Dulces Melodias

Dinastía.

El funeral fue tan triste como pudo haber sido, niñas llorando la perdida de su madre, Vaemond dando su estupido discurso, la reunion de Daemon y Rhaenys consolando de sus nietas.

─Daeron, ven aqui─ Lo llamo Rhaenyra en voz baja mientras movia su mano hacia su hermano, Daeron, bendito sea, se apresuro a tomar la mano de la unica mujer a la que conocía como madre.

─¿Qué pasa, mamá?─ Hace mucho tiempo había renunciado a la idea de llamarla hermana, ahora solo era mamá y nada más. Por mas que sus niñeras y Ser Criston intentaran hacer que la llamara de otra manera.

─Escuchame, despues del funeral, te quedaras con Lord Corlys para ser su copero y despues su escudero─ Le conto acariciando sus mejillas ─No puedes regresar con nosotros a Desembarco del rey, pero nos veremos todas las semanas─

El niño ya sabía de esto con anterioridad, eso no hizo que se soltara de su madre, el abrazo con toda la fuerza que sus pequeños brazos pudieran tener. No quería separarse de ella tan pronto, considerando que sus hermanos no lo habían hecho, pero lo entendía.

El rey Viserys quería mantener las relaciones con otras casas, Rhaenyra evito que lo enviaran a un lugar donde le harían mas daño que bien y estaba agradecido por eso. Aun si le dolía.

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El hermano de Alicent llama a los hijos de Rhaenyra bastardos, llama decepciones a sus propios sobrinos por dejarse lavar el cerebro. Esta en un alto estado de ebriedad, Aegon intenta alejar a su familia, ya las hijas de Daemon del loco ebrio, pero cuando se lanza a atacar a Jace... Luke ataca con la daga que se le cayo a este Hightower.

Pierde el ojo. La casa Hightower exige una compensación, pero no hay nada más allá de lo monetario y un castigo ligero para Luke.

─No es mi hijo quien llevo una daga a encontrarse con sus familiares─ Le dice a su padre Viserys, quien asiente lentamente y se niega a dar otro castigo a sus nietos.

Rhaena y Baela se esconden detras de Rhaenyra, aunque mas que nada es porque Halaena ha tomado sus manos y se niega a soltarlas. Mas tarde, esuchan a la niña susurrar.

─Estamos a salvo─ Dice a nadie en particular ─El carrete verde se hace cada vez mas pequeño y el carrete negro crece, el dragón protege a sus crías y ahora son una de nosotros─

No saben lo que significa, pero por algun motivo estan felices.

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─Odio a los dioses por hacerme como soy

─Yo no─ Rhaenyra le sonrió ─Eres un hombre honorable, con buen corazón. Eso no es común─ Rhaenyra le había sonreído. Laenor le recordo del acuerdo de años atras.

─Sir Qarl regresara a los peldaños de piedra─ Le dijo de pronto ─Pero me comprometo contigo, para fortalecer nuestra casa y prepararte para tu ascensión. Criare a nuestros hijos como principes.

─Laenor─

─Te mereces algo mejor de lo que ha sido. Te mereces un esposo.

Rhaenyra penso que Laenor, quiza se forzaría a ser el esposo que ambos habían acordado, oh, como lamentaría ella no haber hecho preguntas en ese momento.

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Laenor finge su muerte, Rhaenyra esta tan destrozada por su muerte como Rhaenys. Porque esto se planeo tanto a sus espaldas como las de Rhaenys. Daemon, Ser Qarl y Laenor eran los únicos enterados.

Excepto que... mientras Laenor sube al barco, se da cuenta de un par de figuras que corren hacia ellos, demasiado pequeños para ser soldados, demasiado grandes para ser sus hijos. Entrecierra los ojos y se pone una mano sobre sus ojos para ver a traves de la niebla y lluvia.