#4;; La repisa esta doblada.

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Tiempo en la cocina.

La rutina de día era siempre agotadora, Harry se iba a trabajar cada mañana, Robin salía con Doi a hacer compras y regresaban para limpiar el hogar además de que el pequeño niño debía tomar sus clases en casa, impartidas, claro por Robin.
Después tenía que estar casi toda la tarde haciendo deberes variados.

Era obvio que como niño no le gustará hacer tarea todo el día, así que esperaba ansioso en la noche, cuando Robin dejaba su obsesión de limpiar y darle a él más tareas, por fin se relajaba en su mecedora a leer el periódico. Después llegaba Harry de trabajar y hacia la cena para los tres.

Oh si, la cena, adoraba esto, estar los tres juntos y hablar de cualquier cosa, ya sea un tema en particular o algo muy, muy específico.
Tal vez el tema de esta noche era demasiado específico.

-Doi, por favor lleva los platos a la mesa, en un segundo iré con la cena.

-¡Cómo digas Harry!

El pequeño niño dio un brinco alegre, se acercó a la barra tomando la losa blanca y yendo feliz a otra habitación.

-Ten cuidado -le dijo antes de que el niño saliera de la cocina.

-¡De acuerdo!

Si bien podían cenar plácidamente en la cocina, a veces solían comer en la sala de estar, dónde se sentaban a platicar y comer en el sofá o a ver la televisión los tres juntos, esto encantaba al pequeño Doi.
Esta noche cenarán ahí.

Robin permanecía sentado en su mecedora de madera, leyendo el periódico que contaba los acontecimientos que pasaban en el mundo exterior, desempleo, guerra, contaminación, oh si, el día a día en el mundo.
Y por más deprimente que fuera, podía pasar horas ahí, quejándose de hasta como respiraban los activistas.

-Ja, devaluación de la moneda, típico. -se ajusto los lentes redondos.

El pequeño Doi llegó a dónde se encontraba el mayor, dejo los platos en la mesita que estaba ahí frente al sofá rojo.

-Hey pequeño, ¿Cenaremos aquí? -pregunto el peli verde aún leyendo su periódico.

-¡Ajam! -asintió.
Colocó tres platos en la mesa con su respectivo plaqué.

-¿Que hizo de cenar tu padr...?¡Harry, quiero decir, Harry!

Se corrigió antes de terminar.

-. . .¡Espagueti! -responde sin captar que había sido eso.

El mayor estaba por hablar pero apenas abrió la boca, un estrepitoso sonido de algo quebrandose los distrajo. Alarmado, se levantó y fue rápidamente a revisar.
Doi también fue con él.

Llegó a la cocina y encontró un plato de forma cuadrada, que ahora estaba hecho pedazos en el suelo. Al lado permanecía Harry, tenía un semblante indiferente apesar de haberse cortado la palma de la mano con los cristales; la sangre incluso bajaba por su antebrazo y el apenas movió las cejas.
Doi se preocupo demasiado.

-¡H-Harry! -corrió al lado del mayor.

-¡Doi, te vas acortar!

Robin alcanzo a alzar en brazos al niño, con cuidado paso por otro lado.

-¡Ahg! ¿Quieres decirme que paso aquí? -llego hasta el peli rojo

-Intente sacar un plato de la repisa, pero olvide que seguía doblada hacia afuera.

Ajustándose los lentes, Robin rodó los ojos hacia arriba.

-Te dije cientos de veces de debemos arreglarla de una vez, si la dejamos así Doi se va a lastimar.

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