Tirar la basura

8K 377 27
                                    

Narra Emma:

-¿Qué mierda es esto, Luca?
-No quería que te enterases así, pero yo te amo Emma, sé que estás con Leo, pero yo te amo más. Quiero verte siempre y en todos lados, me vuelves loco.
-No si lo de loco ya lo veo...-susurré.
-No te asustes Emma, sólo quiero que me correspondas, te juro que te haré muy feliz...
-¡Au!- me dió un retorcijón muy fuerte- ¿Qué le has echado a mi comida?
-Tranquila, sólo es un poco de droga, para relajarte... Siento haberte echado sin preguntarte, tenía miedo de que te fueras.
Definitivamente ese hombre estaba loco.
-Joder Luca, me das miedo, te has pasado.
-No te enfades por favor, no lo volveré a hacer- él se acercó peligrosamente a mí- dame una oportunidad Emma, somos tal para cuál... ¡¿no lo ves?! Ese viejo seguro que te quiere sólo por tu belleza, pero yo veo más que eso...
-Luca, Leo me ama y yo a él, tú no, tú estás obsesionado de un modo que no es sano.
-Eso no es cierto...-dijo gruñendo enfadado.
-Agh- el dolor me hizo caer de rodillas, cada vez veía peor, si no hacía algo me dormiría y a saber que hacía ese loco conmigo.
Luca me cargó en sus brazos y me tiró en su cama.
-Emma yo puedo hacerte más feliz que ese picha floja- pronunció mientras se ponía de rodillas encima de mi cuerpo, tenía el pene empalmado- quiero que seas sólo mía, si no es así no quiero que seas de nadie- aseguró mientras me echaba su asqueroso aliento al oído y me extrangulaba fuertemente el cuello con una mano.
-Tienes razón Luca- mascullé como pude, él aflojó mi cuello- no quería admitirlo, sin embargo... estoy enamorada de tí, pero me da miedo que Leo me dañe- no parecía creerlo así que lo agarré y besé sus asquerosos y babosos labios.
Él se quedó congelado y entonces tras un instante sonrió como un maniaco.
-Ya estás conmigo Emma, sabía que me correspondes, eres tan buena... estoy muy duro, vamos a follar.
-Luca no estoy preparada... no me encuentro bien, no quiero follar, déjame salir al baño...- mi plan era escapar desde allí.
-Vamos, seré gentil ¿o acaso me estabas mintiendo?
-No es eso, es la droga...
-Tranquila, dentro de poco te dormirás- el guarro quería violarme mientras dormía.
-No quiero tener sexo, no me obligues...
-¿Conmigo no y con ese viejo sí? Eres una cerda, das asco- dijo mientras empezaba a desnudarme y agarrarme los pechos violentamente.
Era hora de usar mi última baza.
-Te dejaré pero no me hagas daño...
Él me metió el pene de una haciéndome mucho daño y entonces, cuando él ya tenía la mente nublada pensando únicamente en embestirme, saqué el cúter que había escondido entre la ropa que me quedaba puesta y le hice un profundo corte en el cuello, por la zona de la vena yugular.
Él gritó y se apartó, yo seguí cortándole y clavando el cúter por todas las zonas que podía. Cada vez perdía más sangre, se estaba desangrado por el cuello mientras lo golpeaba y pateaba.
Finalmente entre gorgoteos murió ahogado en su propia sangre, con los ojos inyectados en esta, llenos de odio, intentando gritar y cagándose en mí.
Sólo quedaba deshacerme del cadáver, tirar la basura.

EL CELOSO DE MI SUEGRO (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora