— DVD rent, alquiler a domicilio. ¿En que puedo ayudarle?
— Te saludo con este día triple B
— ¿Triple B?
— Bueno, bonito y bendecido, como tú cariño~
El azabache no supo si sonreír avergonzado o corresponder aquella forma tan Mikey al saludar. Simplemente soltó una risa nerviosa, y con el sonrojo evidente en sus mejillas, comenzó a jugar con un mechón de sus rizos oscuros.
— ¿Cómo estás el día de hoy, Takemitchy?
— Estoy aquí...
— ¿Aquí...?
— Preguntándome porque me sigues llamando a este número, cuando nos vemos todos los días al finalizar mi turno. Pero, sé que la respuesta de Mikey-kun será la misma...
— Si lo sabes, ¿Por qué preguntas?
— No lo hice...
— Si lo hiciste~
— Yo no-
— Ambos sabemos que te encanta recibir mis llamadas ¿Entonces me pregunté a mí mismo, por qué no continuar?
Una mueca tímida se plasmó en la expresión de Takemichi.
Y una sonrisa divertida se formó en la expresión de Mikey al recibir como respuesta el silencio, confirmando una vez más lo que ambos sabían.
— ¿Sabes? Estaba pensando en algo
— Ay, no.
— ¿Qué? ¿Qué pasó?
— Cuidado que se te quema algún fusible en el cerebro por pensar tanto cariño~
El más bajo por su parte hizo un mohín infantil, para así después quejarse, rozando al berrinche de un niño pequeño, mientras que desde la línea contraria se escuchaba una que otra risa pequeña.
— Entonces, ¿En qué pensabas, Mikey-kun?
— Takemitchy, ¿Qué pensarías si te propusiera, más adelante, empezar a vivir juntos? Digo, quisiera saber qué opinarias sobre esa idea...
— .....
— ¿Cariño?
— .........
— ¿Todo bien? ¿Me escuchas?
— ¿Eh? S-Sí, lo siento, me tomaste por sorpresa... Probablemente pensaría que no es una mala idea. Estamos a nada de cumplir un mes desde que nos hicimos pareja, y es lo normal, normalmente si dos personas quieren estar juntos deben de buscar la manera de encontrar un lugar propio, solo para ellos dos. Sí, dos personas que se aman-
— Takemitchy
— ¿A-ah?
— Estás divagando cariño, respira
Takemichi haciendo caso a lo dicho por su pareja. Inhalo y exhalo lentamente hasta lograr encontrar un poco de armonía entre él y su mente inquieta. Y en todo momento Mikey espero, atento a cualquier señal de alerta para correr a auxiliar a su amado.
— ¿Mejor?
— Si...
— Recuerda mantener las ventanas abiertas y-
— Si quiero vivir junto a Mikey-kun
Mikey abre levemente los ojos ante la respuesta moderadamente rápida, además de sentir un leve cosquilleo en él al percibir en la voz contraria determinación. Mordió su labio inferior, procurando no gritar en ese instante por lo tierno que es su novio.
Ante la afirmativa deseada, y queriendo buscar algo más, tomó acción.
— Yo quería ser un astronauta
El azabache se tambaleó ante el cambio repentino de la conversación.
— ¿Q-Qué?
— Quería ser un astronauta ¡Ser el primer hombre en caminar en el sol!
— Pffff. Pero Mikey-kun, hace mucho calor
— No soy estúpido Takemitchy, iré cuando sea de noche
Al escuchar aquellas palabras tan desbordantes de seguridad, sin poderse contener soltó una gran carcajada, la misma que se escuchaba cada vez que la pareja se juntaba. La risa se apaciguó con el tiempo, y después de calmarse, una amplia sonrisa que se asomó en sus labios.
— Mikey-kun, eres increíble
— Lo sé, cariño
Mikey sonrió con suma satisfacción, al haber logrado su objetivo. Logró cuidar una vez más, aquellas sonrisas brillantes que lo enamoraban.
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