¿Castigo O Bendición? [Luckity]

Capítulo 24

Staxx tenía la respiración agitada, desde que escuchó una explosión, rápidamente dedujo de qué se trataba. Corría tanto como podía para lograr llegar al pueblo. No había logrado encontrar a Merlon en todo ese tiempo.

Retiraba un montón de ramas con agresividad. Estaba desesperado, hubiera optado por seguir buscando al anciano y simplemente pedir que regresaran al niño.

Realmente no era tan simple como pensaba, sólo no lo sabía.

Dirigió su mirada al cielo, estaba iluminado pero era tenue, también pudo notar que había mucho humo. Al estar distraído, terminó chocando con cierta persona provocando que ambos cayeran al suelo. Estaba por pararse y empezar a insultar a esa tercera persona, pero se quedó callado cuando vio que se trataba de Merlon.

-Que agradable encontrar a un héroe, estaba por juntarlos a todos para detener a Luzu y Quackity.

Staxx se molestó.

-Agradable mis bolas. Sabes perfectamente lo que quieren.

El anciano suspiró, lo sabía, pero hacer una petición a los dioses no era sencillo. Él sólo era el que hacía los mandados.

-No puedo.

-Por favor Merlon, terminarán destruyendo todo el pueblo.

-Para eso están ustedes, deben proteger a los habitantes a toda costa.

-Seguirán destruyendo todo a su paso si no les regresan a su hijo. ¿Los dioses son unos idiotas? ¿No pensaron en las consecuencias?.-Miró al cielo.- SOIS UNOS GRADÍSIMOS HIJOS DE PUTA.

-¿Qué crees que haces?

Tan pronto como dijo aquello, un trueno cayó en frente de Staxx. No se inmutó.

"Deténganlos y luego nos haremos cargo de ellos."

Se quedó quieto, la situación lo enfurecía de sobremanera.

-No lo haré y dudo mucho que los demás quieran. Vegetta y Rubius no pueden venir. Mangel sigue en esa misión, a Fargan le da completamente igual lo que ocurra, Alexby no llegará a tiempo y dudo mucho que Lolito pueda solo contra esos dos.

"Es vuestro deber"

-Sólo regresa a su hijo y se detendrán. ¿No que los dioses velaban por la seguridad de Karmaland?

Los dioses son seres poderosos, son seres sobrenaturales a los cuales siempre se les ha rendido culto. Su poder puede afectar a la realidad y el destino de cada ser humano que habita Karmaland. Capaces de crear vida, al igual que quitarla. A simple vista, ellos podrían llevarse a la pareja y problema solucionado. Pero su preocupación estaba en los habitantes ¿Por su seguridad? En cierta parte ¿Por su reputación? Bastante. Tarde o temprano todos se enterarían sobre la razón de sus acciones y terminarían siendo odiados por los pueblerinos. Esos mortales eran empáticos y blanditos, como ellos les decían.

¿Muy pendeja su razón de pensar? Puede que sí, pero siendo sinceros, los dioses pueden llegar a ser ególatras.

Pero no regresarían al bebé fácilmente, tenían una idea.

"Bien, lo regresaremos. Aunque sólo a uno"

Staxx cambió su rostro de fastidio por una de confusión. ¿Cómo que sólo uno?

"Debes elegir ¿Lucky o Titanicus?"

[...]

En el pueblo sólo se lograba escuchar gritos y llantos. La mayor parte de las casas estaban incendiándose y otras ya se encontraban completamente derrumbadas. En el edificio más alto, estaba la pareja viendo impacientemente al cielo. Había pasado una hora desde que iniciaron el ataque pero no recibieron alguna señal sobre ser escuchados.

No se iban a rendir tan fácil, aún tenían una carta bajo la manga, aunque sólo la usarían si la cosa empeoraba. El menor caminaba en círculos, no se caracterizaba por ser una persona paciente. El castaño miraba afligido todo el panorama catastrófico, no era por pena, era porque de cierto modo le recordaba a algo. Le provocaba un desagradable sentimiento. Quackity al notar esto, lo tomó de las manos notando que las tenía ligeramente sudadas pero no le dio mucha importancia.

Se miraron por unos momentos. Poco a poco la molesta sensación que tenía se fue desvaneciendo. Estaba agradecido, no era el momento para que se perdiera entre sus pensamientos, tenía prioridades. Aunque no pudieron evitar perderse entre sus miradas, sin embargo, rompieron contacto visual cuando una flecha con fuego pasó entre ellos. Con la mirada, buscaron al arquero.

Vieron a Lolito y Alexby un poco a lo lejos, estaban posicionados para lanzar sus siguientes ataques. Luzu reaccionó rápidamente y jaló a su novio para cubrirlo con el escudo que había cerca de allí.

Así fue como empezaron una batalla. Intercambiaban flechas, pero la pareja comenzó a desesperarse cuando se fijaron que ya no quedaban muchas. Mientras tanto, el otro dúo se acercaba de a poco para poder acorralarlos. El mayor no era tonto, sabía lo que tramaban, así que rápidamente le hizo una seña al chico pato para que detuviera los ataques y señaló la palanca que estaba cerca de la iglesia.

Bajaron del edificio tan rápido como pudieron y se dirigieron al lugar señalado. No lograron avanzar mucho ya que el dúo había llegado justo a tiempo para detenerlos. Luzu se encargaría del de Casco y su patito se encargaría de Lolito.

-No queremos lastimarlos, paren con esta locura.

La pareja hizo caso omiso y empezó a atacar.

Al principio parecía que todo marchaba bien para Luzu y Quackity, pero el menor se confió y terminó siendo derribado por el de cabellos naranjas, forcejeaba todo lo que podía para no ser herido por la espada. Mientras tanto, el castaño tenía mucha ventaja, aprovechaba que la condición de Alexby no era la mejor gracias a su brazo. Dio su golpe final, con el mango de la espada, terminó noqueando a su contrincante. Se detuvo un momento para recuperar el aliento, volteó a ver a su novio y se dio cuenta de la posición en la que estaba. Trataba de sujetar a Lolito de las muñecas para evitar que la espada lo tocara. Corrió para poder ayudarlo, usando el peso de su cuerpo, lo empujó hacia un lado con toda su fuerza.

-QUACKS, LA PALANCA.

El menor reaccionó y se levantó para ir hacia la palanca que estaba escondida en la iglesia, bueno, lo que quedaba de ella. El mayor usó su peso corporal para que Lolito no lograra levantarse.

Era ahora o nunca, su petición jamás fue escuchada y habría consecuencias por ello. Justo cuando sus dedos estaban por tocar el metal, se quedó estático.

-¡Pa-pá!

Inmediatamente pudo reconocer la voz de su pequeño hijo.

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HOLAAAAAAA.

No se me da bien narrar batallas, así que imaginen cualquier cosa, si quieren hasta rayos láser alv. El siguiente capítulo es el final, luego el epílogo.

Por cierto ¿Recuerdan que mencioné que quería hacer un tiktok leyendo sus comentarios? Pues, el plan era hacerlo antes de publicar el capítulo final, pero al escuchar mi voz me arrepentí xD.

En fin, buenas noches.

(Ayuda, me enfermé.)