Tomaru- Shinichiro/Manjiro Sano

22

Darin

—Manjiro...

—No.

—Pero...

—No quiero que se involucre en esto.

Suspiré rendida, salí de la habitación para ver al trio de amigos frente a mí, ciertamente, había superado muchas cosas en estos años.

—Lo siento, Shinichiro, será mejor que te vayas.

—Eso quiere decir...

—Manjiro no quiere verte.

Negué, a la vez que iba a entrar nuevamente, pero una mano me detuvo, mientras la puerta era abierta con fuerza.

—¡Espera! ¡No entres así!

—Manjiro...

—Vete, Shinichiro... —tomé el brazo de Shin para sacarlo, pero se negaba hacerlo —¿Qué es lo qué quieres? ¿Seguir dañando a Darin? ¿Olvidar a Emma? ¿Qué más quieres Shinichiro? Ya no te estorban.

—¡No es eso! 

—Shinichiro, por favor —jalé con más fuerza su brazo, pero, a pesar de ello, fue inútil y terminé en el piso.

—Darin... —Manjiro vino a mí, para levantarme, a la vez que miraba a Shinichiro —Sanzu, llévala con Emma.

—Sí.

Terminé a un lado de Sanzu, mirándolos por última vez para ir con Sanzu, no podía presentir nada bueno de esto, pero, no tenía otra opción, junto a Koko estaba ayudándolos a que no los descubran, y parecía algo difícil, tuve que mover muchos hilos.

—Ve, Sanzu, yo estaré bien, ahora que la Kanto está en la cima, no sucederá nada, por ahora, ve con Manjiro.

—Pero...

—Ve.

Lo empujé para la dirección de la que veníamos, para ir a la habitación, ahí Emma miraba con adoración a Draken, mientras el hablaba de algo.

—Darin-san.

—Draken-chan, es bueno verte, aunque Manjiro esté enojado en estos momentos.

—¿Qué sucedió?

—Shinichiro, eso sucedió —me senté frente a ellos, contándoles lo sucedido, a la vez que se miraban serios, entendían lo que sucedía, había logrado convencer de que Draken esté cerca de nosotros, lo aceptó de mala manera por Emma —Siento que terminará golpeándolo como a Takemichi.

—¿No deberíamos ir?

—Ya nos llamaran si eso sucede.

Me preparé para hacer un poco de comida, Draken debía alimentarse bien, al igual que Emma, obligaba a Manjiro a comer, a la vez que comía igual con el.

Una vez comieron, se fueron a su habitación, fue algo difícil que viva aquí, pero estaba hecho, a la vez que la puerta se abría, y ambos hermanos entraban por la puerta.

—Manjiro, la cena está lista.

—¿Uh? Si, gracias Darin.

Le sonreí a Shinichiro para poner los respectivos platos frente a ellos, parecía que las cosas se resolvieron por si solas entre ellos, pero...

—Iré a la habitación, descansa, Shinichiro.

—¿Uh? Tu igual, Darin, gracias por la comida.

Asentí, mi habitación..., prácticamente se constituía en la de Manjiro, pero, con Shinichiro aquí, de seguro y podrá dormir un poco sin pesadillas de por medio, o eso quiero creer.