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El Kunai enviado rozó la mejilla del muchacho, provocando un leve pero notable corte

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El Kunai enviado rozó la mejilla del muchacho, provocando un leve pero notable corte. Tan rápido como apareció se esfumó, sanando instantáneamente por el poder de la Bestia que aguardaba ser usado.

Falló el tiro a propósito, era un entrenamiento después de todo. No quería matar al joven que debía entrenar y guiar, pero aún así habían errores notables, casi de novatos.

-(Es distinto a cuando entrena con los Clones de Sombra, no está manejando la misma confianza)-Frunció el entrecejo, comprendía bien lo que sucedía.-(Está atacando, eso es un hecho, pero la defensa predomina en su actuar).

Sellos de mano ocurrieron en rápida sucesión, imposibles de ver para el ojo común y complicados para el Shinobi novato. Aspiró aire como si fuera su última bocanada, combinándolo con el chakra interior para darle forma al movimiento.

Naruto se dió cuenta de ello, algo que felicitaría cuando la oportunidad apareciera. Sin embargo poco podía intentar para detener el Jutsu en formación.

Estiró su rostro hacia adelante, liberando una gran Bola de Fuego, tan caliente que el césped alrededor se quemaba. Altas temperaturas cubrieron brevemente la zona, dejando desorientados a los animales circundantes por lo abrupto del cambio.

El Uzumaki convocó una serie de Clones, formando un escudo humano con ellos y esperando que lograrán resistir el asedio. La masa ignea llegó no mucho después, chocando contra aquella defensa improvisada.

Varias explosiones se oyeron en simultáneo, liberando blanquecino humo tras el cruce de movimientos. Jiraiya mantuvo la vista en ello, esperando encontrar la silueta del muchacho, sin embargo... No la encontró.

-(¿Se retiró hacía la arboleda?... No, ya veo)-Sintió el cambio en la tierra donde estaba apoyado, él no era un sensor, pero hasta los ninjas menos experimentados podían sentir las fluctuaciones de chakra de una forma u otra.-(Truco básico del libro por lo que veo).

No reaccionó, esperando el movimiento obvio que seguiría a la técnica. Algo que se corroboró un segundo después, cuando dos manos traspasaron el suelo donde entrenaban.

Dió un pequeño salto, abandonando el centro del ataque y atrapando la palma izquierda del usuario. Tirando para expulsarlo y revelar el cuerpo completo.

-Jutsu Cazador de Cabezas, no es una mala técnica, aunque si predecible.-Jiraiya explicó con sencillez, observando a su alumno.

El muchacho estaba plagado de suciedad, producto del movimiento realizado previamente. La chaqueta naranja y azul tenía suturas sobre las suturas, unida una y otra vez por hilos interminables para hacerla útil.

Pronto debería cambiarla supuso, y eso que apenas llevaban un mes de viaje.

-Podría ser mejor si enseñarás otras técnicas para combinarlas.-Para escapar le envío una patada, nada demasiado difícil de evitar.

Un cambio en la profecía.Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt