🐱🐭Huellitas de ratón | YM

🐱Señor bigotes🐭

Esa mañana estaba resultando demasiado cómoda y relajante para el omega que recién comenzaba a despertar.

Los últimos días que pasó Jimin no había podido dormir bien gracias a la presencia del gato; sin embargo, luego del negocio que ambos cerraron, el ratoncito se sentía con la confianza suficiente como para dormir como lo hacía cuando se encontraba solo.

Aunque eso no significaba que Jimin mostrara su forma animal frente al minino; lo catalogaría como suicidio directo si llegara a hacerlo.

Dentro de todo el pequeño caos formado en la casa, también existían un par de dudas que el castaño no se había molestado en resolver.

Primero: el gatito negro lo seguía a todos lados. Jimin tuvo que cerrar las ventanas de su habitación, colocar el seguro a la puerta y no hacer ruido para que el híbrido no tratara de ingresar a su dormitorio, aunque sí estuvo soltando maullidos lastimeros cuando se dio cuenta que el omega lo había dejado fuera de la habitación.

Segundo: no sabía cómo se llamaba, así que Jimin decidió nombrarlo como "señor bigotes" porque el gatito tenía unos bigotitos bastante tupidos que se movían de forma graciosa, aún estando en su forma humana.

Bostezó perezoso y se removió en la cama. Escuchaba sonidos fuertes desde el exterior, pero Jimin ignoró todo aquello. Seguro el híbrido estaba en la cocina, y su cama era demasiado calentita como para abandonarla tan rápido.

De repente sintió un sonido fuerte dentro de su habitación que aceleró su corazón. Jimin se puso alerta, pero sus ojos todavía no se abrían.

—Miau~

Ronroneos fuertes y unas patitas peludas que se posaron encima del pecho hicieron que Jimin poco a poco abriera los ojos.

Ahogó un grito asustado cuando se encontró con un gatito viéndole atentamente.

Estaban tan cerca que el omega podía detallar con suma facilidad aquellos ojos rayados que seguían el movimiento de sus parpadeos, con los bigotes moviéndose y rozando la piel de sus mejillas y, aquella naricita húmeda y rosita que estaba pegada a la suya.

¿Cómo se supone que el gato entró en su habitación?

—Señor bigotes —murmuró en un susurro, mirando al gatito que estaba cómodamente sobre su pecho.

—Miau~ —respondió el híbrido, soltando más ronroneos.

El omega alzó una ceja interrogante cuando el gatito se acurrucó a su lado, detalló en la colita felpuda que se movía de forma inquieta y en la forma que el minino no dejaba de mirarlo.

—¿Señor bigotes? —inquirió dudoso.

El gatito se recostó sobre el lomo y desde ahí le siguió mirando.

—Miau~

Entonces Jimin comprendió que el felino estaba en busca de sus mimos.

—¿Quieres mimos? —terminó preguntando. No terminaba de familiarizarse con la idea de acariciar un gato, y no quería equivocarse.

Los bigotes contrarios se sacudieron contentos, mientras que los ronroneos se volvían más fuertes.

—Miau~ —soltó el gatito, frotando la cabecita en el brazo del omega.

Jimin sintió derretirse en completa ternura ahí mismo.

El omega movió con cuidado su mano izquierda, y teniendo sumo cuidado comenzó a acariciar la cabecita del gato.

El minino cayó completamente rendido con las caricias que estaba recibiendo, estiró sus patitas y cerró los ojos, tan sólo dejando sus ronroneos fuertes que demostraban la comodidad que estaba sintiendo.

Los deditos cortos de Jimin jugaron con las orejitas peludas y chilló enternecido cuando miró al minino abrir la boca y sacar la lengua rosita que era tan diminuta como el meñique del omega.

—Eres un gatito tierno, señor bigotes —afirmó el castaño en un susurro quedito, pues pronto descubrió que el híbrido había caído rendido en el mundo de los sueños.

Y Jimin supo que le gustaba un poco más la idea de vivir con aquella bolita de pelos.

¡Tenemos 3k de leídas! 😭😭😭😭😭😭

De verdad que les agradezco tanto apoyo y cariño. Soy muy feliz al saber que esta mini historia les está gustando.

Más tarde estaré publicando otro capítulo, así que atentos. 😼

Muchas gracias por leer. 🥺💕

Yoongi mirando a Jimin dormir luego de colarse en la habitación del omega:

🐭Tita.