𝐋𝐎𝐕𝐈𝐍𝐆 𝐘𝐎𝐔 𝐁𝐄𝐓𝐖𝐄𝐄𝐍 𝐑𝐄𝐀𝐋𝐈𝐓𝐈𝐄𝐒© ⦁| 𝖥𝗒𝗈𝗓𝖺𝗂 °|⦁ ❪✔❫

10. ɱαƒเα

| Declimer |
Bongou Stray dogs (ボングー迷走犬 Bungō Stray Dogs) es una serie de manga escrita por Kafka Asagiri e ilustrada por Sango Harukawa.

| Géneros: Moderno / mafia/ Juvenil|

❲FʏᴏZᴀɪ❳ - - - -➻ ϴΝᎬ ՏᎻϴͲՏ

10/10/2022
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La primera vez que lo vio, Osamu pensó que sería la última.

O eso esperaba pues si no era así realmente estaría metido en grandes problemas. Incluso muchos más grande de los que Chuuya provocaba después de una misión de el doble negro.

Dazai no era de aquellas personas que era fácil de impresionar ni siquiera a sus trece años le impresionó mirar un asesinato delante de sus ojos, la sangre fría estaba en sus venas, un veneno que su mentor Mori Ougai floreció aún más con el pasar de los años. Su temperamento era frío, calculador y meticuloso, no hacía ningún movimiento sin pensar antes diez veces diez resultados diferentes. Sin embargo, a sus ya dieciocho años estaba por primera vez impresionado, anonadado y aturdido con una persona.

No fue Chuuya su compañero de años, ni Akutagawa su actual subordinado ni siquiera su actual mejor amigo Odasaku, no, era una persona fuera de todo el círculo que rodeaba la mafia portuaria y aquello le daba una mala jugada.

No sabía cuánto tiempo llevaba ahí, de pie, inmóvil en su sitio y mirando a aquel chico con indecisión en su mirada, mientras su mente debatía lo que debía hacer o no.

Pocas veces a no decir nulas se había visto en aquella encrucijada. Y eso, quiera o no, le asustaba.

Hay bajo las tenues luces de farolas que a duras penas lograban alumbrar el inhóspito callejón su mente no paraba de debatir duramente entre sus órdenes y sus “principios”, no había nadie con el, no estaba su escuadrón ni su compañero, ni siquiera su perro más fiel Akutagawa, estaba solo, alejado de todas las vistas posibles mientras  a lo lejos el sonido ahogado de gritos, golpes y balas cruzadas sonaban como una película de acción.

La fina lluvia que cubría la ciudad empapaba en esos momentos el fangoso cemento debajo de sus pies, era sucio y desagradable sin mencionar el fuerte olor a podrido que había en aquel oscuro callejón.

Osamu suspiro con pesadez, trago saliva con el fin de deshacerse de el nudo que se comenzaba a formar en su garganta e intento con todas sus fuerzas el olor nauseabundo que se comenzaba a intensificar ya fuera por el movimiento de el animal o ser vivo muerto o de su propia ilusión. Con su traje mojado casi pegado a su cuerpo y manchado con claras muestras de sangre, mechones de su cabello estorbaban su visión  y la pistola agarrada con fuerza entre sus manos, el chico miró nuevamente la persona delante de él.

“Dazai-Kun, tienes que eliminarlos, que no quede rastro, asesina a cada rata”

Las palabras de Mori llegaron a su cabeza sintiendo como su razonamiento era afectado en aquel momento, nunca le había pasado eso, él siempre había sido una persona segura que aunque fuera dada una orden no siempre la tenía en cuenta a la hora de trabajar.

Las gotas de lluvia caían sin cesar, resonando al caer y formando una siniestra sinfonía junto con el creciente viento, haciendo que se desconcertara. No podía pensar bien, todo a su alrededor se estaba distorsionando, los sonidos, los colores, las sensaciones. Todo, su corazón comenzó a latir descontrolado y sus manos comenzaron a temblar. Suspiro con dificultad intentando tranquilizarse sin ningún éxito.

“La traición es un acto que la mafia no perdona”

La voz volvió a resonar provocándole aún más conflicto, tenía razón, la mafia no perdona, no lo hace, ellos tarde o temprano acaban a cada una de las amenazas, a cada uno de los traidores.

“Elimínalos”

Eliminarlos a todos, borrarlos de el mapa hasta que no quede nadie, ni uno solo. Apuntar sus armas y las de sus hombres a la cabeza y cuerpos de los enemigos, para que aprendan la lección, para que entiendan que con la Port mafia nadie juega.

Pará qué supiesen quienes mandaban  en Yokohama, sin un ápice de empatía o compasión. Ese era el fin de su misión. Eso eran lo que les habían encargado, lo que había aprendido estando en primera línea de la mafia.

Entonces…

¿Por qué estaba tan nervioso? ¿Por qué se sentía incapaz de hacerlo?

Su vida en la mafia había sido siempre sangrienta, nunca tuvo compasión o remordimiento, muy al contrario disfrutaba de observar el dolor humano y el color carmín salir de cada uno de las partes de el cuerpo. Sin embargo, no podía, en ese momento no podía siquiera tolerar el peso de el arma que cargaba en sus manos.

Asesinar es fácil cuando la persona es desconocida, cuando no la conoces o tienes malos sentimientos hacia ella, sin embargo por primera vez en todo su tiempo en las tinieblas de la oscuridad sentía aquel sentimiento que tanto negó en aceptar.

Compasión.

── “asesínalo, elimínalo” ── pensó agarrando con fuerza el arma de fuego entre sus delgadas manos.

El peso, el peso de el arma era mucho más grande de el que recordaba, pero, no podía hacer nada, por más que quisiera y que aquel sentimiento retumbaba en su pecho.

Miró nuevamente aquella mirada violeta, el chico delante de él, tirado y casi moribundo también lo miraba, odio era lo único que podía observar en aquellos orbes.

Odio, irónico la mayoría de las personas lo miraban con el mismo sentimiento hasta el mismo lo hacía cada vez que se miraba en el espejo.

Su misión había sido sencilla en un primer plano, la destrucción de una oposición pequeña  pero con gran poder que amenazaba sus medios. Sin embargo aquella misión que inició siendo algo completamente usual se terminó convirtiendo en el mismo infierno para Osamu Dazai.

── No puedo… ── susurro para sí mismo solo moviendo ligeramente los labios. Bajo el brazo izquierdo, aquel con que mantenía el arma apuntando.

Los orbes violetas lo miraron con impresión, había bajado el arma de una manera que aunque estuviera cien por ciento consiente sabía que era de rendición.

Su vista se comenzó hacer borrosa, estaba agotado de tanto dolor. Todo se volvió negro en un par de segundos dejando en su mente solo el rostro de su atacante.

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Me disculpo por el atraso de tantos one shots pero estuve entretenida con otros asunto que siempre me acordaba cuando ya me hiba a dormir :')

El siguiente lo publicaré en unas horas, ahora ando con un Internet lento y un cerebro frito. Bye~