta de Jinyoung. Más la menor solo negaba sin dar razón.

- Vamos, estarán las chicas y ya conoces a Haseul— habla animada Sooyoung, Hyeju negó por teléfono una décima vez.

- No es lo mío, y llamé a Chaewon, así que saldré con ella— termina confesando.

- ¿Por qué no me dijiste eso la primera vez que te pregunté en vez de que estuviera rogandote ir por teléfono mil veces?— pregunta casi indignada.

- ¿Y perderme la oportunidad de que alguien mayor que yo me ruegue a hacer algo? Es divertido, deberías intentarlo— Sooyoung se quejó, mientras Hyeju se despedía con una risa. La mayor solo suspiró.

Sooyoung le escribió a las chicas, pues irían las tres juntas a la pequeña fiesta de Jinyoung. Esperó un rato afuera de su casa, pues ya había cerrado todo, y su hermana llegaría a casa recién mañana. Cuando vio a Haseul con Jinsoul sonrió acercándose a ellas.

- ¿Todo listo?— pregunta Haseul a la mayor, quien afirma y empiezan a irse hasta la casa de Jinyoung.

Al llegar vieron que ya habían varias personas, algunas afuera, y otras dentro. Entraron buscando a sus demás compañeros, quienes estaban en el sofá hablando. Se sentaron mientras se unían a la conversación y le ofrecían algunos tragos, y fue así durante ese rato.

Sooyoung dio una carcajada al ver como Jinsoul comía uno de los maníes que estaban en la mesa, pues esta lo tiraba esperando a que alguno llegue a su boca, pero su puntería fallaba de forma tonta. Ya habían estado sentadas varias horas, y se dieron cuenta de cómo toda la casa estaba algo llena, se sentía las conversaciones de los demás y la música de fondo algo baja. Sooyoung sonrió al ver que Haseul comenzaba ayudar a su amiga a tirar los maníes.

Se levanta, pues ya había estado sentada bastante rato y comienza a ver a los demás, quienes la saludaban y ella devolvía el saludo de forma amable. Alguien la detiene y se da vuelta extrañada pero sonríe al ver a Jinyoung saludándole.

- Pensé que no vendrías— exclama. Sooyoung sonríe y niega. Conoce a Jinyoung desde bastante años, así que sentía que eran como buenos amigos.

- Las chicas me obligaron...— se excusa de forma torpe. Jinyoung ríe, lo estaba suponiendo.

- ¿Ni siquiera para verme? Que mala eres— los dos ríen y el mayor le ofrece un trago.

- No gracias... Quiero llegar bien a mi casa— Jinyoung hace una mueca de forma graciosa haciendo reír a Sooyoung, bajó su cabeza.

- Perdón por no llamarte o hablar contigo siquiera— se disculpa rápidamente, tomando por sorpresa a su amigo.

- Hey, todo está bien... La escuela es algo molesta, por eso hago ésto. Que se desconecten las personas unas horas de todo lo demás... Eso también te incluye— Sooyoung se queda pensando unos segundos al escucharlo, más su mirada va hacia alguien en específico. Se sorprende al ver que Jiwoo la estaba observando fijamente, pero ésta, al ver que la más alta se dio cuenta se fue rápidamente tomando uno de los vasos de la mesa y bebiendo.

- Debo irme... Pero te juro que hablaré mas— Jinyoung asiente con una sonrisa mientras se iba para el otro lado.

Sooyoung fue hasta donde estaba Jiwoo, más no la encontraba. Fue a la cocina, ya que era donde menos gente había, y se alivió al verla ahí, más estaba sentada en el suelo con un vaso a su lado, bebiendo de él. Jiwoo baja su mirada al ver a Sooyoung, avergonzada.

La mayor se acerca a ella, se arrodilla y la ve detenidamente. Jiwoo la vio, observando como la mayor ladeo su cabeza y sintió que podía gritar de lo hermosa que se veía haciéndolo.