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Capítulo 8 | Cuentas pendientes

Desperté abrazada por los cálidos brazos de Liam y enrevesada en las sábanas blancas de su cama, acto seguido me incorporé en la misma y observé en la misma habitación a Louis, Harry y Niall durmiendo a pocos metros de nosotros, todos ellos llevaban aún la ropa de anoche, mientras que Liam y yo nos encontrábamos totalmente desnudos. Me giré y observé su rostro con una sonrisa de oreja a oreja que me hacía sentir de lo más infantil; estaba jodidamente enamorada de él.

Me levanté con cuidado de no despertar a los chicos y cogí una camisa del armario de Liam, esta era lo suficientemente ancha como para cubrirme poco más abajo de los muslos. Me dirigí a la cocina en busca de algo que desayunar, estaba hambrienta y mi estómago me pedía suplicando cualquier tipo de comida sólida, aún podía sentir mi cabeza dando vueltas.

De pronto pude observar a Cameron cogiendo un refresco de la nevera, en seguida dio conmigo. Ambos nos saludamos con un simple movimiento de cabeza.

-¿Cómo te encuentras? -preguntó para mi sorpresa, yo me quedé mirándole un par de segundos pensando si responderle o no.

-Bien -añadí a secas, a continuación me dispuse a beber un vaso de agua para refrescarme la garganta, la cual en el momento sentía como si de una lija se tratase. Me hice un sándwich en cuestión de segundos y traté de comérmelo lo antes posible para poder irme.

Cameron se dedicó a asentir ante mi respuesta. Debía reconocer que me incomodaba un poco llevar tan poca ropa delante de él, ya que no podía contenerse del todo en sus intentos por examinar mis piernas minuciosamente, sin embargo la pregunta era: ¿por qué no me iba si tan incómoda estaba?

-Si podéis, no llevéis más drogas cuando salgamos -dije inesperadamente.

-Anoche no nos pillaron, así que no creo que pase nada.

-Pero si se puede evitar...

Realmente me preocupaba que pudiese suceder cualquier incidente, me quedaría muchísimo más tranquila.

No entendía por qué mi subconsciente me obligaba a tratar de no ser tan hostil con Cameron como tenía planeado, a veces al verle recordaba que en un principio había sido un buen amigo y deseaba con todas mis fuerzas que no tuviese esos sentimientos por mí para poder volver a considerarlo una amistad.

Tras un incómodo silencio decidí volver a la habitación con Liam, quien estaba comenzando a despertarse. Se mostró bastante confundido en cuanto se percató de que se encontraba desnudo íntegramente. Me senté a su lado en la cama tratando de no reírme muy alto para no despertar al resto.

-Joder, no me acuerdo de casi nada -fue lo primero que me dijo, tanto romanticismo por la mañana me abrumaba.

-Buenos días a ti también -dije antes de abrazarle y besar sus mejillas con ternura.

-Anoche nos pasamos un poco, ¿no?

-Tal vez, le he dicho a Cameron que no deberíais fumar dentro de los locales.

Liam asintió.

-Sí, deberíamos controlarnos más, me hubiese gustado acordarme de todo lo que hicimos al llegar -añadió en tono de decepción- Aunque algo que sí recuerdo es a ti borracha todo el día con Elizabeth.

Rodé los ojos algo hastiada, se notaba que tenía ganas de soltarme algún reproche por mi comportamiento.

-No te estés mortificando, estamos de vacaciones.

-Sí, pero...

Impedí que continuase hablando tumbándome encima de él y besándole intensamente, queriendo sentir sus dedos acariciar todo mi cuerpo.